Cicatrices en el Alma [COMPLETA]

Capitulo 40. 1/1

Podría haber dejado que sus manos la exploraran un poco más, pero de alguna forma, se sentía como si estuviera mal, tenía el presentimiento de que tal vez se asustaría, parecía una chica tímida, y seguramente también se enojaría con él, y él no quería eso, entonces, ¿Lo había hecho porque no quería asustarla? Sí, pero, ¿Por qué no quería? ¿Por qué no querría asustar u ofender a una mujer? Si ponía de ejemplo a las mujeres con las que se relacionaba, como Sara, o April, si bailara con Sara, ¿La tocaría? No, no lo haría, ¿Por qué? ¿En que se parecían Sara y Alex? respetaba a Sara, pero sabía que era más que eso, era su amiga, jamás la ofendería de esa forma, le importaba, entonces, eso significa que te importa Alex, ¿Cierto? Pero, ¿Cómo? Era la respuesta que antes no había surgido, que le importara, era el porqué había sentido que "necesitaba entenderla" era satisfactorio encontrar la respuesta a la pregunta que su madre le había hecho Y ¿Por qué? ¿Por qué le importaba Alex? La verdad, no tenía ni puta idea.

―¿Sabes que le pasa? ―soltó April a Sara, no habían pasado ni 5 minutos desde que Alex se había levantado de la mesa.

―Pareciera que tuviera días sin dormir. ―acotó, Sara se encogió de hombros, afortunadamente no era tan buena mentirosa como Alex, porque al instante se dio cuenta de que les ocultaba algo, lo cual solo aumentaba su curiosidad, obviamente había subestimado el vínculo que existía entre las compañeras de cuarto, porque Sara estaba siendo lo suficientemente leal, como para ocultarle a April cualquier información que pudiera poseer acerca de su amiga, le parecía extraño, y quería preguntarle que ocultaban esos ojos verdes, pero sabía que Sara no le diría, y no porque no supiera, no, ella estaba al tanto de lo que le pasaba a Alex, lo que sea que fuera; no, si no porque estaba dispuesta a guardar su secreto, ¿Qué tan importante era la información que Sara poseía? Y lo más importante, ¿Qué les había llevado, a que de alguna forma, existiera un acuerdo tácito entre Sara y Alex de que no dirían nada? ¿Por qué Sara era cómplice de Alex? Estaba desesperado por disparar un millón de preguntas, pero eso solo alarmaría a Aphril, tal vez intentaría algo cuando estuviera a solas con Sara.

―Ella está preocupada por algo. ―respondió Sara.

―No le creí cuando dijo lo del examen, se que ella se preocupa por sus notas, pero parecía como si hubiera algo más. ―dijo April.

―Amor, solo déjalo estar. ―quería desearle suerte a Sam, porque lo que menos haría su novia, sería "dejarlo estar".

―Ni creas por un segundo que he olvidado lo del plazo. ―dijo April, tenía una mirada bastante parecida a la de su madre cuando se decidía por ganar un caso, costara lo que costara, determinación, fuerza, y un reto, en este caso sería lograr que Alex le confesara algo que ya todos sabían.

―¿En serio piensas que eso va a funcionar? ―dijo, April asintió, que ilusa estaba siendo― No creo que funcione, primero, ella ha pasado años ocultándote información, años April, ¿De veras crees que hay algo en la tierra que le haría decirte algo que se ha guardado para sí misma por más de 10 años? Y segundo, ¿Por qué habría de decírtelo en este momento? nunca la fastidiaste en todos estos años, y ahora, ¿De pronto piensas que vas a obtener las respuestas a las preguntas que en estos 10 años nunca hiciste? ―todos le miraban, como si hubiera dicho una palabrota en medio de una guardería, pero él solo había dicho lo obvio, ¿Acaso April nunca cuestiono sus objetivos? Al parecer no, esta le miraba como debió de haber visto el papa a Galileo cuando dijo que la tierra era quien giraba alrededor del sol, como si estuviera loco, e hubiera dicho algo inconcebible, algo que al parecer nunca había pasado por su mente.

―¿Qué te hace pensar que nunca antes le había hecho preguntas? ―se defendió, bueno, ella tenía un punto.

―Si las hubieras hecho, en este momento ya sabrías la verdad, y no te hubieras enterado por boca ajena, si como dijo el oficial, el maltrato era frecuente, ¿Por qué nunca antes habías notado algo? ¿Acaso no es tu mejor amiga? ―el rostro de April se descompuso, parecía que fuera a llorar, y por la cara de su primo, sabía que si eso sucedía lo golpearía por hacer llorar a su chica.

―Yo... No es que no notara nada, conocí a Alex cuando me mude, era nueva, tenía 8 años, no es que fuera excluida ni nada, pero Alex era la única que no me trataba con curiosidad, ella simplemente era ella, amable, y dulce, pero era muy reservada, extremadamente cerrada, siempre que le preguntaba por su familia o cualquier otra cosa, ella se encogía de hombros, supongo que porque era muy pequeña, nunca cuestione su comportamiento, era tímida, y apenas hablaba, y siempre la molestaban en el colegio, así que me hice su amiga, yo trataba con los demás, pero después deje de hacerlo al ver que excluían a Alex, entonces nos convertimos en un dúo, formado por alguien impopular, y por otra chica que podía ser popular, pero decidió no serlo. ―April suspiró, y continuo― Con el tiempo, empecé a darme cuenta de cosas que hasta ahora, eran cabos que nunca había atado, como el hecho de que nunca llegaba tarde, siempre parecía tan correcta, y cuando algunos golpes empezaron a hacerse visibles, ella dijo lo que en este momento me doy cuenta de que eran excusas estúpidas, y yo le creí. ―sollozó, Sam la sujetó contra él, y la beso en la frente― Nunca me di cuenta, fui tan estúpida, todos estos años, nunca se me había ocurrido que alguien le hacía daño, pensé que era reservada porque sus padres eran estrictos, ella nunca ha dormido en mi casa, nunca, la he invitado por años, y nunca, nunca vino, pensé que su padre era estricto, me equivoqué. ―April se cubría la cara con las manos, parecía arrepentida― Ese bastardo. ―su voz destilaba odio― No soy tan estúpida, pero ella no estudio conmigo hasta graduarnos, al cumplir 15 años la cambiaron de escuela, después de eso solo nos veíamos semanalmente.

―No nos habías dicho que no se graduaron juntas. ―ese era otro detalle.

―Ella dijo que era por qué a su padre no le gustaba el colegio, pero la verdad es que la cambiaron a un lugar peor, no lo entiendo, pero soy estúpida, no hice preguntas, soy tan tonta. ―Sam froto sus brazos tratando de confortarla― Ahora me parece tan obvio, tantas veces que había cosas de ella que no entendía, ahora lo sé, pero ahora también se que ella no confía en mí, no lo suficiente como para contarme, y quiero que lo haga, quiero que sea honesta conmigo, no quiero obligarla, pero soy egoísta, y al mismo tiempo si quiero, no lo sé, estoy confundida.

―Tal vez no deberías forzarlo, ¿Te acuerdas el primer día que estuvo aquí? ―Sara miro a Aphril, y esta asintió― Ella menciono que querer la verdad no es estar lista para ella, tal vez ella piensa que no estás preparada, ¿Lo estas, Aphril? ―Sara tenía razón, pero le sorprendía que fuera ella quien dijera que no debería forzarla, porque la idea del plazo había sido suya.

―No lo sé, no sé nada en este momento, lo único que se, es que no quiero tener 30 y aún seguir en las mismas, tal vez tienes razón, tal vez debería dejarla en paz, no puedes forzar cosas como esa, la amistad, el amor, la confianza, son cosas que solo fluyen, ¿Debo dejarlo fluir?

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