Just Call It Love || Poth

‖ 47 ‖

—Eres un poco complicado de encontrar. —Se sentó sobre el césped a su lado en silencio, Goth no dijo nada respecto a su llegada, permaneció quieto observando a la distancia a sus cuatro amigos. — ¿Has estado aquí los últimos días?

— ¿Algún problema con eso? —Lo miró.

—No. —Sonrió amargamente. —Es que, creí que está vez realmente te había perdido... ¡El rastro, por supuesto! —Aclaró rápidamente estando bajo la atenta mirada de su novio. Carraspeó tratando de disimular los nervios que dominaban su voz. — ¿Sabes? Todo el mundo está buscando. —Goth desvió la mirada.

—Claro, ya no tienen a nadie a quien monitorear. Imagino que están asustados. — Respondió con absoluto desinterés en el caso.

—Un poco...—Miró del otro lado de Goth la guadaña tendida en el suelo. Tembló un poco, tomó valor y encaró a Goth. — ¿Por qué tienes eso?

Goth apenas parpadeó. —Es de Lotus. —Un extraño sentimiento de alivio invadió su pecho. —Le enseño algunas cosas.

— ¡...! — El alivio se esfumó transformándose en terror. — ¿Pa-Para qué?

—Dante dijo que la élite está furiosa. Vendrán en grupo a atacarnos. No sé cuándo, ni cuántos, ni dónde, pero necesitamos estar listos para eso. Hay que estar listos para todo, así no se precisa de la suerte.

Había tomado una decisión.

Si lo atacaban, se protegería. Ese era todo el dilema. Mientras no le hicieran nada, Goth no actuaría. Palette lo sabía, pero, parecía ser difícil de entender e incluso creer de parte de los miembros de la élite.

Si al menos se hubieran dado el tiempo de conocerlo, si por lo menos le hubieran preguntado directamente sobre lo que pensaba o sentía. Debieron tratarlo como otro chico normal, las cosas hubiesen sido diferentes entonces.

Ellos tenían la visión de un demonio en mente y de los demonios hay que protegerse. Hay que alejarlos.

—Ah...— Suspiró.

Él, en cambio, se había acercado. Lo había estudiado a fondo, lo había comprendido. Sus ideales, sus pensamientos, sus sentimientos. Los entendía a la perfección. Se había vuelto empático en cuanto a su situación.

Y egoísta en cuanto a sus sentimientos.

¿Qué seguía entonces?

Debía tener claro de que bando formaba parte. Goth le gustaba, le gustaba mucho, pero no quería que sus decisiones condenaran el multiverso.

¿Realmente había una opción correcta?

Hizo un mohín frunciendo el ceño entre sus pensamientos.

—Me gusta eso. — Respingó y giró la cabeza hacia Goth. Tenía esa serenidad de siempre, pero con un toque de la ilusión que se generaba en sus ojos al momento de abrir un regalo. —Me gusta esa expresión.

—...— Expresión. ¿Su expresión?

Sus pómulos se tornaron de colores en respuesta y su corazón dio un vuelco por la imagen tan tímida de Goth, intenta ser romántico de alguna manera. Avergonzado se dio la vuelta, tal vez creyendo que había dicho algo tonto, pero eso había sido suficiente para encantar a Palette.

Lo amaba.

Podía ser una palabra demasiado fuerte, pero era así.

Enserio lo amaba.