Líquidos || Boku No Hero y tú

11

Maki

Pobre Kaminari. Fue derrotado en un segundo.

Suspiré.

— ¡Ah! Fue derrotado en un segundo. Patético —rió en burla.

—Monoma —Hablé sorprendida al escucharlo. Este habia aparecido de la nada.

—Oh, hola Maki. ¿Por que estas con estos patanes? Ven conmigo, con nosotros: somos los ganadores — me guiñó un ojo y luego sonrío en forma arrogante.

Rode los ojos y largue una pequeña risita.

Este desapareció de la nada y Kendo tomó su lugar.

— ¡Lo siento! —se disculpó por su amigo y luego me miró— Tambien lo siento si dijo algo inapropiado, Maki.

Negué suave y le sonreí. Ella correspondió y desapareció junto con mi compañero de hogar.

En el transcurso que me entretuve con Kendo y Monoma, Deku no paraba de parlotear sobre contraataques y Ochaco desapareció. ¿Donde se fue? Que raro...

Me encogi de hombros y seguí mirando la vista al frente.

Mei contra Iida. Esto seria interesante.

Oh. Tiene algo.

Luego de debatir Midnight aceptó el soporto que Iida llevaba. Sospechoso si se lo dio su contrincante... Mmmm...

[...]

Oh, vaya. El pobre fue usado. Fue su conejillo de indias. ¡Iida fue estafado!

No pude contenerme y reí.

— ¿De que te ríes?

Su característica voz fría y seria lo delataba.

— De que Iida fue estafado, fue engañado como un niño de 8 años —volví a reír.

— Oe, es algo chistoso si te pones a pensar —una suave risa salió de la garganta de Kirishima.

Empujé levemente a Todoroki.

— Aguafiestas. —Rodé los ojos al notar que ni sonrió.

— Pobre de Iida. —Soltó Asui.

— Al menos pasó.— Trató de levantar el ánimo Jiro

— Es verdad. —Finalizó Momo.

—Esta por empezar la otra batalla. —Anuncia Tokoyami.

Ojiro miró —: Oh no...

Ashido contra Aoyama.

— ¿Quien creen que ganará? —Pregunta Deku.

— Mmmm... ¡Ashido!

Momo asintió—: Concuerdo.

— Aoyama. Sin dudas —habló seguro y arrogante Mineta.

Mina se movía rápidamente evitando el laser de Aoyama. Y luego, ¡Pam!

Este le agarro un terrible dolor de estómago y Ashido aprovechó eso.

Me levanté gritando eufórica.

— ¡Asi se hace Ashido! ¡Bien!

Las chicas me siguieron.

Ashido habia ganado.

[...]

— ¿Qu...? ¡Qué! ¡¿Como es posible que haya perdido Momo?!

— Momo pensaba mucho. —Me explicó Deku.

— Tokoyami aprovechó eso. —Finalizó Ojiro.

—Wow...

—Tokoyami es muy inteligente por lo que veo.— Dijo Asui.

— y suave. Fue muy amable con ella, solo golpeaba su escudo. —Agregó Ojiro.

— Luego regreso. Cuiden mi lugar. —Pidió Deku.

Asenti y este desapareció junto con su libreta.

— ¿Sabes cual viene ahora? —Pregunté intrigada.

— Ese —Ojiro señaló la pantalla que mostraba los proximos rivales—. Será interesante.

— Ya lo creo —Largué divertida.

Kirishima contra Tetsutetsu. Era una cosa digna de ver.

Estos empezaron y golpes recibían y daban, recibian y daban, recibian y daban y re-Aburrido.

Bufé.

— ¡Vamos Kirishima termina de una vez! —Pedí.

Este seguía golpeando y recibiendo.

— Sus singularidades son similares, esto será eterno.—Se quejó Ojiro.

— Ya lo creo.— Concuerda Asui.

— Si no hacen algo diferente el resultado no varía.

— ¡Kirishima bueno para nada termina de una vez! ¡Tú puedes!

El pelirrojo se ve que escuchó mis gritos ya que se río.

Estos gritaron fuerte y al insinuo se dieron un buen golpe.

Ambos cayeron.

Ambos fueron derrotados.

Fue un empate.

Un empate.

¡Un maldito empate!

No podia creer lo que estaba viendo. Reí torpemente.

— Son unos tontos, era obvio que iban a empatar. Son muy similares ademas de su singularidad. Son obstinados y persistentes.

— Ni que lo digas. —Rió Jiro.

— Al menos al principio fue entretenido.

Y allí se fueron ambos en camilla, junto a Recovery Girl para ser curados y luego hacer un empate con vencidas, que claramente pasara lo mismo que aquí.

Oh, oh.

Ochaco.

Contra.

Bakugo.

— Oh no... —Susurré

—Será brutal este enfrentamiento. —Jiro.

—Casi que ni ganas de verlo.— Dijo incomada Asui.

— Ojala se quede sin ropa Uraraka.

— ¡Mineta! —reproché.

— Bakugo no será para nada blando.— Avisó Ojiro.

— Ella tampoco. Yo se que puede. Solo debe tenerse fe a si misma
—hablé y luego susurre para mi misma—. Vamos Ochaco, tú puedes...

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¡Hola y adiós!