22

7.2K 298 37
                                    




Max

El camino a casa había sido incomodo , ella no había dicho mucho y por mí eso está bien, quería tomarme unos minutos antes de hablar con ella, me conocía realmente y sabia que en cualquier momento los cosas se pondrían realmente mal, no me gustó ni una mierda los acontecimientos que acababan de pasar.

Por un lado había odiado que ella fuera tan malditamente insegura que había pensado que solo la quería para follar, que no se daba cuenta que ella era especial para mí;dos me cabreaba que pensara que era una carga para mí , cuando es todo lo contrarío, tenía mucho tiempo que no cuidaba de alguien además de mí mismo y eso me encantaba, y lo peor es enterarme que estaba casada y que el maldito bastardo la había tocado; tenía que saber quién era.

Ahora entendí aún poco más por qué era una mujer tan insegura, pero eso se acabaría hoy, no iba a permitir que el fantasma de un hijo de puta siguiera lastimando a mi mujer, tendría que hablar con ella, hacerle saber que ella no volvería a sufrir ninguna de las cosas que había vivido con el.

También tendría que hacerle saber lo hermosa y especial mujer que era, que para mí no era un juego, que la quería en mi vida. Como no tengo ni idea, ya que el romance no es lo mío , pero puedo pedir ayuda , aunque eso me haga ver cómo una marica.Pero primero lo primero tengo que hablar con ella.

Llegamos a la casa, me baje de mi moto y la ayude a bajar de ella, me voy dirigiendo a mi casa cuando me doy cuenta que ella no me sigue, se queda parada a lado de mi moto.

-Dallas que mierda? Por que no vienes? - mi estado está al límite

-No quiero entrar.

-Por que mierda no quieres entrar, acaso te ha picado algo. Mi voz era entre frustrado , enojado y con un tono que a muchos les harían correr

-Tengo miedo. Me lo dijo apenas un susurro

-De mi?

-En parte

-Dallas, no pienso hacerte nada, no te voy hacer daño

Parte de ella parecía relajarse pero aún había una parte en ella que dudaba

-No es solo eso Max, no quiero hablar sobre lo que te dije, no quiero hablar sobre mi pasado, o al menos aún no. Quiero ... quiero decirte todo, en serio pero a mí tiempo, y sé que si entro me precionaras para hablar y no quiero eso.

Diablos! Me mata está mujer, no sólo es hermosa , sencilla, sensible , también es inteligente, no podía pedir nada mejor, aunque me costara una bola, tenía razón , se qué le tengo que dar su tiempo pero no puedo, en mi naturaleza no está ser paciente, pero que puedo hacer? Torturarla?, obligarla a qué me diga el nombre de ese hijo de puta, nunca me atrevería a hacerle daño, era evidente que ella ya había sufrido mucho además eso de lastimar mujeres no era lo mío, tendré que ceder aunque sea unos días, haré todo en mi ser para ganarme su confianza.

-Nena ,te prometo que hablaremos de lo que que tú quieras, no tenemos que hablar de nada que no quieras o te haga sentir incomoda, pero vamos a hablar de un par de cosas.

Le ofrezco mi mano esperando que ella acepte, es el primer paso para intentar ganar su confianza, ella aceptó la oferta y tomo de mi mano.

Una ves dentro de mi casa seguí mi camino hasta mi recámara, me senté en la orilla de mi cama y lo posiciones de pie entre mis piernas , lentamente mientras la veía a los ojos,la fui despojando de su ropa, ella no apartaba la mirada de mis ojos, cuando estaba solo bragas le empece a besar sus costillas diciéndole lo hermosa que era su cuerpo, lo bella que era todo ella.

Amor y balasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora