Alexei

No le temas al fuego...

-Aquí sera donde el Master Mind del grupo maquine todos sus planes- señaló Aren, mostrando una habitación, con una mesa llena de planos. Planos pegados en las paredes, y hasta cortinas que eran planos en realidad-. Trabajarás aquí, y cada vez que termines con una plan, me avisarás a mí o al de cargo más alto que esté, a través del teléfono de allá... Eso es todo, si necesitas algo, me avisas.

-Perfecto- dijo Alexei, sentándose en su silla y juntando sus dedos-. Oh, antes de que te vayas, ¿podrías dejarme a solas con Alba? Me ayudaría a concentrarme.

La sonrisa en sus labios era malvada, provocativa, y burlona. Aren se enfadó a tal punto que tomó el objeto más cercano y lo aventó hacia la cara de su nuevo Master Mind. Sin embargo, Alexei lo esquivó.

-Tranquilízate- le dijo entre risas-. Solo era una broma, ya sé que es tu chica. Además, a mí me interesa otra persona...

Aren cerró de un portazo antes de que Alexei pudiera terminar. Debía estar rabiando, y la pobrecita de Alba de seguro no entendía nada.

-Veamos...- musitó-. La información básica que escribió el payaso de Aren dice que el robo se hará mañana. Traslados de dinero, y de unos cuadros importados. Pero este es uno de los bancos más importantes y prestigiosos del país. Habrá mucha seguridad. El equipo debe constar de tres miembros que se encarguen del saqueo, dos que manejen explosivos, un espía, y un falso rehén.

Esas eran las indicaciones más básicas. Después de eso, no había nada escrito. Y se supone que debían haber empezado la planificación hace un mes. Este tal Aren era un sujeto bastante despistado.

"¿Realmente crees que puedas con un peso tan grande?- preguntó Dementia, encerrando a Alexei en una pared de oscuridad imaginaria-. Es decir, piensa esto: tienes en tus manos la vida de siete personas, sería muy triste que por un simple error de cálculo pierdas a dos. Y si tuvieras tiempo... pero no. El robo se hará mañana- soltó una lenta carcajada-. Buena suerte, Álex".

-Cállate. Cállate- rugió en voz baja.

Al cabo de unas horas, salió con una expresión orgullosa a explicarles el nuevo plan a la pandilla.

-Antes de que empieces- interrumpió Aren con elegancia-, quiero destacar a los miembros del equipo: como los detonantes y encargados en fallos de seguridad tenemos a Ronin, y, haciendo su debut (por única vez, por cierto), Alba...

Todos los miembros lo miraron sorprendidos. Por dos razones en particular. Alba no sabía nada de la pandilla (ahora mismo se hallaba en la terraza, leyendo "De la Tierra a la Luna", un clásico que siempre le gustó), y porque a pesar de lo anterior, nunca hizo ninguna misión, así que no contaba con experiencia en el campo.

-...¿Bueno...? Los tres ladrones seremos Frederick, el nuevo Master Mind, y yo.

Alexei se mostró sorprendido. Él solo quería hacer un plan para matar el rato, no convertirse en uno de los criminales más buscados.

-El espía será Dämmerung, y la falsa rehén será mi hermana, que tampoco sabe que somos pandilleros, bueno... no del todo. Así que eviten hablar de más- agregó a los gritos.

-¿Puedo empezar?- preguntó el nuevo Master Mind con impaciencia, omitiendo el hecho de que estaba incluido en un plan que él mismo planeó-. La transacción comienza a partir de las 11:30 de la noche. Para evitar cualquier problema de robo, el banco decidió organizar una fiesta mientras el dato de la transacción pasaba disimuladamente. Con una fiesta, estaría justificado que haya seguridad extra.

>>Ahí es donde entramos la mayoría de nosotros, que pasaremos desapercibidos como invitados con identificaciones falsas que crearemos y colocaremos dentro de una lista de invitados electrónica.

>>Entrarán a la fiesta la falsa rehén, el espía, y la encargada en fallar la seguridad del sistema. Los demás, entraremos por la parte trasera cuando la seguridad falle y Aren reciba la notificación de Alba. Bien, eso es todo. La ruta de escape la diré mañana, para evitar cualquier problema malintencionado... No conozco a nadie de aquí, así que...

Y así como Alexei dictó las reglas y Aren los roles, pasaron veinticuatro horas y ya era el momento de ir a la fiesta que auspiciaba el banco.

Se dividieron en dos grupos. En un auto elegante (alquilado), iría el grupo A (con Alba, la hermana de Aren, y Dämmerung). El grupo B (Aren, Frederick, Ronin y Alexei), iría en una furgoneta camuflada, estacionando cerca a esperar el momento.

-Solo falta tu hermana, Aren- notó Alexei-. ¿Por qué no le cuentas que eres un pandillero? ¿Qué es lo que tanto temes?

Aren no quiso responder esa pregunta, y tuvo la excusa perfecta. Su hermana, Suga, acababa de llegar, con un vestido de calidad impresionante.

"¿Qué diablos...?".

-Aren, tú vienes conmigo. Ahora- Alexei no esperó respuesta de Aren. Lo tomó de la manga y lo arrastró hacia otra habitación-. ¿Qué hace ella aquí?

-Es mi hermana, inepto. Ya habíamos arreglado esto, ¿te acuerdas? Además, no actúes como si la conocieras.

-Pues la conozco- reveló-. Ella me regaló un pin por haberle salvado la vida, y hace poco salimos a almorzar...

-¡¿Que hiciste qué con mi hermana?!- le espetó Aren-. Nadie toca a mi hermana. Ella está bajo mi protección- logró decir en lo que pareció un gruñido.

-Protegerla, dices. Protegerla... ¡¿Con qué derecho lo dices tú?! Que la mandas a entregar droga desde los diez años. ¿Ese es tu concepto de protección? Cuando entré aquí me dio la sensación de que eras un patán cara de nabo... Veo que no me equivoqué. Como siempre, predije el resultado- alardeó, lleno de soberbia, acomodándose las gafas.

-¿Cómo te enteraste de...?

-Los miembros de tu pandilla no entienden tanto el concepto de silencio entre compañeros. Uno me soltó información sobre ti.

-Alexei, quiero que sepas que...

-...no me caes bien- dijeron ambos al unísono.

Se miraron seriamente durante un rato. Aren se notaba inquieto. Alexei, no movió ni un párpado, a pesar de sentir a Dementia sobre su espalda.

Al cabo de cinco minutos de silencio, salieron. Se podía ver una fuerte tensión entre ambos.

"Llega a pasarle algo a Suga, y te juro que te asesino con mis propias manos, Aren- juró Alexei".

El grupo B seguía al grupo A con media cuadra de distancia. Llegaron, pero se desviaron unas cuadras antes para evitar sospechas. El grupo B se escondió en el lugar planificado. El A, entró a la fiesta.

Para llamar la atención, Alba y Suga harían de una pareja de jóvenes lesbianas interesada en el arte anarquista, pero con modales refinados. De esta forma, Dämmerung tendría un acceso más cómodo a la hora de tomar el lugar de uno de los guardias de la transacción, y dar un falso reporte para distraer a la policía y a los guardias.

Una vez dentro, Dämmerung, gracias a la distracción (y fobia social de los invitados), logró hacerse pasar por guardia sin problemas.

Como era parte del plan, a los cinco minutos entraron Aren y Frederick, con máscaras y dispositivos que alteraban el timbre de la voz. Suga y una desconocida fueron tomadas de rehenes.

Por otra lado, en la parte trasera, Ronin estaba contando los explosivos y Alexei se estaba preparando para su primer gran golpe.