45

5.2K 403 44
                                    

Las puertas de Alexandria se abrieron en medio de la oscuridad de la noche e ingresé en el auto estacionado a un lado de la calle. Bajo y saludo al que se encontraba realizando el turno de guardia antes de dirigirme a mi casa. Rick y otros fueron al Santuario, tienen temas que solucionar ahí, pero a mí no me gusta pisar ese lugar. De todos modos no vamos seguido para allí.

Malos recuerdos.

Prefiero llegar a casa y estar con mis niñas. Además de que Rick ha tenido algunos malentendidos con Daryl, y me gustaría que los solucionen pasando tiempo juntos a solas.

Estaba agotada, así que apenas mi cuerpo hizo contacto con la cama caí en un profundo sueño que duró poco ya que apenas unas horas luego sentí el calor del sol chocar en mi rostro y risas y saltos alrededor mío.

Estaba acostumbrada a despertar así, mis hijas se levantaban con mucha energía. Y a continuación de eso fueron días tranquilos y aburridos. Me encargaba de cosas básicas en Alexandria y cuidaba de mis hijas y de Tyler, el niño de ocho años al que le agarré cariño.

Hablaba con Rick por radio cada tanto, pero no dejaba de extrañarlo. Y aún no había tenido tiempo de darle la noticia.

Al parecer, en Hilltop, Gregory intentó asesinar a Maggie de manera sucia y mentirosa y tuvieron que colgarlo, aunque antes de eso recibió una gran paliza por parte del coreano. Y la reconstrucción del puente había comenzado pero gente del Santuario había desaparecido y Aaron perdió un brazo que Enid tuvo que amputarle luego de una gran herida que provocó trabajando al ser sorprendidos por unos caminantes.

Estoy orgullosa de Enid, según lo que me informaron, hizo bien su trabajo. Y me siento mal por Aaron, no merecía perder su brazo. Él ya perdió demasiado.

—¡Morgan, Judith, Tyler! —grito, colocando los platos en la mesa— ¡A cenar!

Segundos luego comienzo a oír las pisadas y las risas de los tres niños. Se sientan y comienzan a cenar.

—Mañana me iré a Oceanside, Tyler ¿irás conmigo o te quedarás más tiempo? —pregunto, y él niega llevando un bocado de sopa a su boca.

—Regresaré a casa, mamá dijo que regrese mañana así vamos a pescar. —cuenta, y sonrío estando de acuerdo. Me alegra que el niño tenga una madre ahora, una mujer de Oceanside se hizo cargo de él y lo ama con todas sus fuerzas. Lily es una gran amiga, además, es por eso que confía en dejar que Tyler se quede aquí con nosotros.

—¿Te irás de nuevo, mami? —pregunta Jud, y muerdo mi labio asintiendo— No quiero que vayas, y además extraño a papi.

—Iré a buscar a papi si no vuelve mañana, Judith —intento explicar mientras lleno el vaso de Morgan con agua— e iré a ayudar a tío Aaron, se ha lastimado.

Miro a ambas niñas con un puchero en sus rostros y suspiro pensando en que decir para que no se queden tristes. No me gusta irme de Alexandria si ellas están mal.

—Les diré un secreto —comienzo a decir, bajando el tono de voz para llamar su atención— pero no pueden decirle nada a nadie aún ¿si? —ambas asientes con sus cabezas repetidas veces, y hago una mueca al ver la emoción en sus ojos brillosos— Está bien. Les diré... mami tiene algo aquí dentro —coloco mi mano sobre mi estómago y las miro esperando su reacción, pero parecen no comprender, ya que arrugan las cejas con una expresión confundida.

—¿Qué tienes, mami? —pregunta Morgan.

—Mami tiene un bebé aquí dentro, hijas.

—¿Te comiste un bebé, mami? —vuelve a preguntar Morgan, con sus ojos bien abiertos y horrorizada. Imito su acción abriendo mis ojos como platos y niego rápidamente.

Familia (Rick Grimes) 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora