amor de un yandere RM y tú

Jungkook

Narrador omnisciente

Nam se encontraba acechando a su nueva presa, Jungkook, aquel chico lo volvía loco, siempre cerca de T/n, junto a ella constantemente, parecía muy interesado en todo lo que hacía y decía la chica, eso hacía Rm quisiera que Kook desapareciera.

El chico camiaba sólo por la noche, como vivían en el mismo barrio Rm pudo darse cuenta de esto,viéndolo pasar siempre por la casa de T/n, sale a dar una vuelta todas las noches aproximadamente a las 11:00 p.m

Un buen horario para matar, pensó Rm, no habrá nadie puesto que es de noche y un día de semana a estas horas no hay nunca nadie en las calles.

El chico iba caminando tranquilamente, hacía frío esa noche, tenía sus manos en los bolsillos de su abrigo, Namjoon se encontraba a unos metros detrás del chico, tenía un pañuelo húmedo en la mano, el líquido de este era una mezcla casera para adormecer personas, con este mismo líquido había adormecido a Jimin y Baek, es bastante fuerte, unos pocos segundos con esto en tu nariz y caes al suelo.

Nam fué apurando el paso poco a poco, el joven no se lo esperaba, estaba muy tranquilo viendo la luna.

Se acercó hasta quedar justo detrás de él, tomó el pañuelo y lo intentó poner en la boca del menor.

Pero fué en vano, el chico tenía muy buenos reflejos y logró actuar a tiempo evadiendo el pañuelo húmedo.

Kook se alejó unos metros y se dió la vuelta, al ver a Namjoon se quedó un tanto sorprendido, Rm no esperaba esa reacción por su parte por lo que no se molestó en cubrirse la cara con nada.

-¿Qué tratabas de hacer Nam?

Dijo confuso

Nam no supo que decir y corrió hasta el chico, ya lo había descubierto no le quedaba de otra si o sí tenía que llevárselo.

-Tranquilo como último recurso intenta matarlo aquí, total no hay nadie más que nosotros tres - Dijo tranquilo Benny

-Así  es, te mataré Jungkook - se le abalanzó encima.

Kook cómo último recurso sacó un gas pimienta de su bolsillo y procedió a tiearselo en la cara a Nam.

-¡HIJO DE PUTA!

Gritó separándose del menor.

Le ardían los ojos y se le había cerrado la garganta por el fuerte olor del gas pimienta que había entrado por su nariz.

Kook aprovechó y salió corriendo lo más rápido que pudo, Rm se quedó unos cuantos minutos ahí hasta que se sintió mejor, fué en dirección a la casa del chico pero era imposible ya, se le había escapado.

-Inútil

Dijo una de sus voces

-Fracasado

Dijo otra

-Perdedor

El efecto de sus pastillas había acabado y en el peor momento, se sentía enojado por que su presa se había escapado y ahora se sentía peor por todas esas voces.

Cuando las voces comenzaban a molestarlo Benny desaparecía, el jamás aparecía cuando la otras hablaban, tal vez Benny sea un efecto secundario de las pastillas y no parte de su enfermedad,quien sabe.

Nam llegó a su casa, lo único que quería era encontrar esas benditas pastillas y tomarse una para calmar esos demonios, al ver el frasco notó que quedaba una sola , no sabía cómo conseguir más, la receta la tiró hace mucho tiempo y perdió el número de su doctor, tendrá que ir con uno nuevo, lo volverán a revisar y le darán más pastillas u otro tipo de pastillas.

Pero el no quería que lo revisen, lo hacía sentir un loco, un loco que tenía que hacerse ver por un doctor para calmar su locura, eso lo enojaba, no se sentía loco, se sentía cuerdo, a pesar de que claramente no lo está, esta noche había tratado de secuestrar otro chico más, eso no es algo que haría alguien normal.

Volviendo a eso, Nam no paraba de pensar en la forma de tener a ese chico, lo peor de todo es que mañana por la mañana lo verá,claro si Kook va al trabajo, quien sabe, tal vez cuando Nam llegue estén un grupo de policías esperándolo en la puerta,no puede arriesgarse a que eso pase, va a secuestrar al chico, tal vez no hoy ni mañana pero en cuanto baje la guardia Rm lo tomará e ideará como asesinarlo.

Esa es tal vez la parte más divertida para el, el cómo morirá su víctima.