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POV. Elizabeth Camberleck.

Sonrío con nostalgia observando a Cassandra sentada sobre su cama absorta en sus pensamientos.

Aquello era algo que solía hacer muy a menudo de pequeña, en cualquier lugar que estuviera calmado y alejado de personas.

Ella siempre ha elegido la soledad.

Supongo que en algo deberíamos de ser diferentes.

-¿Entretenida?- alcé mi voz apareciendo abruptamente ante ella, provocando un chillido de su parte.

-¿Por qué siempre te me apareces de esa forma? ¡Maldición!- espeta con terror.

Reí a causa de sus facciones.

-Algunas costumbres no se olvidan, querida.

-Eres idiota- ríe posando sus manos sobre su rostro.

-Me lo sueles decir- molesto con burla.

Sonríe con timidez con la mirada sobre algún lugar desconocido de la habitación.

Parecía ida en sus pensamientos.

-¿Le has contado la verdad?- pregunté observando su rostro.

Asintió en silencio- Si, necesito contarle la verdad, Elizabeth... Quiero hacer las cosas bien con ella ¿Sabes? Ella merece saber la verdad.

-Es una chica increíble, Cassandra- sonrió- no merece sufrir, le han hecho tanto daño y aún así ella sigue buscando la felicidad del prójimo incluso cuando su corazón a sido roto sin piedad.

-¿Crees que me perdonará?

-Ella te ha perdonado, pero esta en ti luchar por volver a reconstruir su corazón con el amor de una madre.

-No merezco ser llamada de esa manera, he cometido tantos errores que detesto pensarlo.

-No eres mala, Cass. Has cometido errores al igual que el resto, pero eso no te hace ser peor persona, de nuestras malas acciones se aprende.

-¡He sido una completa desgraciada! Joder... con mi propia hija. ¿Qué clase de madre niega su existencia por otra persona que no merece nada?

-Te encontrabas bajo los efectos de su hechizo, hermana.

Niega una y otra vez con desespero.

-No merezco su cariño- las lagrimas se acumulan en sus ojos y mi pecho se comprime de dolor- No merezco que cariño de mi hija.

-Ven aquí- la envolví entre mis brazos- Todo se solucionará pero debes de estar a su lado, ella necesita de su familia. No te dejes engañar por su frialdad, es su autodefensa ante daños futuros.

-¿Por qué eres tan buena cuando por mi culpa has sufrido tanto?

-Ambas hemos sufrido por culpa de una a la otra, pero no dejas de ser mi hermana.

-Te he echado de menos todo este tiempo- murmura acariciando mi mejilla- He perdido años de vida sin tenerte a mi lado, sufriendo por tu soledad.

-Estoy aquí- acaricié su cabello sintiendo sus sollozos sobre mi cuello.

-No vuelvas a irte o te arrancaré cada extremidad de tu cuerpo- amenaza sollozando.

Reí con diversión al oírla- Lo prometo, hermana. Jamás volveré a irme.

•°•°•°•°•°•°•°•°•°•

POV. Mercy.

Flashback.

Mi cuerpo se movía de un lado a otro buscando con desesperación algún rastro de Cassandra.

Temía lo que ella pudiese hacerle, realmente temía que llegara tarde para salvarlo.

Ella lo asesinará.

Mi respiración se paralizó ante aquel pensamiento, provocando una inminente furia en mi interior.

No debía dejar que me quitara a la única persona que se había ganado mi corazón.

Corría con desesperación llegando hacía donde ella se encontraba, sonriendo con frialdad, su rostro no expresaba ninguna expresión.

Pero... ¿Por qué?

-¿En dónde está?- grité con devoción cayendo de rodillas contra el frío suelo.

-Él debe de cumplir con su traición- responde con gesto serio.

-¡No!- gruñí con odio- No permitiré que le lastimes.

-¿Quieres probarme, querida?- ríe con ironía- Puedo cortar su cabeza delante de ti y condenarte de por vida.

-Eres un ser infeliz, juró que sufrirás por todo el daño que me causas- fruncí el ceño al sentir su mano impactar sobre mi rostro.

-¡Suficiente! Me he cansado de oírte hablar- musita observando a uno de sus guardias- Tráelo- murmura sobre su oído.

-¿Qué harás?- pregunté quitando mis lágrimas- Joder ¿Qué harás? Maldición- proteste sintiendo nuevamente otro golpe sobre mi rostro.

-¡Que te calles, maldita bruja!- alzó su voz- Sólo espera y verás tu futuro..

-¡Por favor!- sollocé observando como traían inconciente a mi esposo- No le quites la vida, Cassandra.

-Sigue hablando y su muerte será peor- sonríe.

-¿Por qué me haces esto?- explote- ¿Por qué me odias tanto?

-Porque tú si eres feliz- admite con arrogancia antes de decapitarlo ante mi.

-¡No!- alcé mi voz sintiendo mi corazón romperse.

-Te advertí que no podías ser feliz.

Ríe antes de que todo se oscureciera a mí alrededor.

-Prometo que te haré sufrir.

-Jamás conocerás a tu heredera- me prometí antes de caer inconsciente.

Fin del flashback.

-Cuando observé el cuerpo sin vida de el por culpa de Cassandra, un fuerte odio invadió mi cuerpo y me prometí hacerle daño. Quería que sintiera el dolor que sentí cuando me quitó el amor.

>>Fueron tantos años repleta de odio que cuando tú naciste lo único que pensé fue en iniciar mi venganza. Pero tanta fue la sorpresa de saber que ambas compartíamos no solamente sangre sino que una conexión para toda la eternidad, accedí ante mi rencor queriendo escuchar su versión de la historia.

Gruñí con frustración- Ella me confesó algo que jamás me hubiese imaginado.
Algo tan horrible y devastador.

-¿Qué te ha dicho?- indaga con interés.

-Había intentado abusar de ella.

Reina MalditaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora