Capítulo 29.

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Capítulo 29.
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La Ruleta de Juegos que Puede Acabar Bien.
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-Bien. Antes de entrar cierra los ojos Rose-chan. - pidió Dazai sacando un trozo de tela de su bolsillo.

Envolviendo los ojos de la menor con la tela, Dazai la cegó por completo y para asegurarse incluso la probó para saber si los veía o no y la respuesta que recibió fue una que le complació.

Abriendo la puerta del apartamento con la mano de la pequeña, Dazai la guió hasta una sala después de ayudarla a quitarse los zapatos en la entrada. Con ayuda y un poco de miedo, Rose se situó enfrente de la habitación que había estado usando para dormir cuando se había quedado con Dazai.

-No habrás aún los ojos. - pidió Dazai mientras la cogía en brazos.

Esperando hasta la señal dada, la menor ni se movió, pero si comprendió que la estaban bajando al suelo después de haberla cogido.
Sus pies que estaban resguardados por unos calcetines blancos poco a poco fueron tocando algo suave y blandito, que en un principio la hicieron retroceder y recoger sus pies, pero una vez Dazai la iba acercando más al suelo, el contacto no era posible evitarlo.

-¿Qué tal se siente? - preguntó Dazai mientras veía a la pequeña ciega mirar hacía el suelo como si fuese capaz de sentir algo.

-Se siente raro... - dijo la pequeña mientras empezaba a tocar con las manos lo que antes solo tocaban sus pies. -..Es muy suave... - dijo asombrada.

Ambos adultos se miraron y sonrieron entre ellos mientras veían a la niña tocar y palpar la superficie suave en la que estaba.
Ambos se hicieron una seña de que uno de los dos fuese a por el otro presente, yéndose hasta el otro extremo de la casa para traerlo.

Esperando a que lo trajeran, Dazai optó por sentarse en el suelo mientras veía como la menor seguía tocando y acariciando la superficie suave.

Al cabo de un minuto, el pelirrojo apareció por la habitación con una gran bolsa de papel en manos, acercándose hasta la menor la cuál escuchaba como alguien se acercaba.

-Rose. - llamó Chuuya avisando a la menor de que quien se acercaba era el pelirrojo.
Escuchando la bolsa en las manos del pelirrojo, la menor se sorprendió por el sonido que hacía, hasta que el pelirrojo cogió sus manos y las llevó hasta la bolsa. -Abre la, y di nos que sientes que hay dentro. - la dijo el pelirrojo para dejarla sola con la bolsa y su ceguera.

Palpando como abrirla, la menor encontró la parte superior y notó que no tenía cierre ni nada así que metió su mano.

-¡Espera! - exclamó Dazai mientras sacaba su móvil y activaba la cámara, incitando al pelirrojo que no solía quería guardarse ese momento en su galería, sino también mostrárselo a su jefe. -Ya puedes. - dijo Dazai poniendo a grabar el vídeo.

La menor volvió a meter su mano en la bolsa y empezó a palpar que había dentro, notando también algo suave como lo que estaban tocando sus piernas.

-Saca lo. - dijo Dazai, sabiendo que Rose no sabría que hacer.

Acatando la orden que le había dado Dazai, Rose empezó a sacar algo de gran tamaño que hacía sonar la bolsa entera mientras lo extraía del interior de ésta.

Es Realmente Buena Idea [Bungou Stray Dogs]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora