Luna Valente.

-Cuarenta Ocho-

Luna V.

Mis gritos de pánico hacen que mis padres y Elliott entre a mi habitación y se queden paralizados por la situación en la qué me encuentro.

Siento que me voy a morir en cualquier momento, le tengo un miedo horrible a estas cosas y por eso lloro mientras pido qué me la quiten de encima, se siente horrible presenciar como se arrastra por mi piel siendo fria y corriendo el riesgo de qué me muerda.

-Luna no te muevas. -pide Elliott con precaución y yo sollozo.

-Quitala, solo quitala por favor. -pido llena de pánico.

-¿Cual es el griterío qué tienes en esta casa no....? ¡Ahhh! -Ambar habiendo un acto de presencia al ver la serpiente sobre mi suelta un grito aterrador y salta sobre mi padre haciendo qué este la cargué en modo princesa para no dejarla caer- ¿¡Qué hace una serpiente aquí!?

-Hija por favor no te muevas. -dice mamá con los nervios hasta la cabeza notó como Elliott toma la sabana y yo entró más en pánico al ver sus intenciones.

-No, -niego- no, me va a moder Elliott...

-Tranquila no pasara nada -musita con cuidado sin despegar la mirada de la serpiente qué se encutra tranquila entré mis muslos, creó haber sentido como mi alma se sale de mi cuerpo cuándo el en un movimiento rápido captura la cabeza de la serpiente apresándola con las sabanas.

Mi primera reacción es salir corriendo a los brazos de mi mamá y respirar aliviada mientras ella susurra palabras tranquilizadoras a mi oido.

-¿Se puede saber qué hacia una serpiente en tu habitación Luna? -escuchó preguntar a Elliot, me doy una media vuelta para observarlo y veo qué ahora tiene toda la serpiente atrapada en la sabana como si fuera una bolsa.

-No tengo ni idea, me acosté en mi cama para dormir y te pronto la senti en mi pierna. -logró decir y el frunce el seño.

-¿Como demonios llego una serpiente hasta aquí?

-No tengo ni la menor idea, pero seria bueno revisar la mansión para asegurase de qué no haya más por ahí. -propone mi mamá acariciando mis hombros.

-Ambar -llama mi papá.

-¿Qué? -pregunta distraída, segundos después se percata de qué aún está siendo cargada por mi padre y abre los ojos como platos y se baja- Ay, lo siento Miguel no me di cuenta.

Todos niegan divertidos en la habitación en excepción de mi, miró todo a mi alrededor totalmente paranoica y sólo esperó no dar con otra serpiente porque así no dudaré un segundo más en empacar mis cosas y irme de la mansión.

-Ven cariño, te hare un té. -dice mamá empujando mi espalda baja para que camine hacia la puerta.

-Ambar atrapa -Elliott hace el amagó de lanzarle la sabana a la chica de pijamas negro y todos presenciamos como su piel pierde el color.

-¡Elliott no! -chilla está abrazándose así misma y sale de mi habitación como si le quemará estar alli- ¡Jodete!

-¿No qué no le temias a nada copia barata de un vampiro? -se burla ganando qué ella antes de perderse por el pasillo le muestre sus dedo del medio. El niega y me mira- ¿Estas bien muñequita?