Líquidos || Boku No Hero y tú

34

Maki

—¡Es genial, Midoriya! —solté feliz.

—G-Gracias...

—Me alegra que te haya aceptado, ahora puedes hacer la residencia.

Asintió feliz.

—Se nos adelantó, debemos alcanzarlo.

Me giré cuando escuché eso, viendo a Bakugo y Todoroki hablando entre ellos.

Aah, se refiere a Izuku...Bueno, ciertamente están atrás.
Reí internamente.

Caminé hacia ellos y pasé cada brazo por sus cuellos, quedando colgada a estos.

— ¿A quién quieren alcanzar? Lentos —dije burlona.

Katsuki gruñó molesto.

Aizawa apareció diciendo que habían profesionales que querían que ciertos chicos trabajen con ellos.

—Debemos alcanzar-

—¡Callate!

Reí.

—Cuando pelean son tan divertidos —solté honesta.

Mineta dirigió su mirada a mi, pero lo que en realidad estaba viendo eran mis pechos.

—¿A quién le importa la residencia? Cuando puedo estar todo el día con Maki  —baba empezó a caer de su boca.

Por el rabillo de mis ojos noté como Bakugo lo miró molesto y de su mano empezó a hacer mini explosiones claramente dando la advertencia  y por el otro lado Shoto le dedicaba su mirada fría dando la misma advertencia.

Este algo asustado se alejó.

—Que exagerados son a veces

—Callate. Y tápate, no quiero tener que estar atrás de ti todo el tiempo —Aki me tapó con su chaqueta.

—Yo tan solo soy una inocente muchacha...

—¡¿De qué hablas?! ¡Nos dejaste haciendo el trabajo solos! ¡Te fuiste sin hacer nada!

Me hice la tonta.

—¿Mhm? ¿De qué hablas? No entiendo tu idioma SIMIO...

—¡Del castigo de Aizawa! ¡Te fuiste dejándonos todo el maldito trabajo!

— Aaah, si...No se de que hablas, lo siento adiós  —dije con diversión y me marché saltando.

¿Iba a morir? Seguramente.
¿Les estaba terminando su paciencia? Seguramente.
¿Voy a lamentarlo? Probablemente  no.

— __(tn), yo te quiero pero vas a morir algún día y no pienso ir a tu funeral.

Reimos.

—Tranquila, Momo. De pequeña siempre los molestaba. Era mi segundo trabajo.

—¿Y el primero?

—Estar con ellos.

—¿Ah?

—Fui su pilar. Yo los sostuve cuando estaban atravesando un mal momento, decidí que siempre los cuidaría y eso sigo haciendo hasta el día de hoy.

—Quien diría que tienes tu lado tierno.

—Siempre lo tuvo aunque se hace la tonta a veces —Kirishima pasó  su brazo por mis hombros divertido, entrando a la conversación.

—No se de que hablas, pelón.

—¡Te dije que no me llames así aquí!

— ¿Que? ¿Tienes miedo de que descubran que de pequeño fuiste pelón?

—¡Shh! —me tapó  la boca— por favor...

—De acuerdo, de acuerdo —reí—perdón.

— No diré nada —aclaró Momo, tranquilizando al pelirrojo sobre su más oscuro secreto.

Este dejó  de abrazarme y tocó la chaqueta.

—Esto no es tuyo —dijo algo molesto.

—Todoroki se lo dio. —Comentó Momo.

— ¿Eh? ¿Shoto?

—Sí,  ¿Por qué? Dijo que Mineta me estaba mirando mucho y dijo que me cubra.

Su rostro cambió a algo de molestia pero en unos segundos la relajo, moviendo su cabeza quitándole importancia.

—Esta bien.

—¡Maki! —miré a Hagakure quién vino corriendo—Aizawa dijo que Aqua te espera...Para hacer la...Residencia.

Sonreí.

—Recupera el aliento, Mina. Y gracias por venir a decírmelo.

Volvió a inhalar y se fue pero antes me respondió alegre.

—No hay de qué.

—Ya me parecía raro que no hicieras residencia.

— ¿Eh? ¿Por qué,  Kiri?

—No me digas así...—dijo algo avergonzado. Kiri era el apodo que le puse de pequeños, me daba pereza decirlo completo y bueno, surgió—. En fin, porque tienes una gran singularidad y estás entre las mejores.

—¿Pero...? —era muy obvio, lo estaba esperando. Kirishima siempre era así, decía algo bueno y trataba de no decir lo otro para no lastimarte.

—Eres muy vaga, te la pasas todo el día durmiendo acostada sin hacer nada.

—¿Me estás diciendo vaca?

—¡Sí! —le tomó unos segundos— ¡No, N-No! Espera, eso no. ¡Nunca dije eso!

Reí por la reacción que obtuve de él.

—Es broma, Kiri.

Este miro a otro lado avergonzado.

•••
¡hola y adiós!