• Sia-Alive •
Cerré los ojos igual que Abby esperando que el dolor de la flecha apareciera, pero no lo sentí, al contrario, sentí como unos brazos me protegieron como escudo y escuche como él recibió la flecha por mí.
Abrí los ojos...
—Pa... ¡Patrick! —Grite intentado — sostenerlo pero ambos caímos al suelo— ¿¡QUE HAS HECHO!?—grite desesperada e intentando parar la sangre que salía de Patrick.
—N... No volveré a dejar que te hagan daño, Emily... —dijo cerrando los ojos.
—Patrick, no... Resiste... Por favor...
—¡Patrick!...Cariño estarás bien—dijo Abril llegando a nosotros y revisando a su marido.
—Eli... Ve por ayuda por favor— pidió Abril llorando.
No espere dos veces y salí corriendo lo más rápido que pude hasta llegar a la manada, me sentía desfallecer como si una parte de mí muriera, aunque lo conozco hace poco le he logrado tomar un enorme cariño y si le llega a pasar algo... Yo... Yo... No me lo perdonaría.
Llegue a la mansión y abrí la puerta de golpe encontrando con Maximiliano y Axel.
— Ayúdalo... Por favor—dije y Axel se posiciono adelante de mí tomando mi rostro en sus manos.
—Elizabeth... ¿qué ha pasado? —preguntó Axel intentando llamar mi atención, me encontraba ida y Maximiliano solo me observaba preocupado.
—Patrick... —dije en sollozos.
¿Por qué vine con ellos?, sé que hay una posibilidad de que no me ayuden por ser rogues. Axel no se preocupa por que si hubiera sido Abby él sentiría el dolor que ella siente por ser su mate.
Me separe de Axel y salí corriendo de ese lugar para volver con Patrick, me volvería demonio si era posible para ayudar a Patrick. Escuche sus pisadas detrás de mí y me detuve. Ellos se encontraban en su forma lobuna, llamó mi atención el lobo blanco.
— ¡LO LASTIMARON! —grite llorando, la desesperación que sentía cada vez era más grande.
El lobo gris me indico con la cabeza que subiera a su lomo y eso hice
Corría más rápido que yo y cuando logramos ver a Abril me baje dejando que ellos se transformarán.
—Sus latidos, son débiles...
— Por favor... ayúdanos— pidió Abril viendo a Maximiliano.
— Hazlo...—susurre en su dirección, Maximiliano asintió con la cabeza.
Maximiliano le mostró su muñeca a Axel y él se mostro sorprendido. Axel me observo para luego sonreír. Los ojos de Axel se tornaron del color de su lobo y su garra desgarro el brazo de Maximiliano.
ESTÁS LEYENDO
Reina Demonio
WerewolfLibro 1/4 Cuando eres un Demonio eres rechazada por todos, incluso por tus padres...Oh mejor dicho, por los que creias que eran tus padres. ¿Qué pasa cuando te enteras de que vives en una mentira? ¿De que no solo un demonio vive en ti? Lo único que...