Aida.

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Habían dos ambulancias, Aida estaba tirada inconsciente en el suelo. Los oídos me pitaban, la gente se arrimaba, todo me daba vueltas, me giré para mirar, Liam tenía la mirada clavada en lo ocurrido hace previos minutos, hice intención de salir corriendo hacia fuera, pero una mano cogió mi cintura.

-¡Aida!- escuchaba gritar a Noelia.

-Déjame maldito inútil- le gritaba Sara a Zayn.

Me di cuenta de que Harry me frenaba ante aquella situación.

-Para Harry, serás gilipollas, déjame ir- dije haciendo fuerza hacia fuera.

-No, relajate dormilona,relajate- dijo cogiendo fuerte.

Entonces vi como Liam, sin ninguna mueca,salía corriendo hacia fuera.

-Espera Li- gritaba Noelia.

-Dios, Aida- gritaba Alba.

Al final logré zafarme de las manos de Harry y llegué corriendo hasta donde estaba Liam, lo cogí del brazo.

-Perdonen- dije casi llorando- a que hospital se la llevan.

-Se le ve bastante mal, no responde bien a lo que le hemos inyectado, nos vamos al hospital central- dijo la enfermera agradable.

-Espere- grité- es su novio, deje que vaya con vosotros.

La enfermera asintió y lo dejó subir, pero antes me dio un beso e la mejilla.

-Vamos Paola, subamos al coche y vayamos al hospital- dijo Harry poniéndose a mi lado.

-Porque hoy- dije en un susurro- no puede ser- mi lágrima empezaba a descender por mi cara.

-Paola...

-¿Paola?Maldita sea Harry, ¿donde estas eh?- dije gritando- abre los malditos ojos, acaban de atropellar a mi mejor amiga- ahora pegaba mis puños en su pecho.

Hizo una mueca de dolor, en esos momentos tenía irá, mucha irá dentro, me di cuenta de que le había hecho daño, sus heridas aún estaba abiertas, pero no se movió en ningún momento. Me apoyé en su pecho con la cabeza gacha y el me envolvió con sus brazos lentamente.

-Paola, perdón, vamos a ir,¿no?- dijo Alba con una lágrima.

-¿Lo estás dudando Alba?- dijo Noelia con la mano de Louis enroyada en su mano.

-Vámonos ya joder- dijo Sara tirando de Zayn.

Nos subimos en el coche, me puse de copiloto y Harry subió a mi lado, hizo intención de darme un beso, pero como un acto reflejo,quité mi cara. Él no respondió, sabía que estaba mal. El trayecto al hospital fue duro y silencioso. La mano de Harry se paseaba por mi rodilla suavemente, los chicos abrazaban a las chicas sin decir una palabra. Al llegar aparcó donde se podía, las plazas estaban llenas. Bajamos del coche y al ver la puerta me puse a llorar, tenía miedo de lo que pudiera pasar. Harry se acercó a mi y entrelazó su mano con la mía, me sentí más segura dentro de un mar de inseguridades.

-¿Quieres entrar?- me preguntó Harry agachando la cabeza para ponerse a mi altura- ¿o quieres esperar a sentirte más segura?

-No, vamos.

Andamos hasta la puerta y en las escaleras de la entrada Noelia se quedó parada.

-¿Quieres que nos quedemos aquí?- dijo Louis.

-Sí, necesito estar un poco asolas contigo, un poco, después entramos.

-Tranquila Noe, te esperamos dentro- dijo Alba en tono tranquilizador.

Amor en una direcciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora