Del odio al amor... y viceversa

Noche loca.

<<Naur: Amigo de la infancia de Ran, es un elfo del fuego y controla dicho elemento.>>

*La imagen  de arriba no me pertenece (ojalá) es para que sepáis como es el  personaje físicamente(?)*  

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—¿Elegir? ¿A qué te refieres con elegir?—

—Es complicado.—

—¿Complicado? Más complicado es no recordar nada de lo que ha pasado estos meses, despertarme y ver que la mitad de los que me rodean son completos desconocidos para mí.— Enfadada por el comportamiento pasivo del elfo empezó a marcharse, pero Ezarel habló antes de que pasara por la puerta.

—Tuve que elegir entre una relación o tú.—

—Pues espero que esa relación te dure mucho.— Terminó de decir y se marchó.

Un golpe se escuchó detrás de la elfa, la cual no volvió la mirada, le daba igual lo que hubiera hecho ese elfo, no comprendía porque era tan cruel con ella, tan distante y frío como el hielo.

Sus ojos se detuvieron en un joven que pasó por su lado, le llamó la atención su cabello gris y sus ojos azules como el cielo se cruzaron con los suyos por un instante, Ran se detuvo mientras contemplaba aquel hombre.

—¿Has visto?— Halane, que vio a su amiga en el pasillo mientras observaba aquel joven se acercó a la elfa. —Noah ha regresado de sus misiones, creo que aún no lo has conocido desde que estas aquí, lleva muchos meses fuera.—

—¿Halane?—

La joven miró a su amiga, era verdad que no se acordaba de ella y debido a eso volvió a recobrar la compostura.

—Es verdad... Que estás en modo "lapsus".— Observó de arriba abajo a Ran y sonrió. —¿Te has peleado con alguien? Porque vaya cara tienes.—

—Con Ezarel.—

—¿A sí? Cuenta, cuenta. Mejor, vamos a un lugar más íntimo y hablamos.—

Una vez en la playa, se sentaron en una roca que estaba por allí.

—Ezarel me dijo el motivo de mi despido... Tuvo que elegir entre una relación o quedarse conmigo de asistenta.—

—Maldito elfo, eligió a Eweleïn.—

—¿A la enfermera?—

—Si, verás, a pesar de que ambos lo llevan en secreto aquellas que estamos en constante vigilancia del elfo sabemos que esos dos se hacen "compañía" en las noches.—

Ran no dijo nada, solo escuchaba lo que le decían.

—Escucha, creo que la única manera de que recuerdes tu memoria es haciendo algo que solías hacer.—

—¿El qué?—

—Realizar una broma o venganza y que te salgan mal.—

La elfa alzó una ceja incrédula, se levantó del sitio e intento irse. —Creo que será mejor que recupere la memoria de otra forma. Por cierto, ¿quién era el chico ese que estaba en el pasillo antes?—

—¿Noah? Por qué lo preguntas ¿Te gusta? ¿Dejarás a Ezarel por él?—

—¿Ezarel? A mí no me gusta Ez.—