APUESTA [JimSu] (Omegaverse)

~CAPITULO 47~

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Narrado En General

La brisa digna de una playa, lograba colarse a través de la ventana que los inquilinos habían dejado abierta la noche anterior.

Ésta mecía las cortinas de forma suave haciendo crease ondas al son del viento; el sol hacía acto de presencia dando a conocer la venida del mañana con su potente luz.

Las gaviotas reproducían su característico sonido al volar cerca del edificio donde se encontraban; el ambiente de ese cuarto estaba impregnado del mas adicto aroma producto de la nueva unión hecha por el alfa y omega.

Quienes se hallaban acurrucados uno contra el otro sintiendo la calidez ajena emanada de sus cuerpos desnudos; los brazos del alfa tenían fuertemente apretada la cintura del omega mientras se encontraba acostado sobre su espalda y el bello pálido yacía encima suyo.

Uno de los brazos blanquecinos rodeaban la cintura del alfa en un cómodo abrazo mientras su rostro se encontraba escondido en la curva derecha de su cuello del mayor. Dejando a plena vista aquella marca recién hecha por Jimin cuando estaban en una situación placentera.

Ambos dormían plácidamente apenas siendo cubiertos por la sábana mas delgada perteneciente al conjunto de la cama; ésta apenas y cubría desde su cintura para abajo. Sus piernas entrelazadas una contra otra en busca de estar lo mas cercanos al otro.

Un panorama verdaderamente hermoso....

Después de haber culminado aquel actor de amor, ambos se recitaron las mas bellas palabras que cruzaban por sus mentes mientras esperaban pacientes a que el nudo se deshiciese.

Jimin besó reiteradas veces el cuello pálido buscando que la reciente marca dejase de sangrar y el dolor sea menor.

Minutos mas tarde, el alfa se encontraba saliendo del omega con extrema delicadeza; se quitó el condón lleno de su  esencia anudándolo para proseguir a botarlo en el baño del cuarto. Regresó junto a Yoongi que parecía a punto de dormirse, lo abrazó cerca suyo y esperó al cansancio albergarse en su cuerpo para rendirse a los brazos de morfeo.

Y ahora, es así como llegó la mañana; el alfa iba abriendo sus ojos de a poco para acostumbrarse a la luz que se había colado en su cuarto.

Giró su cabeza hacia un lado donde se hallaba el reloj digital y vio en el la hora; definitivamente aun era temprano, pero ellos debían aprovechar cada minuto para apreciar el paisaje a unos pasos de ellos.

Tenía calor, y no solo era por el mismo que crearon al tener sus cuerpos tan cerca. Simplemente hacía calor debido al lugar donde se hallaban.

Miró a un costado suyo solo para encontrarse a su precioso omega aun dormido y sumido en el mas relajante sueño.