Una Noble Humana...

Capítulo 21

- Estamos en casa - anunció Victor con una sonrisa al entrar a la casa

Ambos, fueron recibidos con sonrisas y palabras cariñosas. Aunque las miradas curiosas y llenas de sorpresa no faltaron al ver a Rayla cargada de diversos objetos, la mayoría peluches de felpa.

- Iré a mi habitación - anunció al momento de cargar con todos los objetos

- Te ayudo

- No, esta bien, yo puedo

Con mucho cuidado rodeo los objetos que obstruian su paso, las miradas no se despegaron de ella hasta que hubo salido por completo de la sala de estar.

- Y bien... - dijo Shinwoo obstruyendo el paso de Victor

- ¿Y bien qué? - preguntó con algo de nerviosismo - oh es cierto! - exclamó al notar la mirada de todos - no me he presentado, mi nombre es Victor Rothwell, soy científico y... - una sonrisa se formó en sus labios y sus mejillas se pintaron de un leve rosa - soy la nueva mascota de la señorita Rayla - mustillo cubriendo levemente sus labios como si tuviese pena de aquel hecho, aunque no era así

Los chicos se habían quedado congelados ante tal declaración, por lo que sin dudarlo un minuto miraron a su mejor amigo Raizel, quien asintiendo con la cabeza confirmaba lo dicho.

Rayla por su parte había logrado llegar con éxito a su habitación, sin dejar caer nada de lo que llevaba, estaba descansando sobre su cama, admirando una almohada de cuerpo completo que Victor le había conseguido. "Si se parece" escuchó de parte de Felia, a lo que simplemente ella asintió.

Estaba inmersa en sus pensamientos, cuando tres leves toques en su puerta la sacaron de su divagación.

- Rayla, ¿estas aquí?

Rayla se levantó, dejando de lado sus cosas se aproximó a la puerta y abrió.

- Estoy aquí - respondió observando a Rael con detenimiento

- Sí - desviando la mirada trataba de esconder su preocupación - tú... ¿Estas bien?

- Sí... ¿Paso algo?

- No... nada

Rael bajo la cabeza, no le diría que la había estado siguiendo en secreto desde que se separó del grupo de chicos. Tampoco le diría que por alguna extraña razón se sentía incómodo cuando alguien más se le acercaba de forma cariñosa, como era el caso de Victor.

- Rael - le llamó luego de un profundo momento de silencio, buscando entre sus bolsillos dio con algo pequeño y de forma circular - ésto... todos lo cambiaban, así que quiero darte este - con la mano extendida espero a que Rael tomará el llavero

- Es... para mi? - con la mirada dudosa tomó el llavero, él no había recibido alguno simplemente había dado uno a Seira y conservado otro - es un...

- No sé qué es... pero parece que todos hacen ese mismo gesto - señaló apuntando al dibujo que tenía el llavero, era una manzanita con una tímida sonrisa - tú también lo haces

- Y-yo?! - con la vergüenza marcada en sus mejillas simplemente agradeció por el presente

Rayla estaba a punto de volver a su habitación cuando Rael le tomó de la muñeca.