Reina Demonio

LA MISMA PERSONA

•Skillet-Awake And Live•

Camine intentando llegar a mi habitación pero en uno de los pasillo vi a Axel y Maximiliano, demonios... Ellos ya presenciaron la esencia.

Voltee lentamente para huir en otro pasillo pero  vi a Abby con una cubeta la cual me desvació y cubrió mi olor de demonio. Axel comenzó a reír y Maximiliano intentaba no hacerlo, un mujer venia corriendo hacia nosotros. 

— Señorita Abby... —la mujer se miraba apenada—el... —trago fuerte —el agua que acaba de tirarle a la señorita... —su voz se fue apagando—es... —lo que dijo lo susurro tan despacio que no pude oírlo pero Axel si porque empezó a reír como hiena y Abby me miraba apenada. 

—Axel será mejor que ya no rías— dijo Abby advirtiéndole. 

Pero siguió riendo, vi que había una cubeta que estaba llena de desperdicios, Abby quería que no lo hiciera mientras Maximiliano intentaba no reír para que él no saliera corriendo, cuando le arroje todo el desperdicio paro de reír y su nariz se arrugo por el asqueroso olor. 

Empecé a reír junto a Maximiliano, Axel abrazo a Maximiliano para ensuciarlo y él puso cara de asco para después empezó a reír y a lanzarse todas las cosas que las empleadas usaban para limpiar, tome esa oportunidad para dirigirme a mi habitación y poder tomar la poción. 

Tome un baño para quitarme el mal olor. Tendré que tener más cuidado. 

Estuve pensando sobre lo que dijo Abril, familia Black, tengo que averiguar más sobre esa familia ysobre los sentimientos y emociones que siento cada vez que veo a Maximiliano, las cosas en esta manada son muy extrañas. 

—¿puedo entrar? — preguntó Patrick entrando a mi habitación.

—Ya entraste— dije divertida, él se acomodó en mi cama quedando delante de mí. — ¿te dejaran quedarte en la manada? — pregunte.

— sí, pero antes tengo que pasar la prueba.

— ¿y cuál es la prueba? —pregunte curiosa. 

—Tengo que durar doce minutos con el alfa en una pelea —dijo tranquilo.

— ¿¡Que!? —Grite alterada —per... Pero él es bastante fuerte, no es por ofenderte ni nada pero no tienes ni las mas mínima posibilidad contra un alfa, y no es un alfa, es el alfa. 

—soy consciente de eso Elizabeth pero no me importaría morir por mi familia.

— ¿cuándo pelearas con él?

—en cinco días... —suspire.

—te enfrentaras contra el primer hombre lobo que ha existido en el mundo...

—y eso será un honor Elizabeth.

—eso no importa, él es bastante fuerte y si es necesario yo te ayudare a pelear contra él.

—no lo harás.

— ¿cómo estas tan seguro?

—Porque si intervienes en esa pelea no solo moriré yo  si no también tú — terminaría odiando a Maxiliano al paso que iba — me tengo que ir, cuídate Elizabeth —dijo y deposito un beso en mi frente.

Maximiliano es un exagerado, es imposible que alguien dure en una pelea con él. Un hombre lobo como él no es fácil de debilitar y ni de matar.

En cada especie hay un origen que nos describe y cuenta la creación de nuestra especie como la de los vampiros, el padre de los vampiros "Judas Iscariote", se le conoce como el primer vampiro. 

La de los hombre lobo la cual solo tienen permitido contar a los de su especie, eso no incluye a Abby.

La de mi especie, cuya demonio no se su nombre, algunos dicen que ella ya se encuentra muerta tras una pelea contra los lideres de cada especie, otros dicen que sigue viva y oculta en lo más profundo del reino demonio. 

Abby toco la puerta de mi habitación preguntándome si bajaría a cenar pero le dije que no, debía respetar lo que Maximiliano me pidió. 

Lo único que necesitaba ahora era descansar pero sin que Arlet esté en mis sueños, intente no dormir pero el sueño me gano.

Estaba en un bosque que se estaba incendiando, recorrí el lugar con la mirada y observe que era el mismo bosque en donde Chad y April me habían encontrado. 

—No de nuevo Arlet, solo déjame de una vez por  todas—  pedí. Mire a una mujer que caminaba hacia mi, era Arlet, me acerque a ella y observe que aun cubría su rostro.

— solo déjame salir...

— ¿para qué dañes a gente inocente?

—yo no lo haré, lo harás tú... —pude sentir como se posicionaba detrás de mí. 

Cerré los ojos para intentar despertar pero no funciono, ahora me encontraba en otro lugar, era el patio trasero de la mansión y ahí me encontraba yo con una espada junto con Abby.

Las dos reíamos pero la yo de mi sueño empezó a caer de rodillas mientras Abby se le acercaba preocupada, la yo del sueño tomo la espada y la inserto en el abdomen de Abby.

—¡¡Abby! —grite pero ya no podía hacer nada.

Abby sangraba y ella reía, voltee para poder atacar a Arlet pero ella me tomo del cuello.

—Pronto saldré... —se acercó a mi oído y susurro —y nadie me podrá detener, prepárate para la guerra...

— ¡Elizabeth! ¡Elizabeth despierta! —escuchaba la voz de Abby pero no podía despertar.

—Suéltame... —dije a Arlet con dificultad, ella aún sostenía mi cuello y me costaba respirar.

—escuchas.... Intentan despertarte...

— ¿por qué nunca me dejas verte? —pregunte.

—¿quieres verme?

—si...

Estire mi mano y aruñe su rostro jalando el velo que cubría su rostro, caí al suelo en un charco de agua, mire la prenda en mi mano y la vi.

—t...tú... —tartamudee asustada.

— sí, somos la misma persona Elizabeth... Y pronto seré solo yo... —dijo volviendo a tomar mi cuello entre sus manos.

— ¡Elizabeth! —esa era Abby, y el perro el cual ladro y me despertó...

—Ahh... —tome aire, salí de la bañera de la que me tenía Abby. Empecé a toser para poder sacar el agua que tenía en mis pulmones.

— ¿qué pasa? — escuche a Axel preguntar.

Me encontraba mojada y débil. Unos brazos me envolvieron, levante la mirada y me encontré con Maximiliano, lo observe a los ojos y lo empuje.

—Largo... —dije con la voz débil.

—Eli déjame ay- — detuve a Abby.

— ¡largo! — grite y Axel se llevó a Abby, Maximiliano aún seguía parado cerca de mi. 

—Dije que largo, no los quiero ver aquí... —tomo al perro en brazos pero el perrito empezó a resistirse por quedarse conmigo—al perro déjalo...

Cerro la puerta del baño dejándome solo con el perro.

—Gracias por despertarme... —tosí y el perro ladro en respuesta.

Este perro había sido mi salvación.

Odio a Arlet, no entiendo porque tuve que tenerla como demonio.