El Destino Llama A Tu Puerta. (EDLlATP 1)

Capitulo 11

El paseo se me hace corto porque no ha pasado ni media hora desde que he salido cuando me agarran Àlex por un brazo y Marc por otro.

-Hola. ¿En qué puedo ayudaros?
-Vamos a llevarte de vuelta a la casa de tu tía que vamos a hacerle una fiesta sorpresa a Ariadna.
-Ahh. Pues id yendo vosotros. Yo ya voy.
-No, no. Tú vienes con nosotros.
-Quiero algo a cambio.
-¿El qué?
-Una videollamada con mi amiga. Tuya.
-¿Mía?- pregunta Marc.
-Sí. Te adora.
-Vale. Lo haré. En la fiesta. Ahora vamos.
-Espera, ¿y de mí no quieres nada?
-Qué me dejes en paz.

La cara de Àlex es un poema, pero es que nuestra relación siempre fue muy intensa y no quiero ir más lejos de una simple amistad.

Marc me intenta pasar el brazo por encima pero como soy más alta que él acaba desistiendo al rato. Pobre Marc. Voy hablando con los dos camino a casa de mi prima y acabo como no tropezandome y en brazos de Àlex que ha parado mi caída a tiempo. Nos miramos durando lo que pueden ser minutos y luego me aparto de él y sigo camino a casa de mi tía. No quiero enamorarme de nadie, y menos de él. Solo es mi amigo. El primer chico al que besé, pero mi amigo. Quiero llegar a casa de mi tía y olvidarme de esa sonrisa que me vuelve loca desde que aún no sabía caminar.

Menos mal que llegamos no mucho después y puedo irme directa a la habitación que me ha dado mi tía. Me cambio por algo más mono, pero antes me dejo caer en la cama y me intento relajar. Àlex no me va a quitar el ojo de encima en toda la tarde y eso no me va a ayudar a estar más tranquila.

Acabo saliendo igual que he entrado en la habitación. Cuando menos provoque que Àlex me tenga que mirar mejor. Así que así estoy bien.

Voy a la cocina a por un vaso de agua pero Àlex ya está ahí ayúdando a mi tía con las cosas de la fiesta. Y cuando esta misma se va para empezar a llevar las cosas Àlex no duda en acercarse a mí. Me tiene contra él y la encimera de la cocina. ¿Tiene que estar tan cerca? ¿Es normal que haga tanto calor? ¿Es tan alto o yo he empequeñecido en dos segundos?

-¿Podemos dejar de evitarnos? Me gustaría que volvieramos a ser...
-Amigos. No puedo mantener otro tipo de relación Àlex.
-Lo entiendo.

Algo me dice que ha pensado que le estoy diciendo que tengo novio, pero ahora mismo me da igual. Eso ayudará a que no quiera profundizar algo que no puedo tener con él.

Dejo que me abrace e incluso que me dé un beso en la frente. Necesito recuperar su amistad. Lo que no puedo permitir es que quiera llegar más lejos.

Cuando salimos de la cocina ya está todo preparado he incluso Ariadna ya ha aparecido. Y sí, hemos salido muy juntos puede ser y todos estarán pensando lo que no es.

Ari no parece muy emocionada con la celebración. No sé alegra de cumplir los 18. Solo le trae problemas y obligaciones. Le encantaría volver a tener 4 años. Cuando Marc se enforzaba por llamar su atención y aún tenía a su prima todos los días o casi todos a su lado.

-Lo siento, me voy a mi habitación.

Marc nos mira a todos y mi tía le asiente para dejarle seguir a Ariadna.

-Bueno parece que esto se ha acabado. Yo también vuelvo a la habitación.
-¿Puedo ir contigo?
-Sí.
-Tened cuidado.- nos dice mi tía aunque más bien lo dice pensando en Marc y Ariadna en la misma habitación.

Llego a la ha habitación y me tumbo en la cama dejándole espacio a Àlex por si quiere hacer lo mismo. Y no duda en hacerlo. Así que acabo apoyada sobre su pecho contándole lo mierda que ha sido mi vida en los últimos años.

-¿Y tú? Además de ser piloto de motos y eso. ¿Qué me he perdido?
-No mucho. Te he echado muchísimo de menos Bells.
-Y yo a ti Pistolitas.
-Será mejor que me vaya ya.
-No. Por favor.
-De acuerdo. Me quedo un ratito más.

Àlex se queda a mi lado en silencio hasta que me dejo dormir. No por mucho tiempo porque mi prima empieza a gritarle a Marc.

-¡¿AHORA?! ¡¿AHORA ES CUANDO PREGUNTAS?! No Marc, ahora no me vale que me preguntes.
-Ariadna joder, sé que algo te pasa. Y sé que es mi culpa. ¿Me vas a decir que he hecho?
-¡¡EXISTIR!! Eso es lo que has hecho mal. Mi vida sería más fácil sin que existieras tú.
-¡Fuiste tú la que me dijo que preferías que fuéramos amigos!
-¡¡PORQUÉ MI MADRE ME DIJO QUE TE DEJABA CLARO QUE NO PODIAMOS SER MÁS QUE AMIGOS O TE DENUNCIABA!! ¡¡IDIOTA!! Y si piensas que por ser mayor de edad desde hace unas horas ya habrá cambiado de idea te equivocas. No te va a aceptar nunca y no puedo permitir que te pase nada Marc. No me lo perdonaría nunca.
-Me voy a casa. Será mejor dejarte sola. Feliz cumpleaños Ariadna.
-Gracias.

Marc sale de la habitación y entra en la mía.

-Àlex, me voy. ¿Vienes o...? Te veo después.
-¡Marc! ¡Espera!- y soy yo la que le para.
-Voy contigo. Me debes la videollamada, además, seguro que Leli te anima un poco. Está un poco loca.
-Vale.

Y nos vamos los tres a casa de ellos. Dejo que Marc se calme un poco y cuando ya está mejor preparo el móvil y llamo a Leli.

-Hola.
-Hola. Pareces cansada.
-Un poco. Pero es que ayer fue un día raro.
-¿Y si descansas?
-No sé.
-¿Quién es?- pregunta Àlex metiéndose en el plano.- Hola.

Leli se queda pálida. No todos los días estás haciendo una videollamada y te aparece Àlex Márquez en pantalla.

-Hola. ¿Dónde estás Bells?
-En casa de unos viejos amigos. ¿Por?
-¿Ese es...?
-Oye, con quién hablais. No me dejéis colgado vosotros dos.
-¡¡DIOS!! ¡¡MARC!!
-Hola chica de pelo azul. ¿Eres amiga de mi cuñi?
-¡NO SOY TU CUÑADA, MÁRQUEZ!
-Mireia, ¿me vas a contar que coño está pasando aquí?
-Claro. Pues te presento a mi mejor amigo desde que usaba pañales, y a su hermano "mayor".- le digo haciendo comillas con los dedos a lo de mayor.
-No me lo puedo creer.
-Luego te lo explico Leli. Ahora me vas a perdonar pero te tengo que dejar.

Y le cuelgo sin más. Me va a matar cuando vuelva a Tenerife pero sino le iba a dar algo.