Capítulo 50

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Narra Trishelys:
Llegamos a la mansión y le pedí a Jaimy y a (Tu nombre) que me acompañaran a bañarme. Los demás se fueron a la sala.
Podía caminar, pero me sentía un poco mareada por los calmantes que me dieron. Me entré al baño con las chicas velandome, llené la tina de agua caliente y las chicas no se alejaron ni un momento. Lloré a gritos y ellas me consolaban.
Jaimy: llora todo lo que quieras te ayuda a desahogar y te llenaras de fuerzas nuevas.
(Tu nombre): tu sobrina tiene razón.
Trish: siento un dolor inmenso en mi pecho es como si me hubieran arrancando una parte de mi.
Jaimy: tía Chris te dejó una carta.
Trish: ¿enserio? Quiero leerla ¿dónde esta?
Jaimy: te la entrego cuando salgas de aquí.
Salí del baño, me puse mi trajecito y bajé con las chicas a la sala.
Richard: ahora que estamos todos juntos y un poco más calmados... Familia, tenemos que ser fuertes esto no es facil, pero lo podemos sobrellevar si nos apoyamos. Trishelys bella, cuentas con nosotros no te dejaremos sola.
Trish: gracias Rich, muchas gracias. Siento que no podré soportar esto, pero ustedes me llenan de fortaleza.
(Tu nombre): Chris te necesita fuerte y en tus 5 sentidos.
Jaimy: ¡atención todos! Cuando Zabdiel y Joel se llevaron a Chris encontré este sobre en la cama, pero pertenece a mi tía. Aquí la tienes, es tu decisión si la compartes o te la quedas.
Trish: la leeré para todos, es algo larguita.
Dice así:...
LA CARTA DE CHRISTOPHER.
Comienzo estas líneas dando gracias a Dios por los hermanos que me permitió conocer, por las cosas que junto a ellos pude vivir. Zabdiel, Joel, Erick y Richard ustedes son los mejores del mundo. No los cambio por nadie. Renato, eres el manager más loco y más cool. Daría la vida por ustedes. Los amo con mi alma y esté donde esté siempre voy a cuidarlos. (Trish y los chicos lloran)
Mi mamita querida, que sería yo sin ti, si tu para mi lo eres todo. Tu, mis hermanos, mi abuelita, mi papá ustedes fueron los que me apoyaron siempre en todo. Siempre los amaré y los protegeré, seré su angel guardián, se los prometo. Se que todos quieren saber por que lo hize y si, se que soy un cobarde y que les dejé un hueco en el corazón a cada uno que tal vez nadie nunca pueda ocupar, pero esto lo hize porque no aguanté más la presión, cometí errores que me llevaron a esto. No me era fácil cerrar los ojos y ver a Sarah morir una y otra vez frente a mi, noche tras noche. No me era facil vivir sabiendo que tengo una mujer perfecta a mi lado que vive para mi mientras yo vivo muriendo por otra. Con tanta presión, muchos no entiendo y cero respuestas mi mente se puso débil y mi corazón se desplomó. La depresión y la culpa se apoderaron de lo que soy. No me juzguen, esta fue la salida más fácil que encontré. Lejos de mi familia y sintiéndome solo aun estando acompañado.
Trishelys... Última, pero no menos importante. Gracias por estar allí en buenos y malos momentos, porque mientras más te lastimaba, más te quedabas y más me amabas. Siempre fuiste real y sincera para mi, me entregaste todo cuando yo no te di nada. Me amaste como nadie nunca me ha amado en la tierra. No hay nadie en este mundo que te merezca porque estas fuera del planeta en grandeza. Hay tantas cosas que sentía y no te dije. Amor mío lo que nunca te dije es como un avión de papel que se rompió al llover mojando sus alas con miedo a caer. Ya se que es tarde para esta confesión, pero necesito que sepas que TE AMO, realmente te amo no me sentía preparado para decírtelo y ahora que no estoy quiero que lo lleves contigo siempre. Te amo mi hermosa. Con esto me despido y se feliz amor yo te estaré cuidando. No me llores, no sufras por mi, mi alma descansa dentro de tu gigante pandita.
Perdonenme todos, los amo. Con ustedes siempre.
Christopher B. Velez Muñoz
FIN DE LA CARTA...

Narra Trishelys:
No puede ser Dios mío, siempre pensé que Chris no me amaba... mis lágrimas seguían callendo y las de todos en la sala. Nos fuimos a nuestros cuartos a descansar y Jaimy se durmió conmigo para no dejarme sola, busqué en el closet el panda que Christopher me regaló y dormí con él esa noche o al menos intenté dormir porque el dolor es tan fuerte que no conseguía el sueño.

No EntiendoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora