Omnisciente.
-Hijo no...- Lauren le quitaba el pañal con pipí de la mano antes de que se lo echara a la boca. -Es asqueroso Jake, te pareces a tu mamá.- le dice.
-¡Te escuche Lauren!.- Camila grito desde la cocina terminando de lavar los platos que el bebé ocupó.
-Si me pegan es tu culpa enano.- le dice a su hijo que solo se reía de las caras divertidas de su mamá.
Camila rodó los ojos acercándose a su esposa quien ahora tenía al pequeño en los brazos haciéndole suaves cosquillas en su pancita. Camila sonrió ante la escena de verlos a los dos juntos como la mayoría del tiempo divirtiéndose, a pesar de que Jake era un chicle a Camila la mayoría del tiempo, le encantaba estar con Lauren porque sabía que con ella conseguía todo lo que quería, aunque era un bebé el lo sabía que su mamá lo consentiría en todo lo que quisiera.
Era un niño mimado, pero hermoso.
-Con calma me gusta como ella lo menea.- Cantaba moviendo el cuerpo de su hijo sacudiendole el trasero al ritmo de la canción. -Estamos activo mami, desde siempre el más grande Brrrr.- Hacia como si Jake estaba cantando.
Camila le quito a su hijo de los brazos de la chica intentando que no se contagiara con su torpeza.
-No lo corrompas amor, va a cumplir un año recién y está empezando a hablar.- dice la morena sentándose a un lado de Lauren. -No quiero que diga esas cosas feas.- Lauren río.
-No decía nada malo la canción.- se quejo.
-"me gusta como ella lo menea".- le dice alzando una ceja.
-Las manos amor, las manos.- se justifica Lauren. Camila rodó los ojos. -Al menos que sea tu trasero porque ahí sí que me gusta como lo meneas morrita.- Tan vulgar como siempre.
Camila no le dijo nada porque discutir por sobre eso con Lauren era como hablarle a una pared, no entendía. Aunque si reconocía que ya no ponía reggaetón todo el día y que incluso extrañaba el "UAH" de su esposa en cada momento, pero era un acuerdo que tenían de no ponerles esas canciones a su hijo que ni siquiera entendería las letras, por eso la música que se escuchaba era netamente infantil y aunque Lauren las odiara se las sabía de memoria e incluso las estaba cantando en la ducha.
Como cambia la vida cuando se tiene un bebé.
Y claramente había cambiado. Ya Lauren no estaba tanto tiempo fuera de casa y sus viajes eran relativamente cortos, la compañía funcionaba de las mismas manera pero esos viajes estaban siendo lo preciso, ya no iban a fiestas, si lo hacían tenían que hablar con sus padres para que se quedaran con Jake. Pero la mayor tortura eran las horas disminuidas de sexo, y si antes lo hacían cada vez que querían, ahora tenían que ser precavidas más si su hijo les llevaba la mayor parte del tiempo posible, pero eso no significaba que su sexo ahora fuera malo, seguía siendo igual o mejor que antes.
Ambas lo sabían y más cuando estaban mucho más tiempo juntas. El que Camila no esté en constante tour, entrevista y estuviera en casa con su hijo provocaba que la cercanía entre ambas fuera aún más. Aunque aún la morena anhelaba con volver a su carrera musical, y trabajaba en sus canciones, con productores y no se había mantenido lejos del mundo de la música cuando había colaborado con algunos artistas, canciones a beneficios, solo no estaba dedicada al cien por ciento a ese mundo por estar con su hermoso hijo que tanto amaba.
-Te extrañamos mucho.- Camila le dijo en la cama luego de que Lauren hizo dormir a Jake en su habitación.
-Yo a ustedes amor.- Se metió a su lado atrayéndola a su cuerpo. -Pero ahora debo viajar en un mes más.- besos sus labios cortamente. -Extrañe a mucho a mi culito.- le susurro.
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Amor en Latino, Camren.
FanficCamila Cabello, la estrella pop del momento e imagen de marcas publicitaria se pone en rumbo a un viaje de descanso por un fin de semana, para olvidar un poco el estrés de lo que conlleva ser una persona conocida en el espectáculo. No es un viaje a...