Online (Yaoi/Gay)

Capítulo 5 ''El primer encuentro y confesiones...''

Hay bastantes revelaciones y bastantes importante diría yo, algunas ya las sabiáis y otras en cambio no.
También tiene las perspectivas de tres personajes, entre ellas la de Derek.
Sin más, espero que os guste ^^

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RILEY

Estaba exhausto. Tanto física como mentalmente así que me quedé recostado en mi cama mientras mi cabeza se ponía a pensar en todo lo que había pasado ayer.

Poco tiempo después llegó Ian a molestar mi corto momento de tranquilidad, entrando a mi habitación como si nada.

—¿Qué quieres? —le pregunté cortante, mirándolo por el rabillo del ojo.

—¿Me puedes explicar que significa esto? —señaló de malas ganas la chaqueta que tenía sobre mi escritorio.

—¿Una chaqueta? —me encogí de hombros sarcástico.

—No te hagas el tonto... tú sabes bien a que me refiero —alzó la voz.

¿Pero este que mosca le había picado ahora?

—Joder... ¿no me dirás que piensas que la he robado, no? —le pregunté incrédulo ante la idea de que él pensara eso.

—Bueno, tuya claramente no es —contestó sarcástico sentándose en el borde de mi cama.

—¡Es del chico con el que quedé para hacer el trabajo! —confesé molesto e irritado—. Había frío y me la prestó. La chaqueta se quedó aquí solamente porque me olvidé de devolvérsela, ¿Contento?

Aunque de todas las posibles expresiones que tenía Ian en este momento, cara de contento sí que no tenía. Más bien parecía estar furioso por cómo me miraba.

—¿Cómo se llama ese chico? —exigió saber secamente.

—Derek Patterson...—respondí confundido.

¿Por qué tanto interés? ¿Por qué quería saber cómo se llamaba?

—¿Derek Patterson? Ya veo...—se quedó pensativo—. Bien. Entonces la próxima vez que vayáis a hacer el trabajo hacedlo aquí. Mañana mismo para ser concretos —propuso que más que propuesta había sonado a una orden.

¿Pero qué...? ¡¿Ahora quería mantenerme vigilado?!

—¿Porqué así tan de repente? —pregunté frunciendo el ceño sin entender el porqué del cambio repentino—. Decidimos hacer el trabajo en su casa a partir de hoy.

—Podéis terminar el trabajo un día en su casa y otro en la tuya.

—No lo entiendo... ¿No sería eso más lioso aún? —empecé—. Además... ¿A ti que más te da todo esto, de todas formas?

—No me cae ese Derek Patterson... —susurró apartando la mirada.

A mí tampoco me caía bien pero...

—¡Venga ya! ¡Pero si ni siquiera lo conoces! —exclamé irritándome más.

Odiaba que se metiera en mi vida de esta forma. Realmente lo odiaba. ¡Y todo por una maldita chaqueta!

De verdad que estaba harto de que Ian me tratara como un jodido crío de 8 años.

—Llámalo instinto o lo que tú quieras pero no me inspira confianza—insistió.

En eso estaba de acuerdo con él. Pero a mí no me inspiraba confianza porque le conocía y desgraciadamente muy bien.

—¡Lo que montas sólo por una chaqueta, joder! —le tiré una almohada a la cara la cuál esquivo y atrapó con facilidad.

—No lo entiendes... —murmuró desviando la mirada y volviendo a colocar la almohada en mi cama.