Capítulo 3.
--------------------Probemos a tentar al contrario.
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—¿Si?
—¿Akutagawa-kun?
—Sí. ¿Qué desea Dazai-san?
—¿Tenéis aun Gin y tú vuestras ropas y libros de cuando erais pequeños?
—Sí. ¿Para que las necesita?
—No necesitas saberlo, solo lleva las a mi apartamento y no preguntes más.
*Llamada finalizada.*
—Bien, ¿dónde se han metido estos dos? — preguntó el castaño, mientras se encaminaba a ver dónde podían haberse metido su nueva hermana pequeña y subordinado.
Mientras tanto, la pequeña quedaba atontada mirando como el pescadero cortaba y servía el pedido al cliente, para atender al siguiente. Mientras tanto, el albino estaba revisando en un pasillo no muy lejos de donde estaba la pequeña, la leche, sus tipos, y precios. No quería coger una leche muy cara para así no hacer que Dazai-san tuviera que gastar más, pero al pensar en que seguramente la tomaría la pequeña, no podía evitar dudar sobre cual coger; en esos mismos momentos se daba cuenta de que se parecía a Dazai eligiendo que tipo de arroz era mejor.
La pequeña seguía hipnotizada con como el pescadero cortaba y tiraba los restos de pescado que no le eran necesario. En el transcurso en el que la pequeña veía como tiraba la cabeza del pescado a la basura, el castaño llegó y antes de llamar a la menor, observó la escena que estaba viendo, para luego ver la expresión sin vida de la pequeña.
Algo dentro de él se retorció al pensar en que ella llegó a ver esa misma escena pero con otros niños siendo utilizados como el pescado, mientras ella no podía hacer otra cosa que quedarse callada y quieta, mientras sentía como la sangre de su compañero la saltaba a la piel o tocaba sus pies en forma de charco.Zarandeando la cabeza para dejar de lado ese pensamiento, tocó el hombro de la pequeña, consiguiendo que ésta lo mirara con esos ojos sin vida, que poco a poco fueron recobrando la vida.
—¿Dónde esta Atsushi-kun? — preguntó el castaño, poniéndose frente a la escena del pescadero, impidiendo que la pequeña la viera y tuviera de nuevo esa mirada.
La pequeña señaló con su mano en dirección a su derecha, haciendo ver al castaño la espalda del albino, quien cogía al fin la leche que tanto le había costado elegir.Una vez localizó al albino, tomó el carro de la compra y se dirigió hacia donde el albino; quien lo ayudó a meter la leche en el interior del carrito.
—Lo siento Dazai-san, solo he podido ir a por la leche.
—No pasa nada, de paso iremos a por la carne. — animaba el castaño al albino, quien metía la última caja de leche en el carro.
—Sí. — decía el albino ante el tacto de las tibias manos del castaño en su cabeza.
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Es Realmente Buena Idea [Bungou Stray Dogs]
FanfictionLas mañanas nunca atraen nada bueno, pues significa madrugar, estresarse a primera hora de la mañana, y abandonar tu hogar y dulces sábanas. Y es aun peor cuando se trata del primer día de la semana, Lunes. Pues como cada Lunes, toca la rutina despu...