|16: "Idea"|

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Iana Bennett.

Corrí a abrazarla en el momento en que cruzó la puerta, ¡Estoy tan feliz de volverla a ver! ¡Era todo lo que me quedaba y lo que no pensaba dejar ir de nuevo! En el momento en que sus brazos me envolvieron sentí como había regresado el alma a mi cuerpo, me sentía en casa... La abracé con tantas fuerzas mientras ella solo reía sin parar, cuando nos tuvimos que separar, me di cuenta de lo mucho que habíamos cambiado las dos.

Ella estaba más alternativas mientras que yo seguía en mi estatura normal, estaba un poco flaca pero gordita, en cambio, yo sí estaba flaca debido al tiempo en el que no comía. Nos separamos y ella tomó mis manos inspeccionandome de pies a cabeza.

- ¡Mira nada más cómo estás pequeña zorra! ¡Ahora llegue yo y te voy a cambiar por completo! ¡Estás destruida cariño! ¡Necesito maquillaje y muchos tratamientos!

Sonreí y volví a abrazarla.

- Te extrañé mucho Lily.

- ¡Ay Ian! ¡No me vuelvas abandonar de esa manera!

Nos separamos y la invité a pasar. Anxo me observaba confuso y no dejaba de mirar a Lily, y la verdad es que mi amiga estaba muy buena, su cuerpo estaba mucho más voluminoso. Ella miraba a Anxo de igual manera pero con una pizca de desconfianza.

- Anxo... Te presento a mi amiga y única familia... Lily. Lily él es Anxo, el mejor amigo de Max.

Ambos estrecharon sus manos de forma normal pero pude ver el desagrado en los ojos de Lily, mientras que Anxo parecía totalmente noqueado con ella. Nos sentamos en el sillón y Anxo se levantó.

- Fue un gusto conocerte Lily, pero ya debo irme, nos vemos después.

Asentí despidiéndome, y tomando la mano de Lily, la llevé hasta la planta alta de la casa, ella estaba observando cada detalle que tenía la inmensa casa y no la juzgaba, así mismo quedé yo cuando la vi. Abrí la puerta de mi habitación y me tumbe en la cama al igual que ella.

- Ahora si... Cuéntame, ¿Qué fue lo que pasó?

- ¿De qué?

Pregunté mirando hacía otro lado, no quería responder preguntas, y ella quería una explicación concreta.

- No te hagas la loca, se que no te fuiste sola cuatro años, porque me hubieran comentado mucho antes, pero de la noche a la mañana te fuiste sin dejar rastro alguno y no soy tonta Iana, así que empieza hablar.

Estaba pensativa, la verdad era que tenía algo de miedo contarle porque ella era impulsiva al igual que Max y se que no duraría en cometer alguna locura. Y en ese momento pensé en mí, en lo sola que había estado y en lo mucho que había pedido hablar con alguien y ahora que tengo a la persona para desahogarme, no quería hablar. Me odia por eso, por ser aveces bipolar. Así que solo la miré.

- Prométeme que no harás ninguna locura Lily. Por la pincky.

- La pincky promens en una tontería.

- La pincky promens es sagrada y si no vas a cumplir tu promesa no te diré nada.

Bufó y termino extendiendo su dedo meñique hasta entrelazarlo con el mío, solte un gran suspiro y comenzó desde el principio. Cuando me enteré de la verdad, no me salté ningún detalle, quería que supiera todo lo que sentía cuando Omar me tomaba a la fuerza, porque era horrible el tener que aguantar una cosa así, le conté sobre el tiempo en el que vivía encerrada y muy poco comía, no es fácil para mí relatar esto,la verdad fue una experiencia bastante dura e difícil que tuve que aguantar, pero lo peor de todo fue que Max no salía de mi cabeza en ningún momento. Duramos unos minutos en silencio hasta que vi su rostro furioso y sus ojos húmedos.

- No puedo creer que tuviste que vivir eso Ian, lamento no haber estado para ti, pero en esos días estaba junto a Max buscándote, se lo que debiste de sentir porque fue algo muy espantoso, pero Max también lo pasó mal ese tiempo.

Ignorando su comentario defensivo, seguí relatándole lo que sucedió en el bar y en el cómo Max volvió a engañarme. Me sentía triste y algo melancolía, porque el recuerdo de cómo me tomaba con tanto deseo hacia que mi cuerpo sintiera espasmos. Seguí hasta que terminé en el cómo llegamos aquí.

- Le cortaré las bolas.

Solte una carcajada y ella seguía sería.

- No te rías perra, esto es en serio.

Seguí riéndome hasta que ella estalló en risas al igual que yo. Nos quedamos un rato así hasta que decidí romper el silencio.

- Lo sigo amando Lily, y tenerlo cerca para mi es una tentación muy grande, muero por besarlo, y por perdonarlo. Pero soy consiente de que no puedo hacerlo.

- Mira Ian, el punto es que mientras más intentes dejarlo, no vas hacerlo. Es así como un círculo vicioso, cuando entras allí, ya no hay vuelta hacía atrás, y terminas hundiéndote por completo al vicio del amor.

La mire y ella asintió, cerré mis ojos mientras pasaba mis manos por mi rostro con desesperación.

- Quiero perdonarlo, pero al mismo tiempo quiero hacerlo pagar por lo que me hizo.

- Aquí, no existe venganza, y la única solución es el perdón Iana... Pero si quieres hacer algo malo para que se sienta triste, yo puedo ayudarte...

Alzando una ceja me hizo sacar otra sonrisa, ¿Y si tenía razón? ¿Y si lo hacía sufrir un poquito?

- Yo solo quiero que me demuestre si es cierto que me ama, porque si es por confianza, tendrá que ganársela.

Ella se levantó de golpe caminando por toda la habitación mientras me observaba de reojo, ni entendía a que se debía todo eso, pero cuando menos me lo esperé su grito retumbó en la habitación.

- ¡Lo tengo!

Exclamó eufórica mientras se sentaba tomando mis manos. Mi rostro era de total confusión, mi ceño fruncido la hacía reír y fue allí dónde me contó.

- ¿Crees que funcionará?

- Si viene de mí, creeme que sí.

***

Holi, me siento extraña he actualizado 3 días seguidos y sin problemas, espere que todos sean así para no tenerlos tan abandonados.

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Acepto opiniones para aportar sobre la historia, al igual que críticas positivas 💕

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