Capítulo 36

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El primer día de Yoongi en casa de sus padres había transcurrido normal y muy tranquilo. Había aprovechado para descansar e instalarse, así podría después hacer todo lo que tenía planeado, como visitar a quienes quería o conseguir un empleo.

Eran apenas las nueve de la mañana. La señora Min puso el desayuno sobre la mesa, feliz de que, de nuevo, fuera para tres personas. Tras haberle dado a su hijo lo que había preparado para él, acarició amorosamente sus cabellos.



—Gracias, mamá.

—Ah, no es nada. Es lindo tenerte de nuevo en casa.

—Te escuchó las primeras mil ochocientas veces, cielo —dijo el señor Min mientras leía el periódico, como era usual para él.

—Ya empezamos de nuevo —negó con la cabeza.

—Papá, deja de molestar a mamá, por favor.

—De hecho, iba a hacerlo una última vez —pasó una de las páginas del diario y acomodó sus lentes—. Ella te tiene que decir algo.



La mujer bajó su cabeza y tomó asiento en su lugar. Yoongi se sorprendió ante tal acción y se preocupó.



—¿Qué pasa?

—La familia que vivía en tu antigua casa se irá hoy. Llamaron para decirnos que su nuevo hogar ya está listo. Nada más tienen que llevar sus cosas y podrás volver. Es una buena noticia, pero no puedo evitar pensar en el hecho de que mi hijo volverá a irse.

—Estaré a unas calles, mamá. Además, prometo volver cada día.

—No hace falta, cariño. Tú haz lo que tengas que hacer.

—De todas formas, los veré. No te preocup--



De pronto, el timbre sonó varias veces, interrumpiendo la frase del pelinegro. El señor Min rió y se paró de su silla tras haber cerrado el periódico y haberlo apoyado sobre la mesa, a un lado de su desayuno.



—Ah, creo saber quién es. Tú quédate aquí, hijo.



Yoongi, más que emocionado tras haber comprendido que se trataba, probablemente, de Jungkook, asintió con la cabeza y sintió su corazón latir fuertemente en su pecho. El sentimiento se multiplicó una vez que oyó a su padre abriendo la puerta.



—¡Hola, hijo!

—¡Buenos días, señor Min!



El muchacho frunció sus cejas. Apenas conocía aquella voz.



—¡Traje unos panecillos para usted y su esposa! Es de esa panadería que adoran.

—Ah, siempre tan atento... sin embargo, hoy tenemos visitas ¿Habrá suficientes?

—No lo sé... si vine en un mal momento, entonces les dejaré esto y me iré. Pasaré a verlos más tarde.

Who are you, Park Jimin? [Yoonmin] ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora