APUESTA [JimSu] (Omegaverse)

~CAPITULO 14~

Narra Jimin

—¡V-Vamos!, ¡Mas fuerte!— los gritos incesantes por parte de Beakhyun era todo lo que se escuchaba en mi departamento.

—V-Voy, no desesperes— ¿cuánto tiempo llevábamos haciendo esto?.

—Eso no es suficiente. ¡Dame más!— aferré mas mi agarre empujando con fuerza.

—Estoy haciendo mi mejor esfuerzo— para este tiempo, los jadeos provenientes desde mi boca eran demasiados.

—¡Más r-rapido!... Ya casi acabamos— faltaba tan poco. Lo sentía tan cerca.

—¡Ah!, ¡Si!...— el grito de Beak resonó por todo el salón.

Mi cuerpo estaba todo sudado al igual que el del beta, esta situación había sido toda una travesía; pero la satisfacción de haber culminado nadie nos la quita.

—Uff, eso fue interesante...— tomó lugar a un lado mío.— ¿Cómo se te ocurrió comprar un mueble tan grande?— pasé una mano por mi oscuro cabello.

—No lo sé, solo me di cuenta que hacia falta uno para la televisión— miraba como la estructura de madera yacía en frente mío.

—Y también compraste otra pantalla— me observaba mientras apoyaba su mejilla en la mano.

—Si, eso surgió de repente— solté una risa nerviosa.

—Sin mencionar los cuadros, adornos, nueva ropa de cama, comida para ese refrigerador vacío y la pequeña bola de pelos ahí acostada— fue señalando cada objeto que mencionó.

Ni siquiera yo sé porqué estoy en plan "remodelación del hogar", simplemente fue un deseo que me nació apenas desperté esta mañana. Tenía ganas de un cambio en mi vida, dar mas luz a esta casa decorando acorde a mis gustos.

—¿Es tan malo querer acondicionar tu casa?— me levanté para empezar a desempaquetar los cuadros.

—No, pero es raro en ti.... Digo, después de 5 años viviendo aquí hasta ahora se te ocurre darle vida a este lugar— cruzó las piernas en el sofá apoyando su codo en la rodilla y la cabeza sobre su palma.

—Pues, resulta que ahora quiero hacerlo. Necesito este lugar impecable— martillaba un clavo encima del ángulo que previamente habíamos marcado.

—¿Necesitas?, ¿para qué?, ¿alguna cita en especial Kim?— volteé a verlo observando su semblante pícaro.

—¿Siempre haces tantas preguntas?— volví a mi labor.

—¡Responde!— su repentino grito hizo que me golpeara el dedo con el martillo.

—¡Ah!... ¡Imbécil!, ya me aplasté el dedo por tu culpa...— metí el dígito magullado dentro de mi boca.

—Si, si, que importa...— agitó su mano restándole importancia, lo miré con cara de pocos amigos.— Ya responde a mi pregunta—

—Tal vez haya alguien que me interese— vi a la bola de pelos acercarse hasta donde yo estaba, lo tomé en brazos.

—¡Aleluya!, creí que ibas a morir solo. ¿Quién es?— daba pequeños aplausos con entusiasmo, yo hundía la nariz en el pelaje del can.

—Ya te he hablado de él...... Es Yoongi— el perrito lamía mi mejilla, él tenía cara de sorpresa.

—¿El mismo omega del que llevas enamorado desde hace años?, ¿aquel que se mudó al extranjero?, ¿ese de piel blanquecina al cual destruiste al decirle las peores cosas que se te ocurrieron?, ¿al que dejaste humillado en frente de tus disque amigos por proteger una estúpida reputación?, ¿ese chi...— lo interrumpí.