Diecinueve

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No lo beses, no lo beses, no lo beses. Se dijo Hoseok con los labios de Taehyung a unos cuantos centímetros de los suyos. No lo hagas, las reglas lo dicen.

Como no podía besarlo, optó por enterrar las uñas en los hombros de Taehyung. Hoseok estaba viendo fuegos artificiales gracias al movimiento de las caderas ajenas. Sí, el Señor Kim sabía moverse muy bien. Aún así, podía sentir cierta tensión en Taehyung mientras lo follaba, había algo que no estaba bien con él. Como si realmente estuviera enojado.

Es sólo porque me sé lo que planeaba hacer. Por eso está enojado. ¿Por qué más podría estarlo?

Taehyung puso un dedo sobre los labios de Hoseok y presionó, hundiéndole en esa húmeda cavidad. Hoseok chupó por inercia. Gimió alrededor de su dedo.

Joder. Soy un enfermo por querer besarlo.

Hoseok puso ambas manos en la nuca de Taehyung y este no lo alejó. Hundió las yemas de sus dedos entre los desordenados cabellos y gimió más fuerte cuando Taehyung presionó ese hermoso punto dulce que ni siquiera el conocía del todo. 

Taehyung empezó a bajar el ritmo, pero sin dejar de hacerlo profundo. Abrió un poco más las piernas de Hoseok con una mano y embistió lento, pero sin nada que perder al lado de las embestidas rápidas.

Hoseok soltó un dulce y largo gemido cuando Taehyung estableció ese ritmo. Se arqueó, apretó los puños y empezó a mover las caderas contra el pene de Taehyung.

Sabía que todo el mundo los escuchaba, en especial porque apenas habían entrado a las celdas y porque Hoseok no tenía pudor al gemir alto cuando Taehyung lograba su cometido. Debería de sentirse asqueado y en completa vergüenza, pero aquel pensamiento sólo lo calentó más. Pensar que Danniel los podía oír mientras se retorcía en rabia porque su criminal más peligroso —el cual negó un pago e incluso ver a su hija para matarlo— lo follaba en vez de torturarlo. 

Debía sentirse muy mal pensar que Hoseok la estaba pasando bien.

— Taehyung —Gimió alto y a propósito. Quería que el desgraciado los escuchara y se retorciera en rabia. Quería ver su cara ahora mismo.







Por otro lado, Danniel estaba sentado en su oficina, con una cara de pocos amigos mientras escuchaba los gemidos desvergonzados de Hoseok. Tenía un café en las manos, pero lo apretó tan fuerte que este se desparramó por todo su uniforme. Sí, estaba ahogándose en rabia. 

Se supone que Taehyung debía matarlo, no follárselo.

Maldito hijo de todas las... Pensó Danniel.

Se levantó de su asiento y cerró todas las ventanas y puertas. No quería escucharlos follar, le burbujeaba la sangre de tan sólo percibir el sonido de la litera siendo golpeada contra la pared. Aunque tampoco podía interrumpirlos. Danniel sabía como era Taehyung, mentiría si dijera que no le tenía miedo.

Respiró profundo y abrió su cajón derecho. Había un cuchillo para defensa personal. Lo miró con tentación, pero lo volvió a guardar.

Estaba considerando muy fuerte la opción de acabar a Hoseok con sus propias manos.

Sí se están preguntando por qué Danniel odiaba tanto a Hoseok, no había una respuesta concisa, pero si un millón de sucesos que podían explicarlo. Por ejemplo que Danniel había sido despedido seis veces por su culpa de la estación de policías.

Hoseok era uno de los ladrones, estafadores y traficantes más buscados de San Francisco, o al menos la policía necesitaba encontrarle algo ilícito para encarcelarlo, y todas las veces que Danniel estaba a punto de lograrlo, Hoseok se le escapaba de las manos como agua. La estación al ver que Danniel no podía, decidieron alejarlo del caso. Fue visto como uno de los peores policías en la ciudad. Su esposa lo dejó por el fracaso en su trabajo; el dinero no llegaba a la casa y eso la hizo tomar sus maletas e irse.

Danniel le agarró tanto odia a Hoseok que cuando supo que sería el nuevo encargado de la prisión Alcatraz, no podía dejar ir la oportunidad.

Y aquí estaba. El único error en su cálculos es que Taehyung debía matarlo, pero ahora tal parecía que lo estaba haciendo el hombre heterosexual más feliz del mundo. Follandolo y haciéndolo gemir tan alto que Danniel sentía su cabeza explotar.

Pero si Taehyung no se encargaría de él, entonces tendría que buscar más recursos, porque Hoseok no cumpliría su condena ni tampoco saldría de prisión, él moriría aquí.

Danniel se encargaría de eso.

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pied piper

Make yourself harder to kill |vhope|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora