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DALLAS

Cada vez que me despertaba en esa noche lloraba, lloraba por la traición de Max, de la traición de cada persona que había conocido en los últimos meses. Me sentía totalmente humillada.No era ninguna puta como para irme a acostar con el primer hombre que cruzara en mi camino, así que mi solución hacia este problema es acabar esto de raíz y solo se me ocurrió una forma.

Me acerqué a mi pequeño escritorio, tome lápiz y papel y le escribí una carta a Max

Max:

Lo nuestro se a acabado, no quiero saber nada de ti ni del club.

Dallas

Doble la carta, o bueno la pequeña frase, la puse en una carta, sabiendo que alguien del club estaría ahí me dirigí a buscarlos , me encontré con Shadow sentado en la sala, perfecto no tendría que hacer nada.

S- Hola Dallas, te encuentras mejor que ayer?

D-No! Pero lo estaré, quería pedirte un favor.

S-Cualquier cosa por la mujer de mi amigo- sus palabras solo lanzaron dagas envenenadas a mi corazón

D- Le puedes entregar esto a Max por favor

El pareció dudar pero tomo la carta.

D- Ahora Shadow a partir de este momento, no soy más la mujer de Max, no lo quiero en mi vida, ni a el ni a ninguno de ustedes.

Antes de que empezara a hablar me dirigí a mi cuarto y cerré con llave. Me sentía solo un poco mejor, ahora tendría que arreglar lo del trabajo, empecé a buscar desesperadamente en internet, tenía que encontrar uno rápidamente, después de horas y horas encontré uno en un bar a las afueras de la ciudad, llame y me programaron una entrevista para hoy, no podía ser más perfecto. Cuando salí para tomar una ducha, Anna se encontraba con Shadow, los dos me llamaron pero simplemente los ignore, tome una ducha larga, mientras estaba aquí prometí que estas lagrimas serían las últimas que lloraría por Max y su traición.

Salí, me vestí y sin más salí del departamento, ya en la calle Mole bajo de la camioneta , abriendo la puerta del copiloto para mí, yo simplemente lo ignore y me dirigí a la parada del autobús, afortunadamente cuando llegue ,pude tomar uno sin ningún inconveniente.

Unos 45 minutos después llegue al bar, su nombre "the deposit ",me recibió una mujer de unos 38 años , tenía un cuerpo corpulento, aunque se veía que hacía ejercicio,sus brazos estaban tatuados llenos de rosas, si nombre Candy, primero y antes de la entrevista me enseñó el lugar, este no era espectacular, tenía un total de 15 mesas, era obscuro como casi todos los bares, su decoración iba principalmente de colores rojos negro y toques de blancos.

Sin más empezó la entrevista, era una mujer fácil de llevar, a pesarde verse extremadamente dura, me hacía sentir cómoda, me explico que el bar iban toda clase de personas, desde trabajadores, chicos de la universidad, turistas, niños ricos etc pero que su principales clientes eran los moteros, perfecto yo que quería huir de ese mundo y parecía que me perseguía ,me explico que necesitaba a una camarera que pudiera trabajar de miércoles a domingo, con un horario de 7 p.m. a 3:30a.m. Sin más me pidió mi experiencia, está pareció que le gustaba, cuando me pidió referencias de mi trabajo me negué a dárselas, teniendo que explicar que mi actual jefe era por decir así el padre postizo de mi ex y que nunca me dejaría ir, a lo que ella dijo - Malditos hombres! Y sin más me dio el trabajo, cabe mencionar que mi teléfono no dejaba de sonar en toda la entrevista.

Amor y balasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora