Pacta Sunt Servanda

Capítulo 15: Provocación y Una bomba de vergüenza

Una pequeña niña de aspecto chino caminaba por los pasillos de Nami-Chuu. A pesar de lucir pequeña se trataba de I-Pin, una menor que a su corta edad ya era una asesina a sueldo a quien se le encargaban pequeñas misiones independientes. 

No pertenecía a ninguna familia, pero ahora tenía la misión de asesinar a un deudor de los yakuza que la habían contratado. 

Estaba en el lugar que se le había indicado, el pequeño pueblo de Nanimori, allí buscó por un lado y por otro al sujeto de la fotografía que se le había entregado. Hasta que lo vio de espaldas entrando a Nami-Chuu.

Por la escuela iba caminando mirando hacía todas partes intentando encontrar al sujeto que debía asesinar, hasta que una voz suave la interrumpió.

-Hola, pequeña- I-Pin volteó y se encontró con una pelinaranja que la miraba con curiosidad-¿Buscas a alguien? - I-Pin solo atinó a mostrarle la fotografía - Oh, no conozco a esta persona.

I-Pin pareció decepcionada, por lo que la mayor se presentó como Kyoko Sasagawa y se ofreció a ayudarla a buscar a la persona de la fotografía.

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-¡Fran!- el llamado de Tsuna hizo que Fran se diera vuelta cuando iba caminando al salón de profesores.

-Tsunayoshi- dijo Fran con una sonrisa- ¿Qué pasa?

-Etto... ¿quieres almorzar con nosotros?- preguntó el castaño con un ligero rubor en sus mejillas.

-¿Eh? De acuerdo- dijo ella encogiéndose de hombros con relajo.

Fran caminó tras de Tsuna siguiéndolo hasta la azotea de la escuela, donde se percató que se encontraban Gokudera y Yamamoto sentados en una esquina. Se acercaron a ellos y se sentaron formando un pequeño círculo.

-Donna, deje que ponga mi sweater ahí- dijo antes que la chica se sentara y dejó la prenda en el piso para que ella se posara sobre ella.

-Que amable, Hayato- dijo ella con una sonrisa.

-No... No es nada, Donna- dijo Gokudera mostrando una sonrisa poniéndose la mano tras la nuca.

-¿Mhn? Fran-chan, ¿quieres sushi?- preguntó Yamamoto entregándole a Fran un par de palillos extra que traía.

-¿Eh? ¡Muchas gracias, Takeshi!- exclamó la chica tomando una pequeña pieza- ¡Delicioso!

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-Ah, Kyoko- la llamó una chica pelinegra al encontrarse a su amiga en el pasillo-¿Quién es ella?- preguntó observando a la pequeña niña quien frunció el ceño y la miró atentamente-¿Eh? ¿Qué le pasa?

-Ah, ¿cómo te llamas pequeña?- preguntó Kyoko.

-I-Pin- susurró la pequeña con algo de vergüenza.

-Bueno, I-Pin-chan, ella es Hana- dijo presentando a su amiga- Estoy ayudándola a buscar a alguien- y al decir esto, I-Pin levantó la fotografía mostrándosela a Hana.

-¿Eh? ¿Habrá alguien así en la escuela?

-Se supone que entró aquí.

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-¡Hervíboros!- la voz del prefecto de la escuela interrumpió el almuerzo de los amigos.

-¡Hibari-san!- exclamó Tsuna asustado.

-Maldito, ¿qué quieres?- preguntó Gokudera molesto.

-Tú- dijo apuntando a Fran quien lo miró confundida-¿Eres fuerte o débil?