A Un Escritorio de Distancia

55. Las inseguridades se crean

Mycroft, 30 AÑOS ATRÁS, 15:00hs.

—Mycroft, simplemente no quiero que tus notas se vean manchadas por esto, sé que solo es un punto menos, pero puede influir a la hora de obtener una beca, y lo sabes, ¿por qué no logras alcanzar mayor nota? Es filosofía.

—Lo sé, intentaré hacerlo mejor, lo mismo con literatura.

—Sé que sí—ella se levanta de la silla y me ve—. Bien, puedes seguir con tus cosas, pero prométeme que subirás esas notas, ¿está bien?

—Claro.

Mi madre sale de mi dormitorio, dejándome solo nuevamente. Suelto un suspiro y caigo en la cama, odio filosofía, toda la asignatura es una pérdida de tiempo si el docente valora más las incoherencias de los ineptos del curso, que el estudio organizado y metódico de quienes sí nos preocupamos por leer el material. "Valoramos el pensamiento libre, Mycroft", lo detesto, detesto a ese profesor, siempre retiene mi nota un punto por debajo de lo máximo únicamente porque me apego al programa del año, y no a una ideología propia.

Simplemente quiero terminar la maldita preparatoria de una vez, e irme a la universidad, dejando las exigencias y el ojo vigilante de mi madre de lado, creí que, al entrar a secundaria, mamá se calmaría, pero veo que los problemas solo se transforman, no desaparecen.

"Quiero, por una vez, hacer lo que creo correcto, y no lo que mi madre desea".

Desde que Eurus se fue, y tuvimos que mudarnos, todo ha sido peor, si bien papá está igual, mamá exige más de mí, ¿puedo dar más? No lo sé, por más que lo intento, no sé cuánto más pueda dar, y más aún si los docentes no son justos conmigo.

—¡Mycroft! —es Sherlock, está llamando a mi puerta, no quiero verlo, ¡no quiero ver a nadie! —¿Podemos jugar? Sé que estás despierto.

"Tiene cinco y no es estúpido, por más que sea el más lento de los tres".

Oigo pasos subir la escalera, lentos, suaves, no hace demasiado ruido y casi no se oye cuando choca contra el piso; definitivamente es papá. Camina por el pasillo y pasa de su habitación, por lo que vine a la mía.

—Tu hermano quiere estar solo un tiempo, Sherly, ven, yo puedo jugar contigo, tengo tiempo libre ahora—oigo su voz tras la puerta, se oye comprensivo, por lo que asumo ya debe haber hablado con mamá sobre mis notas.

—Pero yo quiero jugar con Myc.

—Lo sé, hijo, pero Mycroft está creciendo, y necesita más tiempo a solas, ¿comprendes? Él luego podrá jugar a los piratas contigo, lo prometo.

—Bueno.

Y finalmente oigo los pasos de ambos rumbo a la planta baja, volviendo a estar solo.

"Intuyo que este año será largo, y recién es el primero de mucho".

• • •

Al terminar de rememorar aquello, tan sólo me volví a acomodar en la cama, apartándome de Alice. Me acuesto viendo hacia el techo, con mis manos descansando sobre mi abdomen, era tarde por la madrugada, y hacía un buen rato que daba vueltas por la cama.

No me gustaba tener esa clase de recuerdos, más que nada porque mi adolescencia e infancia no eran etapas que me gustase rememorar, es decir, la mayoría de adultos tiene buenos recuerdos de la infancia, de esa etapa inocente, pero en mi caso no era así, digamos que no tuve oportunidad de ser ciertamente inocente, mi hermana se encargó de que no fuese así. Por otro lado, Sherlock pudo tener mejores recuerdos, ¿pero a qué costo? Él literalmente tenía parte de sus memorias bloqueadas y censuradas por completo, no era bueno, pero era mejor que la realidad.