Sólo tú y yo

21

Camila
Miami

Mis párpados estaban cansados y aún con Dinah al teléfono no podía evitar bostezar y descansarlos a ratos mientras ella parloteaba sobre lo ocurrido.
Había entrado a casa a las 3 de la madrugada, totalmente húmeda y con el cabello hecho un desastre, por fortuna toda la familia se había ido a dormir. Yo entré a mi dormitorio nadando entre mis sentimientos aún.
Había sido increíble. Los besos y la compañía de Lauren era algo que disfrutaba demasiado, me gustaba y sentía un enamoramiento real.
No lo había imaginado nunca pero ahora que pasaba sentía que el destino obraba de forma tan rara uniéndonos después de mucho tiempo y sabiendo que éramos amigas.
Dios. Ahora no me la sacaba de la cabeza.

-Camila cariño, es bastante obvio que Lauren llegó para que la vida compensara la terrible experiencia con Fredd, es tu compensación, solo quiero asegurarme de que esa chica se sienta igual que tu.
Sonreí demasiado feliz y me deslicé más adentro de mis sábanas.

-Yo la siento y ella me corresponde, sospecho que esta enamorada como antes de mi y no sabes la felicidad que eso me da, siento que estoy flotando de verdad...es que cuando pasó lo de Fredd sentí que iba a pasar mucho tiempo antes de que yo volviera a sentirme atraída y enamorada hacía alguien más, pensé que estaría arruinada pero...
Mordí mi labio inferior.
-Dios, claro, tenía que volver a ver a Lauren Jauregui y ella tuvo que volver así de guapa, irresistible y siendo tan cálida como antes.
Dinah soltó una carcajada alta.

-Estas enamorada amiga, y dios, ¿No te aterra que fuera de forma precipitada? Apenas la volviste a ver hace días.

-Es diferente, yo ya la conocía, conocía todo de ella y solo me faltaba conocer la parte de su vida en la que no estuve, pero solo basto que me sonriera y mirara a mis ojos.
Reí de forma tonta.
-Es que wow, de verdad hemos estado mucho rato en el mar, tonteando y la otra gran parte besándonos, ella sosteniéndome y yo...

-Por dios, deja de dar detalles que ahora te envidio por conocerla y que te llevará como a una cita inesperada.
Imagine que Dinah se quejaba en silencio y rodaba los ojos.
Miré de nuevo el reloj sobre mi mesa de noche, debía dormir, no quería levantarme tarde y ansiaba una llamada de Lauren por la mañana, quería aprovechar su compañía demasiado bien, por que mi pecho se sentía dolorido de imaginar que ella tendría que volver a Nueva York.

-¿Te has puesto a pensar en que ella se va a ir?
Dinah preguntó. Parecía que la conexión al teléfono no era lo único que teníamos. Lauren debía volver a su trabajo y yo al mío.

-Presiento que estará en mi vida de hoy en adelante Dinah, no pienso en algo más, tal vez ella venga continuamente, no quiero que se vaya sin que antes se entere de lo que siento o que ella me lo diga, va a pasar y entonces las dos estaremos convencidas de buscarnos mas adelante.

-Anda ya, pero si piensas que todo esta planeado, solo espero que pase así cariño, no quiero verte como el otro día mientras me contabas todo.
Me daba un poco de miedo pensando en eso. Era verdad, hasta hace pocas horas yo lloraba como una bebe en sus brazos al contarle como me sentía respecto a Fredd, también ese día Lauren me había rechazado por completo.

-Yo tampoco quiero eso, no quiero ni pensarlo.
Me despedí de mi amiga e intenté dormir. Pero muchas cosas venían a mi cabeza, y todo tenía que ver con Lauren. Reviviendo lo que había pasado hace unos minutos con ella.
Y no es que hubiéramos tenido sexo debajo del agua, que por cierto me intimidaba un poco, si no más bien era solo recordar el contacto entre las dos. Como me sentía realmente cómoda entre sus brazos, ella me sostenía y trasmitía seguridad.
Dios. Era la misma chica dulce de antes pero ahora con un cuerpo de diosa.
Quería tocarla y lo necesitaba.
Pensando en el roce de nuestras piernas mojadas y su tacto en la parte baja de mi cintura dentro del agua.
Yo nunca había tenido sexo con una mujer, pero con Lauren podía imaginarlo. De hecho llegar hasta el final.
Suspiré profundo y me dejé llevar por esas imágenes quedándome dormida, con ella en mis sueños.