XXXIV

47 5 7
                                    

Siento el agua recorrer todo mi cuerpo y de mi boca sale un pequeño suspiro

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Siento el agua recorrer todo mi cuerpo y de mi boca sale un pequeño suspiro. Tengo los ojos cerrados y estoy delante de la ducha dejando que la templada agua se lleve toda la impureza de mi cuerpo. Y de pronto, sin previo aviso, me echo a llorar ahí.

Algunas veces aunque esté en un sitio solitario no puedo llorar, necesito estar aquí donde nadie más pueda ver que estoy llorando, donde el agua trate de consolarme y limpie mis lágrimas, donde pueda pensar tranquila y en silencio, a excepción del ruido de la lluvia artificial que hace la regadera, por supuesto. A veces es el único lugar donde realmente puedo desahogarme.

Y es que no puedo evitarlo, pasé toda la semana tratando de convencerme de que estaría bien sin tipos como Gerard, tipos que me quitaran en aliento con sólo una mirada o que hicieran mis piernas gelatina con sólo estar alrededor. Sonreí, grité de alegría en una fiesta, lloré ebria en algún bar con mis amigos, estuve pasando por muchas cosas en este tiempo. Y todo, todo, había sido en vano. ¿Por qué? Porque ahora me encontraba duchándome en el departamento de la persona que realmente estaba dispuesta a olvidar.

Es decepcionante ver qué tan poca es mi fuerza de voluntad, y lo peor... es que no me quiero ir. Aquí está el shampoo que Gerard usa, su loción, sus perfumes, su desodorante... Todo huele a él y no quiero salir de aquí.

Pero pronto ya estoy terminando de ducharme.
El baño está rodeado de azulejos negros que le dan un aspecto elegante al baño, sin embargo, a parte de todas las cosas que Gerard necesita para asearse, no hay nada más. Es una persona humilde y sencilla por lo que parece.

Tomo los pantalones vaqueros y la camisa negra de Green Day que me ha prestado Gerard y me apresuro a vestirme. Nada de esto me incómoda más que tener que usar de nuevo la ropa interior que usé ayer, pero realmente no puedo hacer nada, ya que es bastante tarde y ambos tenemos que llegar a la escuela a tiempo. Sí, nosotros y también su hermano.

Fijo mi vista en el espejo, pero aprieto los labios irritada cuando me doy cuenta de que se ha empañado un poco. Acerco mi mano y lo limpio lentamente, sólo para comenzar a ver cada vez con más claridad mi rostro en el espejo. Mi cabello rojo sigue mojado, es por eso que está más oscuro de lo normal. Mis ojos se ven algo cansados, pero también, más allá de toda la extenuación, se ven vivos, atentos, luminosos. De alguna forma, el estar aquí rodeada de tantas cosas de Gerard me hace sentir viva de nuevo.

Suelto un suspiro y bajo un poco la mirada. Esto no tiene que ser así, yo no debo de estar aquí. Más allá de todas las cosas por las que hasta ahora hemos pasado, yo sigo de la misma forma: asustada, aterrada, presionada. Él no entiende la magnitud de sus palabras cuando me habla, él no sabe qué es tenerlo todo para después tener nada, él no comprende que es demasiado doloroso, que te destroza por dentro pensar que las cosas no son para siempre. Yo lo viví un par de veces antes, nada comparado con la primera vez que me sucedió, cuando él murió.

Reckless and Dangerous (Gerard Way)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora