Capítulo 13

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¡LO SÉ!

Es súper raro que esté publicando un domingo, pero mi mejor amiga me insistió tanto que lo subiera que no me quedó de otra.
Espero disfruten el capítulo. Y tengan piedad de mí cuando lean hasta el final. Hasta la nota de autor.❤😂

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Estoy corriendo tan rápido como puedo. Me siento angustiada, demasiado angustiada de solo pensar que el hombre de la montaña puede llegar a Ciara primero que yo. Y aún no alcanzo creer que lo que estoy viviendo fuera verdad. Mi corazón late acelerado en mi pecho y mi cabeza no me deja pensar con claridad. No estoy al tanto de nada de lo que sucede a mi alrededor, solo corro sin más.

Me detengo cuando salgo de la Universidad. Necesito llegar rápido a donde vive Izan pero estoy demasiado lejos de él. Debo tomar un taxi, sí. Eso debo hacer. Y le podría decir al conductor que se meta por un atajo que conozco.

Corro hasta donde se encuentra un taxi parqueado, a escasa distancia de la Universidad y cuando estoy a punto de tomarlo alguien toma mi brazo y me voltea.

—Pérsik, detente —ordena Alek, agitado. Se nota que también estaba corriendo—. ¿Qué pasa? ¿Por qué corres de esa forma?

—Ciara... —Es lo único que logro decir. Estoy demasiado asustada.

—Creo que ya imagino que pasa.

—¡Déjame ir! ¡Ciara me necesita!

Exploto y no me importa que los demás nos vean. Ahora mismo mi único objetivo es llegar con Ciara. Ella está con Izan. Los dos están en peligro.

Alek parece tener un debate en su cabeza. Sus ojos viajan a todos lados, como intentando aclarar mejor sus pensamientos. Se pasa una mano por su cara y me mira.

—No estás pensando de manera racional —murmura él al fin y suena más como un regaño. Pierdo tiempo aquí hablando con él—. Estás demasiado asustada como para ver el problema. Es muy probable que sea una trampa. Quizás él pueda estar escondido ahora mismo mientras nos ve.

¿Trampa? No lo entiendo. Alek ve mi cara de confusión y procede a decir:

—Quizás el hombre solo está esperando que lo guíes a donde está Ciara.

Es cierto. ¡Es totalmente cierto! Quizás el hombre no sabe dónde está ella y es seguro que yo lo guiaría a donde ella se encuentra una vez supiera que está en peligro. Pero la verdadera pregunta es: ¿Cómo se había enterado que yo tenía a Ciara? Todo empieza a dar vueltas en mi cabeza, muchas suposiciones llegan golpeando fuerte pero no encuentro nada que tenga relación.

—Yo iré a verla, pero tú quédate aquí esperando a que Aiden y Olivia te recojan.

—¿Por qué de pronto quieres ayudar?   —inquiero, aún confundida. Él parecía no importarle nada de Ciara y ahora quiere ayudar.

—Porque... —interrumpe su discurso, sin saber qué decir. Su cara está tensa, y sus ojos están más oscuros de lo normal—. Porque he decidido ayudarte. Utilizaré mi habilidad para llegar a donde está ella. Llegaré en menos de lo que esperas. Déjame ir a mí.

No tengo otra opción. Si él va, el hombre de la montaña no tendrá ni la más mínima posibilidad de seguirlo a la velocidad en la que iría Alek. Además, es muy probable que lo que acababa de decir Alek sea totalmente cierto.

Así que asiento con mi cabeza, Alek suelta mi brazo y empieza a correr como una persona normal. Habían muchas personas a nuestro alrededor y él no puede simplemente desaparecer cuando todos nos están viendo. Así que supongo que usará su habilidad cuando nadie lo esté viendo.

LEAPERS I ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora