Recuerda,con tranquilidad y sin nervios.

58 6 2
                                    

Por fin estaba llegando el puente, lo teníamos al finalizar la semana. Las notas me iban genial, Zayn y Harry habían venido alternándose varias veces a vernos y ayudarnos. Les dijimos lo de Aida, pero no queríamos que se lo dijeran a Liam para que no le afectara más, o simplemente para que no se presentara en el hospital y esta se asustara.

-Paola, ¿Hoy es el día no?- me preguntó Sara saliendo del instituto.

-Sí- asentí- recuerda, con tranquilidad y sin nervios.

-Sí, estoy muy nerviosa, espero que digan que sí, nuestras notas están siendo excelentes- dijo mordiéndose las uñas.

-Vale, suerte Sara- dije dándole un beso.

-Suerte- dijo suspirando, luego me devolvió el beso y nos fuimos cada una a su casa.

(...)

Llegué a casa, mi corazón iba a mil por hora.

-Mamá, me han dado la nota de filosofía.

-¿Y que tal cariño?

-Un ocho y medio.

-¡Genial! como siempre, muy orgullosa estoy de ti.

-Una cosa...¿Podemos hablar?- mi voz sonaba algo asustada.

-Claro, ¿que pasa?

-Verás, este puente nos vamos a Sevilla a ver a Aida como quedamos.

-Sí, claro que sí.

-Déjame seguir por favor- mis manos temblaban un poco, el no, ya lo tenía, por intentarlo no pasaba nada- y ella tiene amnesia y nuestras notas son geniales...

-No se por donde quieres ir Paola- dijo mi madre frunciendo el ceño.

-A ver...- suspiré- creo que tendríamos que volver a Londres con Aida para que recordara, espérate, déjame que me explique- dije parándola con la mano- se que es comienzo de curso, pero hemos estado hablando con el tutor y el director y al ser las notas tan excelentes, creo que nos dejarían plaza en el público de Londres para que estudiáramos las cinco juntas allí.

Mi madre me miró con cara de sarcasmo. Luego negó con la cabeza.

-Ni hablar Paola, no puedes hacer eso, estas en mitad de estudios.

-Mamá, estudiaríamos allí.

-Paola, que no y punto.

-Mamá, no es por mi...

-No, es para irte con Harry- me interrumpió.

-No, ni hablar, ni si quiera estaríamos en su casa. Es por Aida, ha pasado todo el verano allí y tiene muchas cosas que recordar, mamá, déjame que lo hagamos por favor, ya tenemos plazas libres por allí y los profesores han dicho que somos excelentes, que llegaremos muy lejos.

- Paola, son nueve meses ¿cuando nos veríamos entonces?

-Bajaría los puentes y las fiestas, y algún fin de semana- dije ahora poniendo las manos para empezar a rogarle.

-¿Y donde dormiríais?

-Nos regalaron un piso en Julio, ¿recuerdas que te lo dije?- me estaba poniendo contenta al ver que mi madre se lo estaba pensando.

-La verdad es que Harry te ayuda mucho con los estudios, pero, ¿Como te mando el dinero para pagar todo aquello? Todo esto es una locura imposible Paola, no.

-¡Mamá!- dije un poco replicando- Tengo dinero, y te recuerdo que Harry no me dejará pagar nada.

-No se Paola, déjame que me lo piense, ves hacer lo que tengas que hacer.

Amor en una direcciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora