ERES MÍA, PRECIOSA. (I)

Fashion victim.

#Mía

Cuando llegamos al campus me despedí de mi novio con un beso y diciéndole que tuviese mucho cuidado. Marcos se tomaba mis comentarios a broma, estaba muy confiado de que en su vida y en todo lo que tenía que ver con la manera en la que ganaba dinero no iba a haber ningún contratiempo, pero algo me decía que se equivocaba. No me dijo a dónde iba ni para qué, no me dijo si iba a participar en una pelea, carrera o cualquier otro asunto simplemente me dio un beso antes de que me bajara y me dijo que no íbamos a hablar de esto delante de mi amigo, supongo que la excusa le venía como anillo al dedo.
Vi como se iba derrapando en su impresionante coche como si no me hubiera dejado allí hecha un mar de dudas, y me sentí mal conmigo misma por sentirme así... por sentirme como si mi estado humor dependiera del suyo, de él.

-Vaya nena, siempre he sabido que a Leonor le gustaba la buena vida, pero desde luego que se ha superado con traerte a este sitio. Es total.

Las palabras de Polo me hacen detenerme a mirar el edificio detenidamente, tal y como él está haciendo. Estaba totalmente acertado con sus palabras, mi madre se había encargado de buscarme el sitio más moderno y probablemente caro de toda la ciudad. Toda aquella persona que conociera el interior del edificio podía ser capaz de distinguir el ala de los chicos del de las chicas desde fuera, la altura del edificio hacia que pareciese aún más grande. El precio de este sitio aumentaba por tas esas cosas, por esa y por la cercanía entre este y las facultades, desde luego que parecía sacado de una película de adolescentes.

-Sí, está guay. Vamos, quiero presentarse a mis amigas- le digo mientras empiezo a andar con él al lado. Los ojos de Polo brillaban a medida que nos encontrábamos gente. A él siempre le había gustado mirar, pero estoy segura de que lo que realmente le volvía loco era que lo mirasen. Polo era guapo y sofisticado, un chico de mamá que se vestía con ropa cara y sabía sacarse provecho. No puedo rebatirle nada en su contra porque en ese sentido yo soy igual que él.

-Vaya chulazos hay en este sitio nena, no entiendo como has podido meterte en una relación tan pronto- yo le miro contenta. A pesar de que pasemos tiempo sin vernos, nuestra relación siempre será la misma. - Ah claro, ya veo lo que me quieres decir con esa mirada.

- ¿Eh?

-Sí nena, yo puedo leerte como si fueras un libro abierto. Ese hombre es bueno en la cama. - Yo me río porque dudo mucho que se me note algo así en la cara, pero a él le encanta hablar de estos temas.

-Bueno, no te lo voy a negar... no he disfrutado así con ningún otro hombre antes.

- Venga ya, te pasaste todo un verano hablándome de lo bueno que era en la cama James. James ¿recuerdas? El rubio cañón ese que tanto te gustaba. Te liabas con él a todas horas y yo siempre tenía que cubrirte de nuestros padres.

- Eso fue hace dos o tres años Polo- le digo riéndome- yo también te cubrí durante todo el viaje para que te liases con el hermano de James. ¡Casi me quitas a el mío también!

-Ay nena, es verdad. Siempre hemos tenido mucho peligro, pero que se le va hacer... todavía no ha nacido persona que se resistes a estas caritas. -Abro la puerta de mi habitación con la llave y lo primero que me encuentro es a Emma tirando toda la ropa de su armario por la habitación y Lili regañándole por ello.

- ¡Que pares Emma que la habitación estaba recogida!

- ¡Claro! ¡Como tú siempre sabes que ponerte! - yo me quedo en la entrada observando la situación tan graciosa que tengo ante mis ojos.

- ¡Si me dejases ayudarte a elegir ropa cuando vas a comprarla no te pasaría esto!

-Vaya con los problemas del primer mundo- me susurra Polo al oído.

-Lo sé, pero no te dejes engañar por la escénita que están montando, son buena gente ya verás.

- ¡Sabes que no me gusta ir de compras! - grita Emma.

- Tengo que hacer que se calmen- le digo a Polo que está divirtiéndose tanto como yo. Siempre nos había gustado las peleas de niñas ricas, nos reíamos mucho viendo "Gossip girl".

-Tranquila cielo. Ya ha llegado la solución a tus problemas.

Las chicas se giran hacia nosotros en cuanto ven a mi loco amigo hacer su entrada triunfal en la habitación. A medida que Polo habla camina con los brazos levantados haciéndonos reír a las tres. Estoy segura de que se van a llevar mucho más que bien.

- ¿Quién eres tú? -pregunta Emma.

-Es Polo, el mejor amigo de Mía- dice Lili, que sabe quién es porque le había hablado muchas veces de él, y ella sabía que iba a venir hoy.

-Corrección cielo, soy como su hermano, su confidente, su alma gemela. Tú debes de ser Lili- dice dándole un beso en la mano- lo que me lleva a que tú- dice girándose y señalando a Em- debes ser Emma. Encantado chicas, creo que nos lo vamos a pasar bien.

-Encantada, siéntate si quieres- le dice Lili palmeando la cama a un lado de ella. Él se sienta dirigiéndole una sonrisa. Siempre ha sido un bien queda.

- ¿Qué te pasa Em? - está vez soy yo quien habla.

-Tiene una cita, por fin Ricky se le va a declarar y no sabe que ponerse. Lleva así toda la tarde y me va a volver loca.

- ¡Ay nena entonces yo soy tu solución! - dice Polo. Yo sé al instante que tiene toda la razón del mundo, en cuestiones de moda él siempre tiene la solución

- ¿De verdad me puedes ayudar? - pregunta Em con todo de desesperación.

-Ay cielo, por supuesto. No hay nada que me guste más que una fashion victim.