Capítulo 7

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- Aaahhh~ por fin el descanso - comentó Shinwoo estirando su cuerpo después de un largo sueño

Rayla solo le miró levemente y luego volvió la vista a la pizarra, parecía ansiosa pues al igual que Raizel ella miraba hacia la ventana, solo que ella miraba con impaciencia a diferencia de Raizel.

- Rayla, ¿Iras a comer? - le llamó Yuna con delicadeza al ver que estaba inquieta

- Quizás no tenga hambre - señaló Ikhan

- Tonterías... todos debemos comer... vamos Rayla te compro el almuerzo - dijo Shinwoo con una gran sonrisa

Rayla solo asintió, al ver como Raizel se levantaba de su lugar para ir por el "almuerzo" que Shinwoo había nombrado.

En el camino habían sido un poco ruidosos, pero Rayla no les prestaba atención, parecía estar ansiosa por encontrar a alguien, y ese alguien estaba en la azotea dando su ronda de vigilancia y, curiosamente también estaba ansioso.

- Ramen para todos! - exclamó Shinwoo al momento de traer, con ayuda de Regis y Seira, ramen para todos - a comer~

Rayla miró con detenimiento el tazón de fideos que le había puesto en frente Shinwoo, luego recordó algo, con cuidado revisó su bolsillo izquierdo y sacó la bolsita color azul celeste que Rael le había dado antes. Saco uno de los papeles que había dentro del bolsillo y con cuidado se lo alcanzó a Shinwoo.

- Es por el ramen ¿Cierto? - preguntó un tanto nervioso, a lo que Rayla asintió - bueno... luego te pasare el cambio, esto es como para pagar por cuatro...

- Es por el de nosotros - explicó Rayla - el de Raizel-nim y mio... Rael dijo que lo usará en nuestros... - Rayla torció la boca, parecía no recordar la palabra...

- Almuerzos? - le acompleto Sui

Rayla pareció entusiasmarse al asentir, aunque poseía su cara tan neutral como la de Seira sus movimientos parecían muy energéticos y llenos de vida.

Todos sonrieron al verla así, mientras las mejillas de Rayla parecieron colorarse por unos segundos. No entendía la situación y aun así parecía tan cálida y llena de vida que le hacía saltar el corazón.

Después de escuchar de Raizel que la comida aumentaba, Rayla había esperado junto con Raizel a que eso pasara, miraba el tazón con un poco de extrañeza... no lo diría en ese momento y menos en ese lugar, pues confesar que esa era su primera comida "normal" después de ser convertida en sujeto de pruebas, sería un tanto extraño o por lo menos es lo que Rayla pensaba, al ver toda la armonía y alegría que había en esa mesa.

- Con esto sabrá bien - le dijo Raizel acercandole un pequeño platillo de extraña apariencia

- - dijo Rayla tomando el platillo

Miró un par de veces a los lados y otro par de veces hacía Raizel hasta por fin comprender cómo se debía comer aquel alimento, con mucho cuidado tomó los palillos entre sus finos y delgados dedos, tomó un poco del alimento y lo llevó hasta su boca, al topar con sus labios y después con su lengua una extraña sensación recorrió su cuerpo, sintió lo salado y caliente del alimento, algo totalmente contrario al té que la noche anterior había bebido antes de ir a dormir y aun más diferente al agua que Seira le había ofrecido la misma noche.

Rayla no sabía cómo explicar esa sensación embriagadora, quizás solo era un efecto de comer por primera vez, en largo tiempo, algo sólido por la boca y no algo líquido por las venas, como cuando le suministraban sueros al final de sus experimentos, por un momento dudo si tomar otro bocado, pero al final lo hizo y fue cuando escuchó claramente una voz en su cabeza decir "Qué nostalgia, ¿hace cuanto no tomábamos un alimento que pasara por nuestra boca? Raizel-nim de seguro ya me ha olvidado... pero yo, aun recuerdo cuando solíamos almorzar en compañía el uno del otro" Rayla sin querer había tragado la comida sin masticar por completo, se sentía extraña, cuando escucho la voz preocupada de Yuna.

Una Noble Humana...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora