Salgo corriendo por el pasillo junto con Axl a mi lado y sonrío mientras presiono con fuerza el sobre contra mi pecho. La adrenalina vuelve a correr por mis venas y mis pies no dejan de moverse para llevarme lejos de la maestra rara de Química, la que no deja de correr también detrás de nosotros.
—¡Estás loca, Jane! ¡¿Cómo pudiste hacerlo?! ¡Me impresionas, chica! —halaga Axl sin dejar de correr a mi lado y riendo locamente.
Mis risas tampoco se pueden detener. Él tiene razón... ¿Cómo pude hacerlo? No lo sé, los impulsos son cosas inevitables y constantes dentro de mí, no entiendo ni siquiera por qué lo hice... Oh no, espera, sí lo entiendo, fue para ver a la maestra de Química rogando para que le regrese la carta de amor que al parecer es para otro maestro. Esa señora no tiene vergüenza, es justo que le esté sucediendo ésto.
—¡Deténgase, ustedes jóvenes inmaduros! ¡Les daré un reporte a ambos y saldrán de esta escuela antes de que se den cuenta, pero para siempre! —exclama la maestra de Química tratando de alcanzarnos con esos enormes e innecesarios tacones que usa, seguramente para seducir al destinatario de la carta que sostengo como si mi vida dependiera de eso.
—¡No le hagas caso, Axl! ¡Está tratando de asustarnos para que no leamos enfrente de toda la escuela las seductoras y obscenas palabras que le escribió a su amante! ¡Aunque eso no nos asusta en absoluto, maestra, eso solo nos divierte!
La maestra de Química suelta un gruñido de frustración y molestia, pero Axl y yo no nos dejamos intimidar por eso, al contrario, soltamos miles de carcajadas más llenas de diversión. Esto es divertido, la verdad, mucho más divertido que escuchar su aburrida y estresante clase... ¿Cómo es que a alguien de verdad le logra cautivar su ánimo y su fingido interés? Se nota desde lejos que esa maestra no es lo que parece.
—¡Ustedes no me conocen! ¡Puedo hacer que su futuro se derrumbe delante de ustedes en un segundo, jóvenes! —amenaza la maestra sin dejar de correr y yo alzo las cejas también sin dejar de mover mis pies.
—No lo dudamos, maestra, es por eso que seguimos corriendo... con su carta de amor.
Axl vuelve a reír tratando de recuperar el aire que el ejercicio le está robando y comienza a toser inesperadamente. Idiota, creo que se ha ahogado con su propia saliva. Vuelvo a soltar otra carcajada al pensar en eso y de pronto una persona se interpone en mi camino y me detiene con una sola malo, lo cual logra hacerme retroceder un poco.
Demonios, eso ha logrado sorprenderme y me ha dolido... ¡¿Quién diablos se atreve a...?!
—¿M-Mamá?
Mi voz suena de pronto débil, totalmente diferente a la de hace unos segundos cuando la maestra de Química nos perseguía a Axl y a mí, la misma que ahora me ha arrebatado el sobre de amor de la mano y ha cruzado los brazos con bastante furia.
Los labios se me han secado y la sorpresa me ha dejado muda. Sí, mamá puede llegar a ser la única persona que de verdad logra intimidarme un poco. Sin embargo, ella cruza los brazos y arquea una ceja mientras mira la situación que he creado.
ESTÁS LEYENDO
Reckless and Dangerous (Gerard Way)
Fanfiction«No es sencillo ser la misma de antes cuando las personas te dejan, cuando solo se van y te dañan.» Es lo único que no dejaba de pensar Jane, la muchacha fría y rebelde que solo quería pasar un gran rato de diversión con sus amigos, sin importar que...