Vía al Infierno °SIN EDITAR°

LOBOS

-te lo agradezco Martinj. Estaré en deuda contigo - beso su mejilla antes de retomar mi lugar junto a mi esposo que no paro de refunfuñar durante todo el vuelo.

Con tan solo pedírselo el joven dj acepto sacarnos del club junto a él en su camioneta y después llevarnos consigo a su siguiente destino: Irlanda. Sabía que la verdadera razón de malestar de Abigor era que sabía de mi aventura de una noche con el chico después de una de sus presentaciones en Ibiza, un tiempo después de una corta relación con mi hermana. Aún sigo sin comprender como es que terminaron cuando el chico es perfecto. Pero confió en que Dominic es el hombre adecuado para Julieta a pesar de ser un dolor de cabeza.

-invítame a tu próxima fiesta y estaremos a mano. Debo admitir que me divertí en la última - enganche mi brazo al de mi marido esperando contenerlo por el atrevido guiño. Sabía que entre el chico y yo solo hay una amistad a pesar de avernos apoyamos de manera intima en un momento de debilidad para ambos, pero no se remonta a nada más. Nunca existió amor de por medio y eso me alivia. No me gustaría dañar a una persona tan especial para mí - te deseo suerte con tu hijo. Merecerse ser feliz, aunque asegures lo contrario. Además, el embarazo resalta lo bella que eres - confiaba en él lo suficiente para revelarle nuestra situación. Desde el principio él conoció lo que era y no tuvo miedo, aquello provoco que tuviera un instantáneo sentimiento de confianza. Era adorable, una excelente persona y me alegro de haber estado en aquella fiesta privada de David Guetta hace tres años donde lo conocí - envíale saludos a Julieta de mi parte - hablaba en un exquisito holandés con una radiante sonría en el rostro.

-por supuesto. Estará encantada de saber de ti.

Me despedí con un gesto con la mano antes de partir en la dirección contraria.

-estas muy feliz - espeta amargado Abigor.

-esto se pondrá incomodo - murmuro por lo bajo nuestro acompañante.

-no lo puedo evitar - ignore a Mexandre no permitiendo que mi sonrisa decayera - aprecio al chico y nuestro plan está resultando. Quiero confiar que nuestras esperanzas serán realidad.

Ante mi emoción Azieel no pudo más que disipar sus celos a pesar de sus intentos de parecer molesto.

-aun así, me parecían una excesiva confianza entre ambos.

-¿Acaso sabes lo estúpido que te escuchas? - mordí mi labio inferior intentando no reírme - si alguna vez existió algo entre ese chico y yo desapareció por completo cuando apareciste en mi vida. Quizás no tuve elección, pero no me arrepiento de estar a tu lado y que tu estés en el mío.

-¿Por qué maldita sea te comportas tan adorable cuando quiero reprenderte por tu inadecuado comportamiento? - detiene nuestra marcha a pocos pasos de la puerta para tomar mi rostro entre sus manos. El calor de sus palmas era una perfecta caricia contra mis mejillas.

-esto es realmente romántico rozando lo cursi pero realmente no tenemos tiempo para sus demostraciones raras de amor - refunfuña Mexandre.

-te amo - le di un beso rápido en los labios a Azieel y emprendí la marcha rápidamente.

-creo que lo mejor es que regreses a Egipto tu sola.

-¿Cómo dices? - lo interrumpí sorprendida.

-claramente si activas tu poder en presencia de Mexandre nos pondrás en el radar. Estaremos acorralados de nuevo.

-¿Y cómo es que si se queda contigo no se activara ese radar? - no me moleste en ocultar mi malestar ante la idea de alejarme de Abigor.

-se controlar mi poder mucho más que tú. Eso me ha permitido mantenerme oculto durante tantos años y eso mismo nos permitió mantenernos ocultos de Luzbel e Ilora.