INVENIET | KOOKV

Quince

Estamos caminando a través de este abismo.
Esa pequeña luz...
Espero que estemos más cerca del paraíso.

-Love maze.

09:15 am.

Hoseok es el deslumbrante nuevo mesero que atrae más clientela de la normal solo por su carisma y radiante sonrisa que brilla en su rostro como si encandilara.

Y justo cuando piensas que su sonrisa no puede hacerse más hermosa, ahí lo tienes. El pelirrojo esboza la más hermosa de sus sonrisas al apuesto chico que acaba de cruzar la puerta de la cafetería y busca algo con la mirada.

- ¡Jimin! – grita un castaño divisando a su amigo a lo lejos recogiendo un par de tazas de una mesa.

- Kim Taehyung.

Un chico de más o menos su altura, piel canela y rasgos definidos, camina desde la puerta hasta la mesa donde está Jimin y le abraza fuertemente levantándolo un poco del suelo – Taehyung... ¡Bájame!

- Lo siento – responde el moreno con una sonrisa – Es que estoy muy feliz, ¡al fin lo hice!

Jimin sonríe – ¿Qué hiciste?

Barriendo el lugar con la mirada, Jimin nota que el castaño ha llegado completamente sólo y eso por alguna extraña razón le produce un dolor en el pecho. Ni rastros de Jeon.

- Tengo algo para ti. Un regalo – responde Tae mostrando la lengua divertido.

Al rubio se le iluminan los ojitos en cuanto Tae menciona algo acerca de un regalo y palmea sus manos contento. A Taehyung le divertía ver a su amigo de esa manera, pues cuando Jimin sonríe sus ojos desaparecen en dos líneas y ya le había dicho muchas veces que cuando eso pasaba no podía ver nada.

- Ábrelo – le dice Tae sacando una caja amarilla con un lazo blanco para luego extendérsela.

- ¿Me propondrás matrimonio al fin? – bromea el rubio tomando el objeto con entusiasmo. En un parpadeo la caja es abierta con emoción para dejar ver un pequeño llavero en forma de ''L''– ¿Una L? 

- Es una J – explica Taehyung poniendo sus ojos en blanco como si fuera muy evidente – De Jimin.

Jimin está muy seguro que parece más una L, pero está demasiado feliz para reprocharle algo así que solo se limita a lanzarse sobre su amigo y darle las gracias. Era un regalo precioso porque se notaba que lo había hecho él mismo y eso valía más que cualquier otra cosa.

Y es que a Taehyung le tomó muchísimo tiempo realizar ese pequeño objeto. Tuvo varios cortes en sus manos que eran evidenciados por las miles de curitas en sus dedos – Me encanta – dice el rubio acariciándole sus manos lastimadas – Gracias.

Cualquiera que los viera diría que se trataba de una pareja de enamorados. Aunque solo se trataba de un par de amigos, se podía sentir el amor que ambos tenían.

Hoseok, que veía la escena desde lejos, ahora se acerca pasándose una mano por el cabello hasta ambos chicos que toman asiento. Y con un lápiz en sus manos se presenta:

- Buenos días – saluda cortésmente mirando a Taehyung – Mi nombre es Jung Hoseok, ¿qué desea ordenar?

El castaño era mucho más guapo de cerca, no podía ser real. Hoseok no había notado el bello lunar en su nariz y en su labio inferior, sus pestañas largas y oscuras, y esos bellos ojos cafés que lo volvieron loco en menos de un segundo.

- No te preocupes Hoseok – explica Jimin – Yo me ocupo de él.

Tae se le queda mirando un momento y al fin después de un rato, habla – ¿Jung?