Colateral (En Revisión).

Te quemaré las costuras

Hogwarts, siempre es el mejor lugar para todo aquel que busque ayuda. En realidad no estaba buscando ayuda por el momento, solo quería dejar de escuchar al profesor Dumbledore hablar una y otra vez. Mientras que el sombrero seleccionador le miraba con gran capacidad de saber exactamente quien era, porque era atemporal. Dónde lo colocará en Gryffindor le enseñaría ha no jugar con el heredero de una de las más ancestrales casas. Lo haría recordar el apellido Black por años.

No había tenido problema cuando Charlie fue un Gryffindor, tampoco cuando Bill se había quedado siendo otro tonto León. Pero cuando Percy fue reelegido para ser una serpiente no pudo evitar sentirse satisfecho, al igual que los gemelos quedaron como serpientes, recuerda ha la Tía Bella y Cissy celebrar entusiastas mientras gritaban cosas como: “tenemos tres serpientes en casa”, de Ron se esperaba un León, hasta un Hufflepuff.

—¿Qué tanto piensas?—pregunto Draco por lo bajo.

Su papá Remus le había pedido vigilar a Harry por si alguien se metía con el pequeño cornamenta. Sirius casi se había tirado encima de su sobrino (porque lo era aún cuando Remus no era claramente su hermano) y rogado porque cuidara ha su pequeño. James había negado mirando a su esposo mientras le decía que no era necesario. Su padre, Lucius Malfoy solo le había tomado del hombro con cariño suficiente y había susurrado: «Recuerda Draco, todo gran sangre pura sabe que la familia siempre es primero». Era fastidioso y tonto, habían sido y serían esposos, nunca podría no proteger a la persona que ama. Moriría de nuevo por Harry James.

—Que el viejo no se calla—su voz había sido bajita pero clara.

—Draco rodó los ojos ignorando le—Te aguantas elegido. Tenemos que pasar de nuevo por esto, por tu culpa.

Harry le miró indignado por aquello. Claramente no era su culpa, todo era culpa de Tom, claro, él había arruinado sus planes de conquista mágica (nada serio) y porque aunque estaba claro que Draco lo amaba, quería volver a ganarse su corazón ya que en esta vida podría dejarlo. Eso le llevó a ser llamado loco y tonto (tal vez lo estaba un poco, pero igual era guapo) regreso en el tiempo para salvarse de ser un señor oscuro. Iba ha quejarse y exigir que se respetara sus derechos como el mayor (tenían la misma edad claramente). Pero la tonta canción del sombrero se lo impidió.

Oh, podrás pensar que no soy bonito,
Pero no juzgues por lo que ves.
Me comeré a mí mismo si puedes encontrar
Un sombrero más inteligente que yo.

Harry ahogo un gemido al escuchar la canción,a misma canción una y otra vez, (aunque solo eran dos veces) sentía que iba a explotar si la escuchaba.

Puedes tener bombines negros,
Sombreros altos y elegantes.
Pero yo soy el Sombrero Seleccionador de Hogwarts
Y puedo superar a todos.
No hay nada escondido en tu cabeza
Que el Sombrero Seleccionador no pueda ver.
Así que pruébame y te diré
Dónde debes estar.
Puedes pertenecer a Gryffindor,
Donde habitan los valientes.
Su osadía, temple y caballerosidad
Ponen aparte a los de Gryffindor.

Harry recordo a Colagusano. No todos los Gryffindor's eran valientes, leales y fieles. Apretó los puños; que no tenía idea cuando se habían formado.
Draco le miró aún entre el tumulto de alumnos y le dió una sonrisa dulce para evitar que armara una revuelta con lo que tenía que decir.

Puedes pertenecer a Hufflepuff,
Donde son justos y leales.
Esos perseverantes Hufflepuff
De verdad no temen el trabajo pesado.

Cedric fue valiente, no tan leal como se esperaba de un Hufflepuff pero lo suficiente como para que Harry pudiera verlo como un gran amigo y lamentarse su muerte a manos del señor oscuro que fue Tom Riddle.