La Luna en tus ojos 🌕🌙🐰🐥

Capítulo XIII.

Hola hermosas! Es Lunes y JiKook lo sabe✨
Gracias de nuevo por apoyarme en cada locura y siempre dejarme mensajes lindos y llenos de cariño. 💜

"La Luna en tus ojos" 🌙🌕🐰🐥🔥✨

XIII.

"Mi Secreto"

Jimin.

Pasaron las 3 semanas de vacaciones. Mañana sería lunes y sentía un hueco en el estómago.
Mañana miraría a JungKook, y después de ese sueño y de esos besos no sé qué haré para no lanzarme a él.

RECUERDO

... Sueño.

- Vamos, se hace tarde. Dijo Tae.
- Adelantate, sólo busco unos libros y te alcanzo, si?

*Al salir como con 10 libros, no me percaté y tropecé con alguien. Los libros volaron y yo caí sobre alguien, generando escalofríos en todo mi cuerpo.
Él rápidamente me tomó por la cintura, me elevó y me pegó contra la puerta de mi casa con fuerza, devoró mi boca provocando que de mí salieran gemidos.
Me tenía cargado, mis piernas rodeaban su cintura y sus brazos sostenían mi tracero. Abrió la puerta de un golpe y no sé como llegó a mi habitación y me tiró en la cama.

* A pesar que era de día, en la habitación había luz tenue, lo que hacía que mi excitación fuera mayor.

- Quédate así, quiero verte bien. Dijo con tono autoritario.
- Si, dije susurrando, sentía mi garganta seca, con deseos de su boca, de su cuerpo.
* Se avalanzó sobre mí, besandome sin control. Mis zapatos salieron volando y mis manos no hacían más que llenarse de su cuerpo.

- Hazme tuyo, ya no aguanto más. Te he amado en secreto tanto tiempo que hoy explotaré sino lo haces. Dije mientras mordía ligeramente su oreja.
- Jimin-ssi! Había estado esperando con ansias tus palabras.

* Sus manos tomaron las mías y entrelazadas las colocó sobre mi cabeza. Besaba cada parte de mi cuerpo y con cada beso mi deseo crecía y ya se comenzaba a notar en mi entrepierna.
Mi deseo estaba a tope. Él me hacía perder el control.

- Park Jimin, hoy serás mío! Dijo mientras colocaba sus manos en mi cintura y me giraba quedando boca abajo. Sentí un cosquilleo inexplicable, al fin iba a estar con la persona que he amado durante tanto tiempo. Al fin!

* Sus manos recorrían mi cuerpo con detalle, despacio, sin prisa. Besaba mi espalda y me hacía volar.
No podía ver su rostro, por lo que traté de invertir la situación.
Me giré, lo tomé por los hombros y lo hice caer sobre la cama. Quedé sentado encima suyo, ahora yo tenía el control.

- Hola, guapo. Dije mientras me acercaba a su boca.
- Que placentera jugada mi Jimin-ssi!

*Tomó mi rostro entre sus manos, las mías por el contrario, se encontraban descifrando su perfecto abdomen.
Me acercó a él y me besó con una ternura que me hizo llorar.

-Jimin~ah, ¿Estás bien bebé? Dijo mientras me abrazaba.
- No, tengo un nudo en mi pecho, debo decírtelo o creo que voy a morir, ya no aguanto más, dije mientras me acomodaba sobre él.

* Estábamos sentados uno frente al otro, él tenía sus manos en mi trasero y las mías estaban alrededor de su cuello, acariciando su hermoso cabello.

- Dímelo, no quiero que estés mal, al contrario, yo quiero hacerte feliz, lo dijo mirándome fijamente a los ojos, vi fuego en su mirada y eso me encantó.
- Es que tengo miedo que salgas corriendo, dije mientras él me ayudaba a secar las lágrimas.
- Sonrió. Eso no pasará corazón. No quiero y no voy a separme de tu lado.

* Mi pecho estaba por estallar, sentía los latidos de mi corazón palpitar en todo el cuerpo, él me miraba fijamente y me sentía quemar con el deseo que miraba en ellos.
Cerré mi ojos y besé sus labios de manera suave,  un placer inexplicable me recorrió por completo.

- Te amo. Dije susurrándole al odio.
- Jimin-ssi... Su mirada se tornó diferente, pude ver vergüenza en sus ojos, bajó la mirada.

* Tomé su barbilla y la levanté para que sus bellos ojos me miraran.

- Lo siento, dije.
- Jimin-ssi... Lo siento, yo también tengo algo que decirte...

* Estaba serio, ya no miraba deseo en sus ojos, estaban perplejos, parecían hermosas lunas llenas, esas mismas que me hacían derretir de amor.

- Tengo miedo de decirte esto, pero igual lo haré.
Tu dices que me amas Jimin...

* Oh no, dijo mi nombre así, sin nada más... Esto está mal... Me dije.
Intenté quitarme de encima suyo, pero él me sostuvo fuerte por la cintura.

- No te muevas Park Jimin, te quiero aquí, sobre mí. Dijo en un tono que no logré descifrar.
- Lo siento, es que notaba en tu mirada incomodidad y sólo quería darte espacio. Dije.

* Colocó sus manos en mi cuello y me atrajo hacia él. Me besó tan desesperadamente, tan lleno de pasión, que provocó casi de inmediato gemidos en mí.

-mmmm, dije.
- Jimin-ssi, te deseo. Susurró en mi oído. Te deseo ahora, mañana y siempre, porque yo también te amo...lo dijo mientras me tomó por los hombros para lograr que nuestras miradas se encontraran.

* Mis ojos se abrieron como plato, o por lo menos eso sentí. Mi corazón se detuvo por un momento.
La sonrisa que salía de él era magestuosa, haciendo que sintiera fuego dentro de mí.

- Amo verte sonrojado, dijo.
- Te amo, dije en un hilo de voz.
- Ya somos dos, corazón. Lo dijo mientras colocaba cabello detrás de mi oreja.
- Ahora si me lo permites, voy a hacerte mío Jimin-ssi.

* Me tomó por la cintura y me tiró sobre la cama de manera brusca, haciendo que una sonrisa boba saliera de mi.

- Haces que te desee más cuando sonríes de esa manera. Dijo mientras hacía que mi pantalón saliera volando.
- Yo también te deseo, dije cubriendo mi rostro con las manos.
- No te cubras el rostro!. Me dijo en tono fuerte.
- Lo siento, dije rápidamente. Es que no puedo dejar de sentir vergüenza.
- Eres exquisito. Dijo mientras me tomó de las piernas y me acercó a él.

* Uno a uno desabrochó los botones de mi camisa sin apartar su mirada de la mía.
Mi camisa voló al igual que mi deseo. Eran tantas las ganas de al fin estar con el hombre que había amado desde hace mucho tiempo, que me sentía torpe.

- Ven acá, dijo mientras su boca rosaba mis piernas.
- Ahhhh.
- Me fascinas, esperé por ti mucho tiempo, llegó el día en el que liberaré todo de mí. Dijo mientras me despojada del bóxer blanco que traía puesto.
-Oh Kookooooo... Dije al sentír sus labios en mí.
- Sabes exquisitamente Jimin-ssi. Dijo y siguió devorándome de placer.

* De repente, escuché un ruido... lo escuchaba lejano porque estaba enfocado en disfrutar como él derovaba mi miembro.
Ese ruido se fue intensificando...Di un salto grande al percatarme que ya era de día, se hacía tarde para ir a la escuela y el ruido que escuchaba no era más que mi alarma.

- Todo fue un sueño Park Jimin, no tienes tanta suerte, me dije mientras corría a cambiarme para salir a clases.