Konosuba!, Bendita Sea Mi Diosa

prólogo

Me encontré en un cuarto vacío, sentado en una silla de espera, lo último que recuerdo fue que intenté salvar a una chica.

- Kazuma Satou.

Una voz me llamó, en cuanto vi quien fue, mi corazón se aceleró. (Efectos secundarios de mi vida como hikikomori).
Una chica de aproximadamente 17 años, con unas curvas muy bien definidas, un cabello azul al igual que sus ojos que me recordaban al cielo despejado de una tarde calurosa.

Caminaba hacia una silla que estaba frente a mi y se sentó.

- Por desgracia tu vida llegó a su fin.

- Lo Entiendo, pero dígame, ¿Qué pasó con la chica que intente salvar de aquel camión?

- Ella está bien, solo se torció el tobillo y tuvo unos cuantos raspones.

- Ya veo, es un alivio saberlo, mi vida no fue desperdiciada después de todo. Mamá, papá, fui un héroe...

- Pero... ¿De qué hablas?, ¿Camión?.

- Si, estaba a punto de ser arrollada pero la salvé.
Dije un poco orgulloso pero...

La carcajada de la chica desalineo la divinidad y serenidad que había mostrado, comenzó a burlarse de mí.

- Mira que confundir un tractor con un camión!, Ja,ja,ja, por eso eres un nini hikikomori que no sabe la diferencia de ambas cosas!...

- ¿De qué hablas?, ¡¿Cómo que un camión?!.

Sin casi poder hablar me explico que morí de una forma patética, no quería escucharlo pero se acercó a mi casi gritando que había muerto del susto pensando que un jodido camión me atropellaría. La chica no hubiera sido herida en lo más mínimo, de echo quien le lastimó fui yo, los doctores no evitaron reírse de mi muerte, ni la policía, tal vez esto será difundido en una noticia viral de una muerte Estúpida!...

Me lleva la...

- Ya me divertí un poco, en fin nini.

- Llámame por mi nombre Estúpida Diosa!

- Ten más respeto!, Soy una divinidad y no permitiré que me hables así!

Está muy cerca.

- Bueno como sea, ahora quiero proponerte algo. ¿Te gustan los videojuegos, no es así?.

- Y eso qué?

Me explico que hay un mundo bajo la amenaza de un Rey Demonio y quiere enviarme con un poder regalado a ese mundo como un héroe, suena a un anime barato y muy cliché, Además no tengo espíritu combativo. Pero, podré vivir una vida emocionante en carne y hueso como un RPG.

- Está bien, acepto.

Me dio un catálogo para que eligiera un poder, todo esto parecen hacks.

- Date prisa, nadie espera mucho de un Otaku virgen...

Definitivamente la odio.

Me acerque a ella.

- Puedo elegir lo que sea verdad?

- Si así es...

Parece una burocrata.

- Bien, te elijo a ti.

Dije eso mirándola a los ojos, tomando su barbilla con una expresión muy seria.
Me miró por un momento, hubo un silencio pero debajo de mi un círculo mágico color azul se abrió.

- quédate dentro porfavor.

- Oye ya elegi, así que date prisa.

- Tu solicitud es ilegal, dado que no elegiste a tiempo irás al mundo sin nada, que tengas suerte valiente héroe.