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Dabi

— No estoy seguro de que funcione, Tomura.

— Lo hará. Me encargué  personalmente  que si ella llegaba a despertar de la hipnosis  volviera al trance si escuchaba cuatro chasquidos.

— ¿Como estas seguro que va a funcionar? ¿Y si ya pasó efecto?

— No lo esta. Aún sigue en su cabeza, en su subconsciente...

— De acuerdo, entonces... ¡Vamos a destrozar a la U.A! 

(...)

Una vez que entramos las alarmas empezaron a sonar y héroes aparecieron cual hormigas.

— Me vendería bien un poco de diversión  —reí mientras hacía aparecer mis llamas.

— Recuerden cual es la prioridad. La chica no lo es —habló Mr. Compress.

— Dabi, ven conmigo —ordenó—. Iremos por la mocosa. Los demás, diviértanse.

Toga sonrió retorcidamente y empezó  a moverse junto con Twice, Spinner y Compress.

Corrimos sigilosamente hacia los dormitorios  de la clase 1-A tratando de no llamar tanto la atención. Que alegría volver a ver a la castaña, será un placer ver su cara de horror y miedo.

Nos quedamos detrás de un árbol, esperando que salgan y así fue. Empezaron a salir dirigiéndose a quien sabe dónde.

— Ahí está —visualice  a la castaña en pijama y somnolienta—. La que tiene el pijama color amarillo.

— Bien hecho, Dabi.

Empecé  a largar llamas obligando a los que se encontraban a su alrededor a alejarse. Esta quedó  atrapada en medio del circulo de mis llamas azules.

— Hola, mocosa —sonreí saliendo del árbol y entrando al círculo con ella.

— Dabi. Aléjate.

— Oh, ¿Ahora me das órdenes? ¿Que pasó  cuando eras el perrito faldero de Tomura, eh? Hacias todo lo que decía sin rechistar  —reí seco—. Patético.

— No volveré  a caer en la misma trampa.

— ¡Cierren el puto pico! —grité ya harto de escucharlos llamar preocupados a la castaña. Mis llamas se apagaron. Shoto.

— Alejate de esa mujer ahora mismo  —ordenó Todoroki.

— ¿Hah? Esta chica se va con nosotros, idiotas.

— No. No lo hará, no vamos a perderla otra vez —habló Midoriya.

Noté que varios alumnos se habían ido. ¿Por refuerzos o por miedo? Mhm...

— Eso lo veremos... Tan solo tengo que chasquear  mis dedos y... Volverá  a ser esa linda zombie —reí corto.

— ¿De qué hablas? —preguntó la castaña.

— No creías que no iba a tener un az bajo la manga... ¿O si, Maki?

—  Tomura. —escupió al verlo.

Los otros cuatro se pusieron en modo de alerta al verlo.

— ¡Maki, corre! ¡Lo detendremos! — habló el pelirrojo.

— ¡Por favor, escuchanos y corre, tú eres su objetivo! —ahora el peli verde.

— No hagas una de tus escenas, idiota y vete de aquí antes de que te haga volar con explosiones. —el rubio.

— ¡Ya! — ordenó el hijo de Endeavor mientras me lanzaba hielo.

Esta asustada y sin saber que hacer corrió desesperada, tratando de buscar un lugar seguro.

— ¡Ah, no! ¡No lo harás! —grité mientras esquivaba el hielo del chico y luego le lancé  llamas, quemándole la pierna solo un poco.

Esta gritó  por el dolor y aproveché  mi oportunidad mientras Deku y el pelirrojo se encontraban peleando con Tomura para correr hacia esta y tomarla.

Aquellos dos reaccionaron y vinieron con todo, y una vez más la castaña escapó... Por ahora. Todo está saliendo de maravilla.

— Son un fastidio —me quejé irritado—. Mueran de una vez —lancé las llamas.

— ¡Muere! —Bakugo no paraba de lanzarme explosiones.— ¡Estas muerto si piensas que vamos a permitir que te la lleves!

— Ella nos pertenece.

Maldición, no paraban ni un segundo, estaban muy enojados.

— Esto me está cansando.

Busqué con la mirada a Maki mientras levanté una enorme pared de llamas. ¡Bingo! Estaba corriendo como podía debido a que yo le quemé  la pierna.
Una sonrisa de satisfacción apareció en mi boca. Esto sí me gustaba.

Maki

Mierda. Como ardía esto... Sentia prenderse fuego mi pierna, sentía la carne viva de mi pierna quemarse.

Ahogué  un grito al caerme.

¡¿Que es lo que quieren de mí?!

¡Todo estaba genial hace unos meses!
Todo estaba tan tranquilo y sereno... ¡Mis únicos problemas eran de chicos! Malditos  bastardos...

— Hola, Maki.

•••
¡hola y adiós!

Último cap-->

Líquidos || Boku No Hero y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora