APUESTA [JimSu] (Omegaverse)

~CAPITULO 29~

Nota: simplemente la canción pegaba.

Narra Yoongi

Las palabras del doctor aún daban vueltas por mi cabeza sin parar.

¿Qué haría si Jimin llegase a quedar en coma?

Me sentiría terriblemente mal, es como si te estuviesen arrancando una parte de tí lentamente.

Si sólo ahora sabiendo que está con huesos rotos y sobreviviendo a una operación me da un no sé qué...

Duele...

Es como si tuviéramos una conexión y pudiese sentir este proceso mucho más doloroso, la desesperación recorría mi cuerpo.

Quería verlo...

Deseaba acariciar su tierno rostro y susurrarle las cosas que por vergüenza no le dije cuando estaba despierto.

Tampoco es como si su estado estuviese confirmado, no. Él es una persona fuerte y saldrá de ésta mostrándome aquellos ojos cafés.

Cómo los extrañaba ...

Estábamos los cuatro justo en la puerta de su habitación, nadie se atrevía si quiera a tomar el picaporte.

Mis piernas me temblaban cual gelatinas y los dedos picaban a que los rascase.

—¿Quién entrará primero?— preguntó Jungkook.

El silencio que se había formado era algo incómodo y desesperante a mi parecer.

—Y-Yo digo que entren ustedes señores Kim. —cruzo mis dedos delante de mí. —Aún necesito un poco más de tiempo por favor. —pedí con la mirada gacha.

Una parte de mi aún no estaba lista para lo que se venía...

—De acuerdo, trataremos de no tardar tanto. —soltando un suspiro el omega entró a la habitación aún con la duda siendo palpable en su cara.

Y ambos se detuvieron abruptamente en la entrada, sus expresiones denotaban terror más bien tirando a la tristeza. Un sollozo por parte del hombre en cinta me hizo saber lo grave que estaba.

Ahora ya ni quería entrar...

Nam cerró la puerta detrás suyo con una mirada apagada sumida en la más vil oscuridad; los ojos me ardían, pero ya no quería seguir llorando.

Pegué la espalda donde aquellas pulcras paredes blancas yacían, solté un suspiro dispuesto a esperar el tiempo necesario.

¿Es que el día podía ser más mierda?

Primero lo de Jihoon y la maldita cólera causada por esa estúpida mujer junto a la odiosa directora.

Después el sentirme como la mismísima mierda por no protejer a mi hijo tal cual había prometido cuando hubo nacido.

Dije que nunca pasaría tristezas...

¿Y qué hay ahora? Sufrió maltrato verbal y para el maldito colmo su persona favorita fué herida ante sus tiernos ojitos.

Llevé una mano a mi cabeza pues pulsaba de manera horrible, odiaba sentirme así. Solté un jadeo casi inaudible.

Para acabar con mi asqueroso día, el cuál no debía ser así por el hecho de que hoy finalmente le diría a él la verdad... Pero, no se pudo.

Esperé demasiado para hablar...

Me tomé el estómago, sentía tantas náuseas en este momento que vomitar no sería tan malo.