Una Noble Humana...

Capítulo 29

- Vamos, vamos... ¿Ya vas a hablar?

Felia trono sus nudillos y se inclinó sobre Rin, la pobre tenía la cara llena de sangre y algún moreton. Felia no había sido nada gentil.

- No te diré nada

Rin le escupió, pero Felia esquivo el escupitajo y en respuesta le dio una patada en el estómago.

- Agradece que realmente no te he torturado! Habla de una vez, no quiero que mi señor siga viendo esto!

Rin desvío la mirada hacia Raizel, él simplemente miraba la escena sin parpadear, al parecer conocía bastante bien el temperamento de Felia, después de todo se parecía mucho al de Frankenstein.

Felia suspiró, estaba por insistirle nuevamente para que le dijera, que era lo que buscaba, cuando Rin estalló en carcajadas.

- Realmemte te has contenido! O no será...

Felia alzó las cejas, se sentía curiosa de la nueva forma en la que Rin intentaría salvarse la vida, no se percató de que tres personas habían llegado al lugar.

- ¿O no será qué?

- Qué tienes miedo ¿No es obvio? Cobarde!

Felia torció la comisura de sus labios, creando una retorcida sonrisa.

- Miedo, miedo yo?! Te enseñaré lo que es tener miedo!

Felia la tomó del cuello, una sombra oscura comenzó a trepar por el cuello de Rin, sus pupilas se encogieron. Rin escuchaba todo lo que Felia contenía en silencio: miles de gritos y alaridos salvajes, amenazas y llantos. Felia la soltó, Rin cayó de rodillas y gritó tanto como pudo, la sombra ya no estaba en ella, pero las voces seguían allí.

- Eso es tener miedo

- Lo siento! Lo siento! Yo hablaré!

- Oh~ creo que debí usar esto antes ¿No lo crees? - preguntó a la sombra que se había formado a su lado, está asintió - habla

- L-Lindell nos mando! Dijo que te lleváramos con él, en el mejor de los casos muerta

- Umm... - Felia tocó su barbilla, miró a la sombra como si esperará su opinión y luego dijo - estos líderes... tan estúpidos, no pueden hacer nada por si solos

- Sí, sí... por favor no me mates!

Aquella súplica provocó una siniestra sonrisa en los labios de Felia.

- Te perdonaría, de no ser por que esta niña te quiere muerta - dando la vuelta meneo la cabeza - y la verdad no soy del tipo 'hoy por ti, mañana por mi' - sonrió, con la barbilla le indicó a la sombra que hiciera su trabajo, un chillido se escuchó detrás de ella - Maestro, ¿Podría voltearse?

Raizel asintió, por fin Felia notó a las tres personas que habían llegado y con una sonrisa también les pidió que se dieran la vuelta.

- Por favor! Por favor!

- Hoy es por mi y mañana también - chasqueando los dedos las sombra engulló a Rin, y un millón de espinos le atravesaron el cuerpo - tengo una mente muy retorcida después de todo

El cuerpo completamente seco de Rin cayó ante los pies de Felia, la sombra le rodeaba mientras emitía suaves gruñidos, como si le pidiera permiso de acabar con el trabajo, Felia simplemente asintió y la sombra se deshizo del cuerpo, para volver a los pies de Felia.