La Luna en tus ojos 🌕🌙🐰🐥

Capítulo XVII

Hola hermosas Army JiKook shippers, espero disfruten de este capítulo, así como amo compartirles un poco de mí.
Gracias por hacer de mis comunes escritos algo especial ✨

"La Luna en tus ojos" 🌙🌕🐰🐥✨

XVIII.

"¿Qué haré?"

Miré el reloj... 3:00 a.m.

Su cuerpo abrazado al mío, estábamos de frente, podía sentir su suave respiración en mi rostro y los latidos de su pecho los sentía en mi alma.
- ¿Puede haber alguien al que ame más que a ti? Me susurré.
- No, No lo hay. Me respondí.

* Decidí separarme de su lado lo más sutil posible para no despertarlo. Era tan hermoso cuando dormía, toqué su frente. Ya no tenía fiebre.
Me senté en un sofá a lado de su cama para apreciarlo mejor. Subí los pies y abracé mis piernas con los brazos. Mi cuerpo temblaba. La temperatura bajaba mucho en la madrugada, pero no era esa la razón.

- Estoy tan enamorado, que tengo miedo Kookoo. Comencé a decirle en voz baja.
* Sabía que no me escuchaba, pero necesitaba desahogarme, además, me sentía todavía muy preocupado por su estado de salud.
- ¡No vuelvas a enfermarte así! Le reprendí.

* Haré que tomes fuerza bebé, dije mientras besaba su frente y acariciaba sus suaves mejillas, lo dejé en un profundo sueño y me dirigí a la cocina.

La casa de JungKook era impresionante, no la recordaba así la primera vez que estuve aquí. Era amplia, en tonos blanco, negro y gris. Habían muchos cuadros de paisajes y personas al azar.

Me detuve de golpe al ver la imagen central de toda la sala.
Mi respiración se entrecortó. Mis manos dejaron caer el vaso con agua que llevaba y mis pies tambaleaban.

- ¿Cómo voy a hacer para no amarte más? Dije.
Ante mí estaba una pintura en tonos gris de un joven bailando, parecía que el viento controlaba sus movimientos, podía sentir la pasión de esa persona al bailar... Y era sólo una pintura.
Me acerqué más y pude ver la firma del pintor.
- Kookoo! Exclamé.

Lágrimas salían de mis ojos al percatarme que ese joven, el de la pintura magestuosa, era yo.
YO!! PARK JIMIN en la sala de JungKook en una pintura hecha por el mismo!!!

No sabía que pensar, lo único que sabía era que desde ahora, amaba más a Jeon JungKook.

***************

La cocina era tan grande, que parecía biblioteca. Todo perfectamente ordenado, hasta había un estante de libros con una complicación de recetas de cocina.
- Definitivamente Kookoo es fuera de este mundo! Dije
Tomé el libro y me dispuse a buscar una receta para prepararla con todo mí amor.

* La mañana llegó y me sentí frustrado, ya que me leí todo el libro y no encontré nada que prepararle para hacer que ganara fuerzas.
De repente mi foco interno se encendió.
- ¡Lo tengo! Grité, y un eco recorrió la casa, cubrí mi boca con las manos, podría despertarlo, pero la casa era tan grande que estaba seguro que no escucharía.

Reí de forma boba.
- Estoy en la casa del amor de mi vida... Y dormí con él, de la manera más pura que puede existir! Dije abrazando mi espalda con las manos y girando en medio de la gigante cocina.

Parecía un loco, un demente de amor por Kookoo.

Traté de controlarme, el sol ya había salido y no tenía nada preparado para él.
Busqué un delantal para proteger mi ropa...bueno...ropa de Kookoo, me puse una de sus pijamas, pero me quedaba muy holgada, por lo que el delantal entallaba mi cintura haciéndome ver muy... raro?

* Sonó mi celular...

- Jimin! ¿Cómo están? ¿Cómo sigue JungKook?
No ha cesado la tormenta de nieve así que por ningún motivo salgas de su casa. Quédate con él, quédense juntos, Jin nos dijo que hay comida suficiente. Así que espera a nuestro llamado.
- Hyungs! ¿Cómo podré mantenerme lejos de él si estoy en su casa? Dije muy asustado.
- Yo tengo la solución Chimmy, dijo Tae.
- Dimela!! Grité desesperado.
- No te resistas y deja que tu amor por él salga, si?
- Tae!!!! Cómo puedes decir eso! Cómo se va a enamorar de alguien como yo!
- Jimin, no entres en negación, ok? Acepta lo que está pasando, acepta que lo amas y por lo que nos contó Jin, él te ama también. Así que deja de decir tonterías. Dijo Nam en tono de regaño.
-Dedícate a ser tú Park Jimin, no intentes ser otra persona. JungKook amará convivir contigo. Lo estás haciendo bien. Dijo Yoongi.
- Gracias chicos, los amo, ustedes son mi única familia. No olviden abrigarse bien. Dije.
Fin de la llamada.

*Suspiré.
- ¿Y ahora qué haré? Dije mientras mordía mis uñas.
- Ahora me harás el desayuno, dijo JungKook sentado en una de las sillas tipo bar que habían cerca de la isla de la cocina, sostenía su mandíbula en uno de sus fuertes brazos.

* Mi corazón se detuvo y cuando volví mi rostro hacía él, casi desmayo.
Ver su cabello despeinado, sus ojos hinchados, sus labios rojo cereza, su cuerpo cubierto por esa pijama gris que le quedaba tan bien. Y sentir su voz ronca estremecer mi vida.
Una gran vergüenza invadió mis mejillas, me sentí quemar de la pena.

- Me encanta verte sonrojado, dijo mientras de su boca escapaba una sonrisa de lado, haciendo que cubriera mi rostro con las manos.
- No digas eso Kookoo. Dije entre dientes.
- Amo que me llames así. Terminó.

*Se levantó con pasos temblorosos caminó hacia mí, mi corazón ya no latía, ya había explotado de amor, me sentí morir cuando tomó mi cintura, me abrazó y apoyó su barbilla en mi cabeza.

- Pensé que eras un sueño, pero si puedo tocarte significa que eres real, cierto? Dijo, mientras se desvanecía entre mis brazos.