Eres Mia Muñeca 1 (Terminada) "Corrigiendo"

Reunidos.

Estaban todos en el departamento de jon: tomas, mía, jon, steven, y la mama de alex.

-es comprensible el enojo de alex.. pero tu como su futura esposa debes apoyarlo. Dijo steven. Otra vez el con su debes estar con el aunque no quiera.

-pero le ah mentido, como crees que se siente? Comentó la chica a su lado que se llamaba Rony quien me olvide de nombrar.

-le mentimos para que no le dañara su perdida. Me defendí. Rony me miro y no opinó nada mas. Ya que ella es nueva en esto, y no sabe lo que pasa. Solo acompañó a steven hasta acá. Le agarro la mano para que el sienta que no esta sólo. Un escalofrío sentí al ver eso, pensar que yo lo bese aquella vez porque pensé que me olvidaría de alex. Y ahora el esta haciendo su vida olvidando lo que sintió por mi y eso me alegra mucho por el, nadie merece sufrir cuando su amor no es correspondido.

-y... cuanto creen que estará así? Preguntó mía.

-no lo sabemos, es muy rencoroso.. por eso decidí también dejarlo sólo. Dijo la mama de alex.

-pero no piensa en el bienestar de usted? Le dijo jon.

-si cariño, yo estoy bien viviendo con mi cuñada... hasta que mi pequeña algún día de la cara. Dijo mirando sus manos. Acaricie su hombro ella me dio una mirada triste.

-eh... Bien quien tiene hambre? Preguntó tomas quitando las tensiones. Todos reímos. Luego de comer me despedí de todos. Jon se ofreció a quedarse conmigo por un tiempo. Me negué diciendo que estaría bien pero no me creyó ninguna palabra.

Mientras jon dormía me dirigí al baño lo lamento pero lo necesitaba. Cerré la puerta, abrí el inodoro y pequeñas lágrimas salían. Metí mis dedos temblorosos a la boca. Sentí el ardor al tragar. Y esa maldita sensación de alivio. Tire del botón y vi como todo se iba transformándose en nada.

La puerta se abrió antes de que me parara. Mierda. Jon estaba junto a la puerta decepcionado.

-prometiste no hacerlo... Dijo.

-jon.. es solo que me cayó mal la cena, por eso lo hice... no es que quise mi estómago lo pidió, porque estoy mal necesitó tomarme algo para el dolor... Dije esquivándolo. Pero sujeto mi brazo.

-no! Ya no  soy un niño de cinco años para que me des excusas de "me cayo mal la cena..." "no le digas a nuestros padres..." "mañana te comprare lo que quieras" Repitió mi voz. El recuerdo de verlo asustado mirándome mientras lo hacia, me dolía.

-yo.. lo siento. Dije el me abrazo. Luego se alejó.

-dormiras conmigo, no ingresarás al baño sin mi permiso, comerás adelante mio, en la escuela te pondré en vigilancia en el baño en el bufet... Escuchame bien... No cumples cometes el  mínimo de no comer, o vomitar y sabes lo que haré? Te voy a internar ahora  vamos a dormir. Dijo. Lo seguí estaba jodida.

Ninguno dijo nada. Se acostó en la cama dándome la espalda. Al siguiente día, vi como se levantaba y entraba al baño. Cerré mis ojos. Pero mi sueño fue interrumpido.

-levantate, necesitó pesarte. Trague saliva. Acaso se volvió loco? Eso debe ser estaba exagerando! Lo lamento fue una recaída pero no volverá a pasar lo juro!!

-que...? Dije.

-escuchaste bien ahora levantate y ponte algo cómodo. Si continuaba el reproche  sería para terminar discutiendo.

Yo cerré mis ojos, no quería ver el número pero jon  lo dijo en voz alta:

-tu peso es de 52 kilos.. Solo te pediré esto.. Sube almenos hasta llegar a los 60 y te dejare en paz. Por lo que yo sentía mi peso estaba normal? No dije ninguna palabra y baje. Me metí a la cama. El me miro.