¡Ah! Katsuki-sensei ¦Katsudeku¦

Capítulo 27

|¡Bienvenido a Fogosa comida!|

— ¡Midoriya, mesa cuatro!

— ¡Sí! —exclamaba el peliverde, secándose las manos con rapidez en aquella pequeña toalla blanca sobrepuesta en el pequeño mueble cercano al lavamanos.

Con velocidad, se dirigió a las afueras de la cocina, en la que se encontraba una alargada mesa, usada para organizar los humeantes pedidos. Cogió aquella redondeada bandeja plateada que contenía un enorme plato de sopa picante, junto a un pequeño recipiente con un pequeño ají rojo y un vaso de cerveza.

—Si que trabajas duro eh, chico. —dijo sonriente aquel anciano cliente que, según sus colegas, era uno de los clientes que venía con más frecuencia al local y por ello, uno de los más queridos.

— ¡Sí! Que disfrute su plato. —respondió Izuku sonriente, mientras le daba una pequeña reverencia.

—Da gusto ver rostros nuevos aquí. —sonrió el anciano mientras se disponía a degustar su picante y humeante sopa.

Llevaba ya una semana trabajando seguido en el local, exceptuando los martes y viernes. Izuku habló con su jefe aclarandole que aquellos días tenía un profesor privado que le ayudaba con sus estudios, su jefe al ver que su trabajador era tan dedicado y esforzado en sus labores lo aceptó, entendiendo de inmediato la situación del menor.

El ambiente laboral era amable, cálido y casi hogareño.

El chef, Akiyama, era un hombre ya mayor, de treinta y dos años, de cabellos rojizos e inmensos ojos azulados, mide 1.95 cm y es bastante fuerte. Cocina excelente, la mayoría de los clientes le dejan felicitaciones en una pequeña nota cuando se retiran del local, o simplemente le gritan: "¡Eh, te has lucido otra vez!".
Es muy activo, algo mal hablado pero muy sobreprotector con los suyos, siempre que algún cliente trata mal a alguno de sus compañeros sale a la defensiva, le importa muy poco que la comida se queme, para él es más importante mantener el orden y que nadie toque a sus pequeños retoños. Es lo que suele decir siempre.

Luego, está el joven cajero, Atsushi, de diecinueve años, de cabellos castaños y ojos color miel, mide 1.70 cm.
Se destaca por ser muy respetuoso y cordial, muy amable y algo tímido cuando le toca algún cliente cascarrabias. Suele estresarse bastante rápido cuando los pedidos tardan un poco más del tiempo estimado, pero es ahí cuando Akiyama interviene y le da golpes en las mejillas para calmarlo y así, que no se estrese de manera innecesaria. Se lleva muy bien con Izuku, y él fue quien se encargó de enseñarle todo y también, hacerle sentir como en casa de manera inmediata.

También está Emiko, que suele estar presente con mayor frecuencia los martes y viernes, cuando Izuku se ausenta, pero de igual manera está durante la semana, aunque menos horas que Izuku. Es la sobrina del jefe, tiene diecisiete años, de cabello azabache y ojos grises, es muy simpática, alegre y divertida, aunque también suele ser algo torpe, casi siempre se le cae algo. Ella trabaja porque le gusta ayudar a su tío y porque se aburre en casa, mide 1,63 cm.

Y por último el jefe, Hideo, de cincuenta y dos años, pelinegro y de ojos grises, mide 1.90 cm. Tiene un gran corazón y es muy amable, ama la comida picante tanto como a su familia, suele estar siempre en la cocina junto a Akiyama, lanzando chistes, compartiendo historias u organizando los materiales. Se ausenta por largas horas porque le gusta visitar parques para alimentar a las palomas y despejarse un poco.

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La mañana de Izuku el día de hoy fue bastante... peculiar. Era día jueves, había tenido matemáticas y biología por la mañana.