«No es sencillo ser la misma de antes cuando las personas te dejan, cuando solo se van y te dañan.»
Es lo único que no dejaba de pensar Jane, la muchacha fría y rebelde que solo quería pasar un gran rato de diversión con sus amigos, sin importar que...
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Usualmente suelo dormir sola, usualmente me gusta hacerlo de esa forma. Mi cama está vacía a excepción de mí, está fría la mayor parte del tiempo, está perfectamente limpia y ordenada, y es increíblemente cómoda.
Sin embargo, estos días no ha sido así. Mi cama está fría y eso me molesta, está perfectamente limpia y ordenada y eso me irrita, y es tan cómoda que me provoca dolor de cabeza. La soledad no me parece una ventaja ahora mismo, la soledad me parece más bien un castigo. ¿Cómo es que llegué al punto de sentirme de esa forma? Mi cama siempre ha sido como una de mis mejores amigas, me escucha en las noches cuando estoy triste, conoce mis sueños más íntimos, mis pesadillas, sabe cuando estoy feliz y satisfecha o cuando estoy exhausta y deprimida. Mi cama siempre está ahí. Aunque no, estas últimas noches parece que mi cama también me ha abandonado. Es una pena.
Suelto un gran risa en respuesta a Cole, pero me quedo callada en el momento en el que Alexa se acerca a nosotros... con Axl.
—¡Oh vamos! —exclama Alexa con irritación cuando mira que yo me he dado la vuelta y he estado a punto de irme a otro lugar—. No puedes estar haciendo esto toda la vida, Jane. Además, Axl me dijo que quería pedirte perdón.
—¡¿Que yo qué?! —interrumpe Axl en la conversación exclamando con gran sorpresa.
Alexa golpea levemente su abdomen y lo fulmina con la mirada. Sin embargo, nada de esto es necesario, ya no, no sé ni siquiera por qué sigo estando enojada con Axl, en realidad, debería disculparme yo, debería agradecerle.
—No, no hay necesidad de hacer eso. Por supuesto que te perdono, Axl. Es más, ¿qué te parece si subimos a las motos y hacemos una carrera sólo entre nosotros dos? —propongo con una gran sonrisa mientras me doy la vuelta y lo miro con gesto desafiante.
Su mandíbula cae inmediatamente al suelo y su atención se centra totalmente en mí.
—¿Lo dices en serio?
Sus ojos vainilla brillan de ilusión mientras todo su ánimo incrementa de un segundo a otro. Yo odio estas carreras en la noche; me gusta la velocidad pero no me gusta controlarla. Es por eso que Axl está tan sorprendido de que yo haya propuesto una carrera, así como mis otros dos amigos, es por eso que está tan emocionado, porque él adora todo esto junto con Cole, y la última vez que lo hice, curiosamente, le gané.
Alexa muerde ligeramente su labio con inquietud y me toma inesperadamente del brazo para alejarme de los dos chicos.
—Jane, no luces realmente bien, me has dicho que no has podido dormir correctamente por culpa de ese imbécil y... —La interrumpo.
—No, yo te dije que no he podido dormir bien últimamente, pero no por culpa de ese idiota... Y no lo vuelvas a nombrar ni una sola vez más. Esto no es por él, nada de lo que hago es por él. En realidad, pensé que te enojarías conmigo por la estupidez que hice en confiar en él y no que estarías así de preocupada por mí. Él no me cambió, no estoy triste ni nada por el estilo, lo de él fue una tontería pasajera. Ahora tan sólo quiero volver a la normalidad y olvidar todas las tonterías que hice... ¿Me dejarías hacerlo?
