Seduciendo al Seductor

Capítulo 49. ¿Quién es él?

Pov Mag.

Había pasado un tiempo desde la platica con Austin y aun no podía sacarme de la cabeza la voz de Oliver preguntándome por él. Yo misma era un desastre de ideas y pensamientos juntos para ordenar mis ideas y todo estaría resuelto.

―¿Le gustas? ―pregunto casi saltando de la emoción mientras Andrea se sonroja―. Debes tener una cita con él ―sentencio poniéndome frente a ella mientras caminamos.

―¿Y si solo quiere que me acueste con él? ―pregunta.

―Por Dios, Andy. Te lo repito de nuevo, no todos quieren tener solo sexo ―digo y unas cuantas chicas que me escuchan me miran haciendo que me ponga colorada y me ponga al lado de Andrea.

―Esto es serio, Mag ¿Y si termina siendo un pedófilo o peor un anciano?

―Lo has visto en persona y yo también porque he salido con ustedes, así que no puede ser un anciano, y eso no conto como una cita porque estuve ahí.

―¿Si es un psicópata?

―Andrea ―la detengo frente a mi casillero para cambiar mis libros―. Mira si quieres yo iré contigo, pero estaré lejos ―aclaro y ella asiente.

―Y si intenta secuestrarme...

―Corro, te trato como si fueras mi novia y te encontré siéndome infiel ―digo y ella se hecha a reír.

―¿Te vas a cobrar la de la otra vez?

―Salvare tu pellejo ―sonrió una vez termino con mis libros y empiezo a caminar.

―Ok y si ¿Nos intenta secuestrar a las dos? ―cuestiona.

―Lleva tenis y unos jeans que te permitan correr ―digo seria y Andrea se pone a reír.

―Mag, sabes que te amo ―dice.

―Claro que lo sé ―digo caminando con la cara en alto.

―No volveré a alimentar tu ego ―dice riendo y yo la imitó―. Entonces tendrás que irte sola a casa ¿No hay problema o sí?

―Para nada, estoy feliz por ti, aunque después tendrás que contarme cómo fue ¿Trato? ―pregunto.

―Trato ―dice sonriendo―. Te mandaré mensaje por si algo anda mal.

―Sí, estaré pendiente de los mensajes o llamadas.

―Bueno mi clase ya va a comenzar, entonces nos vemos al rato o mañana ―se despide Andrea con la mano.

―Sí y suerte ―le digo antes de verla desaparecer por el pasillo y dirigirme a mi clase.

Este semestre estaba pasando rápido, todos los maestros eran buenos enseñando y solo podía pensar en la graduación y en que el examen de ingreso estaba cada vez mas cerca y los nervios por saber si me aceptarían o no.

Mire la hora en mi celular mientras la profesora explicaba los cálculos que deberíamos hacer para el examen de la próxima semana, en manera de repaso.

―Señorita Covers, ¿Podría hacer este ejercicio? ―me tense mientras me ponía de pie para resolver le ejemplo y miré a la profesora una vez llegué al frente. Esta era una de las pocas con las que todos estaba callados o sino pasábamos al frente―. Quiero saber si ha entendido ―asiento con la cabeza tomando el marcador.

Este si que no era mi día no podía dejar de pensar y divagar de cosas sin sentido. Empecé a poner los números en la pizarra hasta que encerré lo que para mi era la respuesta y esperé a que me dijera si estaba o no correcto.