-¡¡LELI!!
-Dime loca. Que estoy a dos metros tuyos, y no estoy sorda.
-Ven.
-¿A dónde?
-A Cervera. Las dos solitas. ¿No quieres ver a Marc? Seguro que se muere por verte.No necesito decir más para saber qué va a venir conmigo y que no va a abrir la boca. Solo tengo que despistar a Joel y podremos irnos a ver a los chicos. Desde la media pelea del otro día con él no he vuelto a quedar con Àlex y tampoco me hablo mucho con mi hermano. Entiendo que se preocupe por mí, pero no es mi padre y ya no soy una niña. Hice una promesa, pero también pienso demostrarle a mi hermano que él no decide por mí.
Es que primero me intenta convencer de que lo haga con Àlex y ahora me prohíbe que lo haga. ¿Pero quién se ha creído que es? ¿Mi novio? Es mi hermano mayor, y eso no le da poder a decidir con quién me acuesto y con quién no y menos cuándo debo hacerlo. Quiero a mi hermano, pero que no meta las narices en mi relación con Àlex. Porque siempre elegiré a Àlex. No estuve 14 años sin verle para que ahora llegue Joel y me diga que no le vea.
Por suerte Joel está entretenido cuando vamos a salir, así que no me cuesta salir de casa con Leli pisándome los talones. Y una vez en el coche le doy el móvil a Leli y le digo que llame a Marc. La llamada es casi eterna. Solo hay que decir que cuando Leli cuelga casi estamos llegado a Cervera ya. Estos dos tienen aún más magnetismo que Àlex y yo juntos.
-¿Qué? ¿Ya te ha contado cuántos hijos quiere tener contigo?
-Sí, 93. Bells, no jodas. Solo me ha dicho que estaban a punto de salir a entrenar, pero que esperan por nosotras.
-¿Y solo para eso habéis tardado más de media hora?
-Vaaale. No solo me ha dicho eso. Pero el resto no te importa.
-¿Pa' cuando es la boda?
-¡Contigo no se puede hablar!
-Tengo que buscar algo bonito que ponerme en la boda de mi cuñado y mi mejor amiga.
-¡Qué no me voy a casar con nadie!
-Vale, Leli. Pero cuidado con lo que hacéis. No quiero sobrinos por ahora.
-Habla la más indicada.
-Como no sea del Espíritu Santo que yo sepa no voy a tener ningún hijo.
-No sé cómo aguanta Àlex.
-No tendrá que hacerlo por mucho más tiempo.
-Uhh, esto es interesante.
-No te voy a contar más, porque ni yo misma sé cuándo será ni cómo.Leli no dice una sola palabra más hasta que llegamos. Y yo no tardo nada en salir del coche y tirarme a los brazos de Àlex que ya nos estaba esperando.
-Te quiero.
Su respuesta aparece en forma de beso. Creo que aún no es capaz de decírmelo a la cara y con palabras. Pero puedo esperar. Porqué sé que siente lo mismo por mí que lo que siento yo por él. Y preferiría perder un brazo a que me separasen de él ahora mismo o en cualquier momento. No hay nada mejor que estar entre sus brazos y que besarle ahora mismo. Pero tengo dos pares de ojos mirándome y no quiero más coñas de Marc y Leli por el momento.
-Nadie os a pedido que os contengais. Así que podéis dejar de mirar y hacer lo mismo.
-Déjalo Bells, no van a dejar de mirarnos como si estuviéramos locos.
-Por ti. Por ti estoy loca.Veo a Marc impaciente esperando por Àlex y me veo obligada a alejarme de él.
-Vete a entrenar.
-Ven con nosotros. Te vendrá bien.
-¿Y Leli?
-Seguro que se divierte.
-Vale. Prepa... Ya sabías que iba a decir que sí, ¿verdad? Ya lo habéis preparado todo, ¿cierto?
-Sí.
-Pues vámonos.Cuando llegamos no tengo prisa por cambiarme. Prefiero dejar que empiecen ellos. Me gusta ver los piques que tienen esos dos entrenando. Pero mientras yo estoy tranquila viendo como compiten entre los dos Leli aparece totalmente cambiada y decidida a meterse en el duelo con esos dos.
-¿Sabes pilotar eso? Te vas a hacer daño. Deja que Marc venga a decirte cómo...- empiezo a decirle pero no me da tiempo a terminar de hablar.
Me quedo boca abierta mirando como Leli sigue de cerca a Marc y Àlex que ni se enteran que la loca de mi amiga se ha propuesto adelantarles sin que sepan que estaba detrás de ellos. Luego tengo que preguntarle porque nunca me había dicho que sabía pilotar una moto. Quizás lo hizo por no tráeme malos recuerdos. Aunque también habrían sido buenos. En su mayoría lo son.
Y una vez que veo lo que se están divirtiendo esos tres, me cambio enseguida y dejo en la pista todos los nervios, y los problemas, y todo lo malo. No puedo más con las tonterías de Joel, y Àlex a dado en el clavo, necesitaba esto para sentirme mejor. Una moto. Nada más.
Las horas entre piques y demás pasan volando. Y no quiero volver a casa.
-¿Quieres quedarte? No quiero que vayas sola hasta Lleida tan tarde.
-Tengo a Leli.
-Quedate. Y no te preocupes por ella, no se negará a dormir o a saber hacer qué, con Marc.
-Me quedo en tu casa, pero mañana llamas tú a Joel y le dices dónde he estado.
-Lo haré.Y me besa. Así no hay quien se niegue a dormir con él.
-Tortolitos, ¿nos vamos?
-Sí.Recogemos las motos, nos cambiamos y nos vamos. Leli salta de alegría al saber que dormirá en casa de los chicos. Aunque yo diría que no va a dormir mucho. No si lo hace en la misma habitación que Marc.
Intento que no se me cierren los ojos cuando tocamos la cama, pero el día de entrenos con Àlex me ha dejado agotada y ni Àlex besándome me despereza lo suficiente para nada. Soy un muerto en la cama de Àlex. Prometo que será la última vez que deje a este chico con las ganas. Pero es que hoy el cuerpo no me pedía otra cosa. Solo dormir calentita con Àlex a mi lado.

ESTÁS LEYENDO
El Destino Llama A Tu Puerta. (EDLlATP 1)
Fiksi PenggemarTodo lo que puede pasar a causa de una sorpresa de cumpleaños a una prima que hace más de 14 años que no ves. Portada de @leli_03